Como Morí (Corrigiendo)

Lucy

Volteé rápidamente.

-¿¡Por qué solo yo puedo verte?!-exclamé.

-No tengas miedo- dijo con un tono calmado.

-¿Qué no tenga miedo? Bueno, al parecer no tiene nada de malo ¡volverse loco!- dije enojado caminando de un lado a otro, pasando mis manos por mi cabello.

-No estás loco, solo tienes un... don-dijo la niña dulcemente, debía tener al menos trece años, pero tenía una cara madura.-Jack, es por esto que ellos te buscan. 

-¿Quién me busca? ¿Hay más como tú?-dije apoyándome contra la pared.

-Hay tres grupos de fantasmas: Los Sanctus, que tratan de proteger a los vivos. Yo soy de los Sanctus, más o menos, y mi nombre es Lucy, por si te preguntabas. También están los Nigrum, donde fantasmas y humanos hacen todo lo posible e imposible para llegar a sus resultados. Para ellos es matar o morir. Y por último están los Rebeldes. No quieren tomar bandos. Muchos son usados como espías o cosas secretas, pero normalmente están muy solos. A veces así lo prefieren, a veces no.

-¿Y cómo son los que, bueno, son como yo?

-Todos ellos pueden ver a los muertos pero tienen un poder más. Existen muchos grupos: Los Cambiadores, los Natura, los Ilusionistas, los Telekinesis, entre otros. Ciertos poderes se separan en categorías como los Cambiadores que existen los que se pueden transformar en animales o los otros que se pueden transformar en otras personas. En los Natura existen dos categorías también. Pueden controlar todos los elementos o solo uno. Han habido ciertos rumores de algunas personas que pueden controlar esos elementos que no se consideran como los cuatro principales, que son agua, tierra, fuego y aire. Por ejemplo la luz, la sombra, el rayo, entre otros. Pero son solo rumores. Yo rijo mi vida, o mi muerte, con la ideología de ver para creer-dijo y sonrió. Claramente estaba tratando de que me sintiera más cómodo.

-¿Y por qué tenemos estos...poderes?

-No lo sé. Se dice que fue un experimento químico que les hicieron a unas personas hace muchos años, o también se dice que es porque evolucionaron más rápido. No lo sé, solo sé que hay muchas teorías.

De pronto, se abrió la puerta.

-¡Te estuve buscando por todas partes!-exclamó Adam cuando entró- ¿Qué estuviste haciendo todo este tiempo?

-Eh, hablaba-le dije.

-¿Con quién?

Lucy se hizo visible.

-¡Oh! ¡Por todos los...!-exclamó Adam, saltando hacia atrás, cayendo al suelo.

-¿Recuerdas que vi a una chica que tú no podías ver hace unos minutos? Bueno, ella es Lucy. No estaba alucinando. No estoy loco, eso es bueno-dije con una pequeña risa irónica.

Luego de un largo silencio, Adam preguntó mientras trataba de pararse:

-¿Eres humana?

-Claramente no soy un unicornio, amigo.-dijo cruzando los brazos. Aguanté la risa.-Pero estoy muerta. Soy un espíritu o como les gusta llamarnos: fantasma.

-Está... bien... ¿Y por qué Jack pudo verte cuando estabas invisible?-preguntó Adam.

-Porque él es especial. Es diferente.

-Al parecer cuando tu mamá te decía que eras especial, era verdad, Jack-dijo Adam burlándose.

-Oh, cállate. Tómatelo en serio-dije poniendo los ojos en blanco.

-Me lo tomo en serio, hermano. Solo que era una broma que no pude resistir. Espera, me estoy mareando. Si me desmayo, no es gran cosa, ¿verdad?