BonHwa estaba fuera de sí desde que recobró la consciencia. Pareciera como si su alma hubiese abandonado por completo su cuerpo, sus ojos sin aquel brillo tan característico, sus labios resecos, su ropa aún ensangrentada y muchas pequeñas heridas. Se cuestionaba a sí misma sobre su manera de gobernar, quizás no defendió a su pueblo lo suficiente y ésto solo era una consecuencia de su mala administración.
Alguien tocó su puerta y por el aroma, sabía de sobra que era SeokJin. El beta entró con un desconocido para ella, su corazón se alegró cuando pensó que podría ser un sobreviviente de su pueblo y le podría explicar cómo ocurrió todo, sin embargo, cuando vió el logo bordado en su ropa, rápidamente un recuerdo llegó a su mente y la rabia se impregnó en la omega, tomó una espada que había en su habitación y amenazó sin titubeos al castaño.
—Dame una gran razón para no matarte ahora mismo – ella presionó la espada en el abdomen contrario – porque lo que tu reino ha hecho no se saldará con simples disculpas.
—BonHwa...– ella le interrumpió.
—Reina Bae – ladeó su cabeza – mi reino, mis reglas.
—Bon...– ella volvió a hablar.
—Guarda silencio, SeokJin. En ningún momento he pedido tu opinión.
El beta asintió cabizbajo, mientras que YeonJun tragó en seco.
—Sé que estás furiosa, yo también lo estoy, pero necesito primero que te calmes para que me puedas escuchar con claridad.
Ella bajó su arma en cuanto vió al chico sacar algunos pergaminos y entregárselos a ella. Los tomó y observó escritos, mapas y dibujos.
—¿Qué es ésto?
—Pertenecieron al rey Seung, majestad – habló el príncipe – nuestro abuelo.
—¿Qué? – estaba confundida, muy confundida.
—Tú perteneces a Phoenix, tu madre debería de ser la verdadera reina de ahí – él suspiró – y tú eres la última heredera de sangre pura al trono de Phoenix.
Se sentó en su cama para evitar que cayera. Sus emociones estaban totalmente revueltas, hace unas horas sólo era una reina que iba a buscar alimento para su pueblo y ahora tiene dos reinos a su poder y muchos enemigos detrás de ella.
—¿Quién eres tú y como es que sabes tantas cosas? ¿Eres un mensajero de la persona que mató a un pueblo entero?
—Soy Choi YeonJun, príncipe de Phoenix, tu primo – él se acercó a ella – créeme que no tengo ni la más mínima intención de hacerte daño, sólo quiero que recuperes lo que es tuyo y lo que debió ser de tu madre. Mi padre tiene hundido a nuestro pueblo en una extrema miseria y me ha obligado a heredar el reino tal cual él lo tiene. Él mismo me ha dicho cómo es que llegó al trono y nuestro abuelo lo ha escrito en algunos pergaminos.
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Kingdom » PJM
Historical FictionPhoenix estaba siendo destruido a manos de un tirano desde hace siglos atrás, sin embargo, una luna brillante de color azul les había dado un ápice de esperanza, dándoles un nuevo aviso. La vieja profecía estaba por cumplirse. "¡Alégrate, Phoenix! C...