Jimin sentía que algo andaba mal desde que Taehyung se alejó de él dos semanas atrás. Solía evitarlo a toda costa, si él estaba en el comedor, Taehyung se iba a su alcoba o si Taehyung estaba en el comedor y Jimin llegaba, prefería irse a comer a la cocina. Había abandonado las sesiones de arquería con BonHwa y la producción de vegetales y frutas que había comenzado en un huerto del castillo.
Todo estaba tan tenso y extraño que comenzaba a preocuparle. No dudó en ir con Namjoon a comentarle la situación pero el beta sólo le dijo que no sabía el origen de su raro comportamiento. Ya era de madrugada y Jimin no podía conciliar el sueño, se movía de un lado a otro en su cama. Se levantó y caminó hacia la cocina por un vaso de agua, pero para su sorpresa, Taehyung salía del castillo mirando hacia todos lados. Miró la espada recargada en la pared y vió las letras encriptadas en el metal.
—Bae SeoHo...– susurró – es del padre de Bon.
Alzó su vista y divisó a lo lejos a Taehyung correr, tomó con velocidad la espada y sin mirar atrás salió en silencio del lugar y corrió detrás de él. Su experimentado oído y olfato le guiaron hasta el alfa, cada vez se alejaban más de Hilgrand y en cierta parte le aterraba, sin embargo, guardó todos sus miedos y prosiguió su camino. Detuvo su andar cuando vió la bandera de Timoría en la ropa de algunos caballeros en una parte del bosque, avanzó un poco más para poder escuchar mejor.
—¿Y bien? – el hombre se cruzó de brazos – ¿Ya tienes la cabeza de Park?
—Aún no – habló Taehyung entre dientes – no he tenido la oportunidad.
Jimin se recargó en el árbol más cercano a él con la respiración entrecortada y un pánico irracional recorriendo su cuerpo. Inconscientemente sus ojos se cristalizaron y no pudo evitar soltar un sollozo ahogado. Aquel que consideraba su mejor amigo le estaba traicionando de una manera cruel, tormentosa y silenciosa. Se armó de valor y volvió a acercarse para escuchar de nuevo todo.
—Tus padres se acercaron a la reina para implorar por tu vida, ¿Y no has podido terminar una simple misión? Creo que no te importaría si los entierran vivos, ¿Cierto? – el beta suspiró ante el silencio del alfa. Sacó un bote de cristal y se lo entregó – antes de que preguntes, es el veneno más puro del reino. Puedes dejar caer algunas gotas en su comida o rociarlo en algún arma. Eso ya depende de tu creatividad.
—¿Es en serio? – habló incrédulo – ésto es una mala idea.
—No cuestiones mis decisiones, Kim – uno de los guardias tomó con agresividad la mandíbula del alfa – tú solo obedeces a mis órdenes si no quieres morir.
—¡Pues prefiero morir antes que seguir siendo tu maldito títere! – se soltó del agarre con fuerza, el aroma de Taehyung comenzaba a expandirse a causa de su enojo – no traicionaré a la persona que me brindó todo, que le brindó todo a más de la mitad del pueblo, ¿O ya te olvidaste quién le dió a escondidas de la reina un lugar en el castillo para que tu Omega diera a luz mientras tú estabas bebiendo en el pueblo?
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Kingdom » PJM
Historical FictionPhoenix estaba siendo destruido a manos de un tirano desde hace siglos atrás, sin embargo, una luna brillante de color azul les había dado un ápice de esperanza, dándoles un nuevo aviso. La vieja profecía estaba por cumplirse. "¡Alégrate, Phoenix! C...