capitulo 27

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—Hola princesa ¿Todo bien?

—Te haré una pregunta y quiero que me respondas con la verdad.

—Si claro ¿Qué sucede?

—¿Papá es un buen esposo?

Hubo un silencio desde el otro lado de la línea.

—¡Responde!

—Tu padre fue un buen padre y lo amo, Elizabeth.

—¿Estás diciéndome que él te ha tratado bien? ¿Qué siempre te ha respetado como mujer?

—Elizabeth, no lo entiendes.

—¡¿Cómo pudiste seguir con él?! ¡¿Cómo pudiste soportarle todo eso?!

—Sucedieron muchas cosas Elizabeth, como te dije no lo entendieras, tu padre trataba de hacer lo mejor para todos, trataba de cuidarnos como pudo.

—¿Cómo pudiste perdonarlo? —pregunté con la voz rota al igual que mi corazón.

—Hija —ella habló con demasiada suavidad—. Tú no lo entiendes.

—¡Te lastimó! ¡Físicamente te hizo daño! Perdiste un bebé por su culpa, fuiste al hospital tantas veces que ya las enfermeras te conocen por su culpa ¡¿Qué clase de matrimonio es ese?!

—Es tu padre, Elizabeth, deberías pensar mejor las cosas antes de juzgar.

—¡No! —grité con furia—. Estoy harta de las mentiras, estoy harta de los secretos y estoy harta de verlos actuar como los esposos perfectos cuando nunca fue así, pensé que su amor era incondicional, creía que el matrimonio perfecto existía y siempre tuve altas expectativas gracias a ustedes dos pero ahora...

—Nadie es perfecto hija, ni Dean ni yo somos perfectos, pero es nuestro pasado, un pasado que superamos, que sufrimos y que al final decidimos olvidar para ser felices, son cargas que tuvimos que soltar para ser felices y considero que deberías hacer lo mismo.

—No puedes ser tan ingenua.

—Hija por favor.

—¿Y con ese pasado tuvo el descaro de reclamarme por estar con Alexei ¿Es en serio?

—Son situaciones diferentes.

—Si claro, ustedes tan preocupados porque Alexei podría abandonarme en cualquier momento ¡¿Y él qué está haciendo?!

—Aunque no lo creas te está tratando de proteger.

—¿Echándome de su casa? Se notan sus ganas de protegerme, por favor dile a papá que ya no lo reconozco, que siempre creí que era el esposo perfecto pero... que lo felicito por la buena farsa que tenía montada, me lo creí por años.

Colgué el teléfono y me arrojé a la cama sin poder dejar de llorar, Alexei apareció de un momento a otro y se sentó a mi lado, acarició con ternura mi pierna y lo escuché suspirar antes de acostarse a mi lado.

—¿Lo sabias?

—Oye, necesitas calmarte.

—¡¿Lo sabias?!

—Cálmate Elizabeth.

—Alexei tú no lo entiendes, yo siempre creí que me merecía a un hombre como él, escogí a Royce porque pensé que era lo más cercano a mi padre que pude encontrar, viví engañada toda mi vida creyendo que... que me merecía a alguien como él, que mi padre era un buen hombre.

—Oye, no te diré lo que te mereces, no te diré que mereces a alguien como él o a alguien como yo, lo que sí mereces a alguien que te quiera, pero Elizabeth, por favor no vivas pensando que hay hombres perfectos.

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