Un punzante dolor en el cuello lo hizo despertar, sus ojos se encontraron con el techo de lo que parecía una tienda de campaña.
Taehyung
Su frecuencia cardiaca se disparó en el mismo instante en el que recordó todo lo que había pasado, cuando cayó del caballo con las mandíbulas del lobo de su hermano en su cuello casi quebrándoselo, su visión borrosa por la pérdida de sangre, y su respiración jadeante al momento en que veía como su omega era perseguido y atacado por lobos y él no podía hacer nada, trató de moverse, pero tenía el cuerpo amarrado con cadenas de plata sobre la colcha en la cual se encontraba recostado..
Comenzó a gritar.
¿Cuánto tiempo había pasado? ¿Qué había pasado con Taehyung y con el resto?
Escucho algo de ruido afuera de la tienda de campaña y su hermano apareció en la entrada.
—¡Cállate! — acto seguido Jungkook recibió un bofetón en el rostro.
—¡Suéltame!
—¿Para qué? para que te vayas sin pensarlo detrás del culo de ese omega, ¡sin importar que eso puede mancillar el honor de nuestro clan! —Doyum tomo a Jungkook del cabello y levantó su cabeza con un gesto violento, el menor lanzó un jadeo de dolor por el movimiento, sintiendo la palpitación de las heridas que tenía en el cuello volverse más intensas— ¿te haces una idea de todo lo que nuestra familia le debe al emperador? ¡¿de lo que podría pasar si se te asocia con la causa rebelde?!— Jungkook recibió otra bofetada.
—No me importa, denme por muerto yo que sé, pero Tae es mi omega, ¡necesito estar con él!
Doyum blanqueó los ojos—juro por todos los dioses que de haber sabido que eras tan débil y tan estúpido no te hubiera animado para que te sacaras las ganas de estar con ese omega de cuarta.
Jungkook gruñó—No eres mi padre, ¡déjame en paz!
—No, no lo soy, pero si soy la próxima cabeza del clan y no voy a dejar que nuestra reputación caiga porque mi queridísimo hermano se obsesionó con el culo de un omega ¿has visto los harapos con los que estas vestido? ¿Qué pasó contigo? —Doyum vio como los bonitos y enormes ojos de Jungkook empezaban a verse más brillantes... —¿estas llorando? ¿Qué mierdas te pasa Kook? La ultima vez que había visto a Jungkook llorar fue cuando tenía 11 años, recién se había presentado como alfa, fue la última vez que se le permitió llorar...
—Déjame ir Yum, por favor, déjame ir.
Esta era la forma en la que Jungkook casi siempre obtenía lo que quería de su hermano... una voz suavecita y sus enormes ojos aún más brillantes de lo que eran por estar llenos de lágrimas, nunca las dejaba rodar por sus mejillas, solo las aguantaba para que sus ojos se vieran más enormes y no se mancillara su orgullo como alfa.
Y... ¿Por qué Doyum siempre hacía lo que Kook quería?
El mayor de los hijos del general de provincia Jeon, estuvo seis años solo antes de que su hermano menor naciera, cuando este lo hizo, fue lo mejor que le pudo haber pasado, nació su compañero de juegos y la única persona que no pedía nada de él más allá de dulces y abrazos, la única persona que se animó a enfrentarse a su padre cuando consideró que era muy estricto con él. Doyum por sobre todas las cosas adoraba a su hermano.
—Esta vez no puedo complacerte Kook, estas siendo un insensato...te estas comportando como un cachorro—Doyum bajó dramáticamente el tono de su voz.
—¡Pero es mi omega!
—Tu omega está en la casa de los Jung.
—No me voy a casar con esa omega, Yum a diferencia tuya, mi sueño no es complacer a mi padre, me podrás llevar amarrado a la casa de nuestros padres—Jungkook dejó de mirar el techo de la tienda y buscó los ojos de su hermano, su lobo se mostró en todo su esplendor, en unos impresionantes ojos purpura, que revelaban que cada vez más se estaba saliendo de su cabales—pero no abandonaré a mi familia, no lo haré— las cadenas de plata comenzaban a escocer sobre su piel, al liberar más de su parte lobuna.
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Omega De Jade [Kookv] COMPLETA
FanfictionCorre la época de Joseon, en una sociedad dominada por alfas nace un omega hijo de nadie, Kim Taehyung cansado de ser tratado como menos solo por su condición de omega decide cambiar su historia y quizá la de su nación, con lo que no contaba era con...