Clases

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—Taehyung  ¿pasa algo? ¿por qué de repente estás robando cosas? 

Los palillos que iban hacia la boca del omega se detuvieron abruptamente en el aire, frunció el ceño y miró a la partera al otro lado de la mesa.

—¿Porqué hay unos pergaminos con el escudo de la familia de los Jeon en tu habitación?—siguio preguntando la beta.

Taehyung se maldijo internamente, había estado estudiándolos hasta muy tarde y se quedó dormido, por lo que no tuvo tiempo ni de arreglar su habitación antes de iniciar con todas las tareas de la casa lo más temprano posible y poder escabullirse a sus clases privadas con el alfa.

—Los dejó aquí el día que vino a ver como me encontraba— Mintió rápidamente, bebiendo un poco de agua para disimular su expresión.

—Y si es así... ¿por qué no los llevaste de vuelta? 

—Se me olvidó...

—Taehyung, ten presente que los Jeon son personas muy inalcanzables para ti—Por alguna razón Soe encontró oportuno lanzar una advertencia.

Taehyung apretó los labios pero no replicó a su comentario, él lo tenía perfectamente claro.

O no.

El pensamiento de ¿culpa? lo embargaba al recordar como esa tarde se había distraído por unos instantes de la lección que le impartía el alfa al pensar como se veían de bonitos los labios de este al hablar, tenía un coqueto lunar debajo de estos y eran rosadamente perfectos. 

Como se había relamido la boca al recordar el sabor del alfa impregnado en sus labios, hace ya un tiempo. ¿Si lo había besado esa vez?

¿Por qué estaba pensando en esas cosas? ¡debía concentrarse en aprender a leer y escribir!

Terminó rápidamente sus alimentos para no seguir escuchando a Soe recriminandole y meterse lo más pronto debajo de sus mantas.

Él sabía que Jeon Jungkook era inalcanzable para un omega como él.

Pero era sumamente complejo mantener este pensamiento cuando dos días después de la advertencia de Soe lo tenía nuevamente enfrente, sobre la manta, debajo del árbol, cerca al lago congelado donde desde hace tres semanas le daba las lecciones para aprender a leer y a escribir. Su avance había sido notorio, Taehyung cada día comprendía mejor.

Y cada día se le hacía Jungkook más bonito.

—Se nota que has estado practicando un montón, avanzas en los ejercicios super rápido— terminó por decir Jungkook después de media hora de haber estado practicando.

Las mejillas del omega se encendieron en un rojo muy bonito al escuchar los halagos por parte del alfa.

—Practico todas las noches, aunque es un poco difícil con la luz tenue de la veladora.

—Lo único malo de eso... es que vas a terminar aprendiendo muy rápido y ya no tendré excusas para encontrarme contigo.

El corazón del omega se volvió a agitar, como cada vez que Jungkook hacía ese tipo de comentarios "coquetos".

—Podemos seguir encontrándonos para que me preste pergaminos— Taehyung se sentía encantado con algunos de los pasajes que le había leído el alfa, para sus clases, y no le iba a mentir a nadie, queria seguir encontrándose con el alfa de ojos bonitos.

—¿Quieres comenzar a leer poemas?— preguntó el alfa, deslizando el dorso de su mano por la mejilla de Taehyung, un gesto que se había ido consolidando con el paso de los días y Taehyung no iba a mentir, ahora se le hacía necesario.

Omega De Jade [Kookv] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora