Jack Conway y...

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Luego de un baño y cambio de ropa, Conway seguia de mal humor por Gustabo y Horacio.

-¿Sigues molestos con ellos?.- le pregunté. Este estaba en el sofá viendo la televisión con el seño fruncido.

-interrumpieron en mi hogar, es obvio que estoy molesto.- respondió.

-venga admite que los quieres.- lo anime.

-es personal.- respondió seco. Yo sé que los quiere, los trata de forma distinta a los demás, como... Como un padre, quizás les recuerdan a sus hijos.

-¿Te recuerdan a tus hijos?.- pregunté antes de pensar. El me miro con el seño aún más fruncido. -¿Que?, ¿Crees que me hubiera involucrado conmigo sin saber quién eres o de donde vienes?.- pregunté. El parecía entenderlo. - se que hiciste lo mismo conmigo.-

-si.- respondió sin mas.

-¿Si que?.- pregunté. No sé si se refería a que me investigo o lo de sus hijos.

-a todo. Si ellos me recuerdan a mis hijos. Y si se quién eres y de dónde vienes.- respondió. Me senté en su regazo.

-sabia que los querías... Y lo siento tanto por tus hijos y esposa. Enserio lo siento.- dije Acariciándole la aspera mejilla.

-siento lo de tus padres y hermano.- dijo también.

-estamos igual de rotos, pero rotos juntos.- respondí tratando de animar las cosas. El me miraba con ojos brillantes.

-Te quiero ___.- dijo finalmente dejandome congelada. Joder, no sé que decir, es decir nunca tuve un novio o pareja. ¿Que coño tengo que decir?.

-¿Me quieres?.- pregunté con voz tiritona, los nervios me estaban jugando una mala pasada. Mierda.

-te quiero y no tienes que decir nada si no lo sientes.- dijo como si me leyera la mente.

-nunca tuve pareja.- dije en seco sin pensar.

-¿Cómo?, Imposible. ¿Eras virgen?.- pregunto atónito.

-No... Joder, no era virgen. Solo que yo solo follaba y no me involucraba por qué siempre caminabamos de casa.- expliqué el parecía entenderlo.

-basicamente lo que hace una pareja es todo lo que hacemos.- dijo. Mirándome. Otra ves ese cosquilleo en el estómago floreció.

-Te quiero.- solté finalmente. Si, lo quiero. - te eh querido desde que me abrazaste por primera ves en el hospital.- explique al recordar. Estábamos en un cuarto del hospital, después que me atacarán.

El me acaricio la mejilla.

-no huyas por favor, si te vas, no dejaré de buscarte.- dijo al recordar lo que le había confesado que pensaba.

-no lo haré.- respondí. El me besó suavemente. Al separarnos nuestros labios hicieron un sonido tan satisfactorio.

tomándome en brazos en la poscion que estaba me llevo a la cama.

Solo nos acostamos abrazados. Puedo decir que después de tanto tiempo... Creo que estoy feliz. Sonreí y me quedé dormida.

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La mañana siguiente desperté demasiado a gusto. Mis ojos se abrían lentamente. Estaba recostada sobre el pecho de conway escuchando su respiración rítmica. No podía dejar de pensar que estoy feliz así tal cual, en el pecho de este hombre dormido, tapada con las sábanas, vestida de bragas y una polera de pijama. Estoy feliz mamá y papá, alfin estoy feliz Christian. Cerré los ojos como habitualmente lo hacía para hablar con ellos.