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*NARRA CONWAY*

______ se sentía un poco mejor a los días. Me rompe el corazón la perdida de T800... Era el mejor perro... Siempre le agradeceré a ese can lo que hizo. Salvó a mi esposa.

-mira lo que compre.- solté animando a mi esposa. Ella estaba mirando la tv. Miro lo que le tendia en las manos y sonrió dulcemente.

-no vestirme a mis hijos como tú...- soltó suave. Eran dos trajes de camisa y corbata.

-¿Cómo que no?.- pregunté confundido.

-parecerán dos ancianos bebés.- soltó sonriendo.

-tendran traje...- afirme. -y esto.- levanté sus dos implementó. Ella soltó una carcajada.

-¿Dónde las conseguiste?.- pregunto cogiendo las dos pequeñas porras de gomas.

-eso no importa... Serán unos jefes desde los pañales.- dije muy seguro de ello.

Pero siempre estaba pendiente de ella luego de lo que pasó... Nadie sabe que coño quería el capullo que entro... Lo bueno es que ya no lo hará más por qué la bala en la cabeza no se la saco ni dios.

*NARRA _____*

Se que Jack trata de animarme y lo logra cada ves que quiere.
Aún que siempre me dolerá la perdida de mi cachorro... Almenos se que está en un lugar mejor.

Jack parecía muy contento en comprar ropa pequeña a montón. Ya llevaba dos trajes, uno de camisa y corbata y otro de marine. ¡Si, consiguió dos putos trajes de mariners tamaño bebé!.

Horacio y Gustabo me llamaban cada que podían o se pasaban a verme. Me aburria muchísimo estando en casa...

-¿Podemos comer pizza?...- pregunté hambrienta. El sonrió hacia un lado.

-lo que quieras muñeca.- soltó jack feliz al ver que recuperaba el apetito y no era necesario que prácticamente me obligará a comer diciendo "¡mis hijos se mueren de hambree!" Todo drama. Aveces me hacía gracia como lo decía.

Cenamos pizza y luego fuimos a la cama. Jack ah pasado día y noche pendiente de si alguien entra.

-intenta dormir hoy...- le susurré acariciando su rostro áspero por su barba. El miro mis ojos y suspiro.

-vale... Lo intentaré.- soltó. Se le veía agotado.

En la cama a Jack le encantaba acariciar mi vientre. Me relajaba cada ves que lo hacía hasta quedarme dormida...



Desperté a plena noche... Me... Siento algo extraño...

Corrí las mantas a un lado y yo ví... Antes de hacer nada fuertes dolores me atacaron.

-ah.- me queje. -jack...- solté apenas. El estaba muy dormido y relajado.
Los dolores eran punsante y repentinos... Ostia... Prefiero una bala, prefiero mil veces una bala.

-jack...- solté otra ves con la respiración contenida. El no despertaba estaba muy sereno. Una ira me atacó. -¡Jack!, ¡Despierta joder!.- solté alto y sosteniendo mi vientre. El despertó de un salto.

-¿Q-que pasa?.- pregunto mirando a todas partes.

-ah... Me duele...- solté con mis ojos cerrados.

-mierda, mierda...- susurro alarmado. Avri los ojos al no notar reacción de su parte.
El solo me miraba sin saber que hacer.

-¡muevete!, Ah...- solté cabreada al verlo solo mirándome.

-¡¿Que hago?!...- pregunto.

-joder tu ya... Tuviste a una esposa embarazada...- solté irritada.

Jack Conway y...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora