capítulo treinta y ocho.

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- pareces un viejo de ochenta años, llendo a comprar a la tienda con su bisnieta a la que dejaron a cargo de que el abuelito no se caiga. - habló con la boca llena de pastel, un muy entrometido rubio, seguido por su montón de carga, el cual asentía a su lado.

- ¡Te escuché Horan! ¡Deja de burlarte de mí marido! - canturreó desde la cocina el moreno, luego sus pasos se acercaron hasta que su figura cruzó el umbral y se dejó caer en uno de los sofás.

- ¿Por qué siempre debes fastidiar a Liam, bebé? - dijo el otro castaño, dándosela de inocenton en cuanto el moreno les dedico una mala mirada.

- pero si tú haz repetido ese chiste desde la mañana, solo confirmaba tus palabras.

- aún no entiendo cómo es que ustedes dos son mis amigos. - musitó Liam, llegando hasta donde ellos estaban, la silla de ruedas había sido reemplazada, la movilidad de sus extremidades era cada vez más fluida, solo necesitaba tener un soporte, por lo que le dieron un bastón ortopédico, Darcy venía detrás de él, con sus brazos extendidos hacia los costados de Liam, la niña se había tomado en serio el trabajo de cuidar de su padrino, a tal punto, que era una lucha hacer que ella no se la pasé detrás de él todo el día, con la terquedad que reinaba su pequeño cuerpecito, se rindieron y la dejaron ser.

- ¿Ayudo a sentarte Li? - pregunto con su ceñito fruncido.

Sonriendo, el castaño se safó de su bastón para cargar a su pequeña. - no es necesario, mí amor, gracias. - se acercó al sofá más cercano que tenía y se dejó caer con cuidado en el.

- ¿Entonces, como es eso de que ustedes dos se van a casar? - preguntó con curiosidad el moreno hacia la pareja quienes se ruborizaron al instante.

- Josh me lo pidió hace apenas una semana. - contó mientras era rodeado por el brazo de su ahora prometido.

El pelinegro se encargó de cortar la atmósfera romántica.
- así que el gran Josh Devine ha sido agarrado de las pelotas y ahora tiene una soga en su cuello, igual que tú Liam. - se burló señalandolo con su índice. - el único que permanecerá como todo lobo solitario sin alguien que lo dome seré yo. - cepilló sus uñas.

- ¿es eso o es que nadie te pasa ni la hora? - dijo el castaño, haciendo reír a los demás mientras que el ahora burlado, lo mataba en su interior. - ya, Shawnie, solo bromeaba...

- te haré inválido de nuevo, Payne. No me jodas. - se cruzó de brazos.

- ya, Liam tu no molestes a Shawn con su pobre relación amorosa y tu Shawn, ya deja de amenazar a mí marido con dejarlo inválido. - regañó el moreno.

- lo sentimos, Zayn. - dijeron a dúo.

- ¿Y ustedes cuando se casarán, Zayn? - preguntó el rubio cambiando de tema.

- bueno, creo que dentro de unos meses, pensamos en hacerlo después del cumpleaños de Darcy.

- ¿Cuando es el cumpleaños de Darcy?

- el veintiocho de marzo. - respondió el ojimiel. - pensamos casarnos el veinticinco de abril, ya lo hemos hablado y es una buena fecha.

Todos asintieron en acuerdo con la pareja.
- ¿Quién será el padrino? - cuestionó el castaño

- es obvio que seré yo, Josh, por favor. - habló con superioridad el pelinegro. - yo seré el padrino y tu la madrina.

- ¿Por qué yo tengo que ser la chica?

- porque tú dejas que Niall te la meta.

- ¡Shawn! - gritaron Zayn y Liam mientras esté último tapaba las orejitas de la menor.

bajo el mismo techo. (Ziam MAYNE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora