bajo el mismo techo. (Ziam MAYNE)

capítulo veintidós.

Siendo acobijada con cuidado de no despertarla en el proceso, Darcy quedó recostada en su cama. El castaño besó su frente y salió del cuarto, para ir a ver cómo se encontraba su, ahora, novio.

Luego del ataque de llanto que le agarró, decidió salir afuera y sentarse en su lugar, el cual usaba con frecuencia.

Liam abrió la puerta despacio, intentando hacer el menor ruido posible y apoyado en el marco observó al moreno, quien seguía aferrando aquel cuadro contra su pecho, mientras su vista se perdía en el horizonte.

- ¿Mí amor? - llamó la atención del azabache. - ¿Cómo te encuentras?

Se acercó y se sentó a su lado.

- cuando sepa cómo me encuentro, te lo diré. - respondió, apoyando su cabeza en el hombro de su pareja. - son muchas emociones juntas, Liam.

- ¿Quieres hablar de ello, cariño? - preguntó con suavidad.

El moreno pareció pensarlo, para luego sorber su nariz y limpiar sus lágrimas.

- me siento, feliz y triste a la vez, estoy enojado y también impotente, no lo sé con exactitud. - dijo frunciendo su precioso ceño. - estoy feliz, porque te tengo a ti, también a darz. También estoy feliz por esto - levantó el cuadro. - pero también estoy triste porque no tengo a Louis, tampoco a Harry. Enojado con la maldita vida que me los arrebató sin piedad alguna, e impotente porque no puedo hacer nada al respecto. - su voz salía ronca y en un tono bajo. - no te he mentido cuando dije que no se qué sería de mí sin ti, Liam. - posó su vista en el mencionado. - si tú no estarías aquí, justo a mí lado, yo... Probablemente no estaría en este momento aquí. - su voz volvió a quebrarse.

El castaño rápidamente lo atrajo, hasta sentarlo en su regazo y abrazarlo con fuerza. Sintió la piel del moreno hervir y se dio cuenta de que estaba con fiebre y por consecuencia, estaba delirando, impulsandose con sus pies, para que el sillón comience con el vaivén.

Zayn no dudó en abrazarse al chico y esconder su rostro en él cuello de éste.

- no quiero que vuelvas a pensar nunca más en algo como eso, ¿Entendido? - pidió afligido por la confesión del pequeño entre sus brazos. - estás tan roto, cariño. Y yo más que nadie entiendo por lo que estás pasando, pero quiero que entiendas una cosa, Zayn. - lo alejó un poco para verlo a la cara. -  no pienso permitir perderte a ti también. Te amo, Zayn. Tu y Darcy son mí familia ahora, son todo lo que tengo y no pienso perderlos a ninguno de los dos. - sentenció. - yo voy a repararte, mí amor. Se que costará, pero me arrancaré pedazos de mí ser para completar el tuyo si es lo que hace falta.

El moreno se aferró con fuerza al cuello de éste y juntó sus frentes.

- nunca me dejes, Liam. Por favor.

- nunca voy a dejarte, amor. Te lo prometo.

Selló su promesa con un tierno beso, para luego levantarse - aún con Zayn aferrado a él. - y dirigirse adentro de la casa para llevar a su pequeño a su cuarto e intentar bajar esa fiebre que estaba matando a su contrario.

••••••••••

Zayn temblaba bajo las cobijas, balbuceaba y deliraba cosas sin sentido.

Tenía un sueño tras otro, en donde parecía tener miles de flashbacks en donde todos aparecía Louis. Pero cuando quería abrazarlo, este se esfumaba.

- ¡Lou, por favor! - pidió ya rendido, sobre sus rodillas.
- zaynie ¿Pero que estás haciendo, torpe? - la aguda y divertida voz de Louis hizo eco en todo el lugar.
- ¡Lou! ¡Por favor, no te vayas!
- oh, sunshine. - el castaño se acercó a él y por fin lo abrazó. Zayn se aferró a el, no queriendo dejarlo ir. - ya no sufras más por esto, bebé.
- no puedo, Lou. ¿Es que no lo entiendes?
- Zee, esto está haciéndote mal, no puedo verte de esta manera, debes estar bien, yo lo estoy. - sonrió. - estoy bien, Zaynie. Ambos lo estamos. Estamos en paz, porque sabemos que nuestra bebé tiene a sus dos guardianes consigo.
- p-pero Lou, ellas los necesita también...
- y aquí estamos, junto a ella, junto a Liam, junto a ti.
- Lou..
- basta, cariño, hazlo por mí ¿Si? Sigue adelante y llévame aquí - tocó el lugar en donde va su corazón. - sigue adelante, amor. Siempre voy a cuidar de ti, los dos cuidaremos de ustedes. - el castaño dejo un suave beso en la frente del moreno, como si del roce de una pluma sobre su piel se tratase y comenzó a alejarse.
- ¡No! ¡No, Lou! ¡No te vayas! - intentó acercarse pero no pudo hacerlo.
- cuídate, tonto y cuida a Liam también, Darcy los necesita, contamos con ustedes por ello. Te amo, hermano.

- ¡Lou, por favor! - abrió sus ojos y fue atraído por unos brazos cálidos, que lo llevaron a la realidad de nuevo. - L-liam..

- tranquilo, mí amor, todo estará bien. - prometió. - son los efectos de la fiebre.

- e-era Louis, Li. - contó. - Louis estaba aquí, conmigo.

- él siempre está aquí contigo, amor. - acarició su rostro. - ¿Sabes que una persona nunca muere si nunca la olvidas? Si siempre lo llevas en tu mente y en tu corazón, la esencia de esa persona, seguirá viviendo en ti y en todos los que lo quisieron.

El moreno escucho con suma atención cada palabra, sintiéndose un poco mejor con lo recién aprendido.

Louis seguiría viviendo, al igual que Harry, mientras los mantengan en sus memorias y sus corazones.

Pero como el castaño le había pedido en su sueño, el debía seguir adelante.

- estaré bien para ustedes, Liam. Lo prometo. - dijo firme. - saldré adelante de esto.

- lo sé, mí vida. - apoyó. - lo haremos juntos.

- los tres viviremos por Lou y Hazz lo que a ellos no se les permitió vivir.

- cuenta conmigo en todo. - secundó el castaño.

- tu estás en todos mis planes a futuro, Liam. No podría elegir a alguien más. - el castaño le sonrió antes de abrazarlo con fuerza y besar su mejilla.

Gracias, Lou. Te juro que cumpliré con lo que me haz pedido. No voy a decepcionarte, ni a ti, ni a Harry.

También te amo, hermano.

es momento de seguir, tengo una familia por la cual luchar.