CAPÍTULO 8 (1/2)

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Título: "just the two of us" by Grover Whasington JR

-"solo nosotros dos, podemos hacerlo si lo intentamos"

p.o.v.MinGi

Conduje hacia mi edificio y paré mi moto en la plaza de parking que tenía solo para mí. Cuando salí vi como SeongHwa cerraba de un portazo la puerta de la casa y me miraba. Vino hacía mí y se plantó enfrente mío con la mirada seria.

-¿Dónde está todo el mundo? – preguntó.

-Nos distes la mañana libre – dije y él suspiró.

-Pues te vienes conmigo – me dijo sin mediar palabra y rodeando el coche para sentarse en el copiloto de mi coche.

-Tío, a ver si follamos y dejas de estar de mala ostia - le dije cuando me senté de nuevo frente el volante.

-Mi novia me pone los cuernos MinGi - me dijo suspirando SeongHwa y mirando al frente, yo lo miré con tristeza - ya ni de follar tengo ganas.

Yo suspiré. Hubiera hablado con él pero mi amigo negó con la cabeza, indicándome que no quería que dijera absolutamente nada del tema, así que me callé y le di su espacio. SeongHwa me puso el GPS sin decir nada, y yo comencé a conducir en esa dirección. L

-¿Dónde vamos? – pregunté a SeongHwa el cual estaba con la cabeza agachada liándose un cigarro con tranquilidad.

-A ver a HeeChul – dijo él con tranquilidad y yo lo miré de reojo pasándose la lengua por el cigarro. Yo suspiré - ¿Que te pasa?

-¿Dónde coño esta, SeongHwa? – le pregunté mirándolo de reojo y dejando mi mano en el cambio de marchas – Llevamos tres años sin saber nada de él y empiezo a estar hasta los cojones – dije con total sinceridad.

-Cuida tus palabras – me dijo llevándose el cigarro a los labios y dejándolo ahí mientras buscaba su mechero en sus pantalones, siempre lo perdía – que las ostias que nos daba cuando hablábamos mal eran guapas.

-Me da igual eso ahora. Se supone que es nuestro padre, nos quiere ¿no? ¿Pues qué hace que no da señales de vida? – dije mirándolo de reojo y él me metió la mano en el bolsillo para buscar el mechero - y tú no me metas mano. Como se lo diga al YunHo, tiemblas.

-No sé porque no da señales de vida, MinGi – dijo encendiéndose el cigarro y echando el humo por la ventana, ignorando mi insinuación de que entre él y YunHo últimamente pasaban cosas extrañas, yo lo miré por unos segundos antes de parar en aquel descampado al lado de lo que parecía una fábrica agrícola antigua y abandonada - He estado pensando – dijo serio - ¿Y si tiene algo que ver papá con BlackPink?

-No creo. Los quería destruir, reducir a la nada, no tendría sentido que fuera de los suyos– dije con sinceridad.

-Por eso tienes más sentido incluso – dijo encogiéndose de hombros.

-No te sigo.

-Nada, déjalo, solo hablo desde la confusión, supongo - dicho esto y SeongHwa salió del coche.

Salí del coche y me senté a su lado en el capó a mirar mi móvil y responder unos cuantos mensajes. Me extrañaba no tener ninguno de Sana, por un lado, me molestaba un poco, por el otro me hacía tener más ganas de buscarla.

Un coche lujoso aparcó delante nuestro y de él salió HeeChul. Era como nuestro mensajero, desde que hacía tres años que no veíamos al jefe, y SeongHwa, el capo al mando y yo, el segundo al mando, hacía tres años que no teníamos ni idea de él. Solo nos comunicábamos con él a través de HeeChul.

UTOPIA; 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora