UTOPIA; 2

CAPÍTULO 34 (1/2)

p.o.v.BangChan

Bajé las escaleras de mi casa seguido con Miso, que me perseguía como loco por recibir su desayuno. Me metí en la cocina y lo primero que hice fue ponerle la comida en su bol y después me fui a buscar mis pastillas.

Esa noche me había tocado descansar un poco más, pero ya nos habíamos puesto todos los que no habíamos hecho turno de noche en marcha. Entendía porque debíamos seguir buscando a Hyuna, pero sinceramente creo que la estábamos cagando con eso de no utilizar a Jun.

Era un niño, ¿y qué? Habíamos escuchado mil veces la historia de la tía Lisa, de como ella misma le había cortado un puto dedo a BeomGyu para recuperar a su hijo. No entendía porque no hacíamos algo como eso. No mataríamos al niño, éramos mafiosos, pero no unos putos animales. La verdad es que el sentimentalismo que estábamos teniendo con Jun no lo llegaba a comprender. Pero como no era de los jefes lo único que podía hacer era agachar la cabeza y asentir.

Estaba por hacerme un café cuando mi teléfono se encendió con una llamada entrante de SeHun en mi pantalla.

-Dime – le puse el altavoz mientras encendía los fuegos.

-ChanYeol, Jeno, DaHyun, tú y yo somos el siguiente turno de rescate – me dijo – vente a casa de ChanYeol, estamos los cuatro desayunando juntos porque DaHyun nos tiene que contar algo.

-Pobre, DaHyun, está rodeada de testosterona hoy – dije riendo y cogiendo un cigarro liado de mi cajetilla, en la cual ya los dejaba siempre hechos.

-Nah, si somos sus favoritos – dijo riendo – yo el papá, ChanYeol el que le compra la merienda siempre, Jeno el crush y tú el best friend forever.

-¿El crush de DaHyun es Jeno? – dije prendiéndome el cigarro.

-La verdadera pregunta aquí es, ¿de quién no es el crush Jeno? – suspiró – el cabrón las tiene a todas loquitas.

-Tu eres un envidioso – dije riendo – tranquilo, a NaYeon le pones muy tonta.

-Aixxx, que bien, quiero llorar, no he perdido el encanto.

-Eso nunca.

-También soy el tuyo, que yo lo sé – me dijo riendo – si te fueran los tíos me follarías, yo lo sé.

-Me has pillado – dije riendo y escuchando la puerta abrirse – te dejo, ha llegado la churri.

-Dile que se venga, que estoy yo – me dijo riendo.

-Cabrón.

Dejé el cigarro en el cenicero y me fui a verla. NaYeon estaba en la entrada, dejando la chaqueta y la mochila colgadas de los percheros de la entrada. Se le veía cansada, pero en el momento en el que alzó la mirada para mirarme noté que había algo más que cansancio en sus ojos.

-Hola – me dijo dándome un beso en la mejilla y dispuesta a andar hacia las escaleras.

-Hola – dije intentándola alcanzar - ¿todo bien? – le pregunté poniéndome delante de ella para que dejara de andar dirección a las escaleras – no haces buena cara.

-Solo estoy cansada, Chan – me dijo para que me apartara de su camino.

-Ya – yo le cogí la mano cuando se subió al primer escalón, ella paro, pero no se giró a mirarme – Voy a desayunara a casa de ChanYeol, ¿te vienes?

-No, no me apetece – dijo aguantándose las ganas de llorar – que vaya bien, diviértete – dijo cortando la conversación, queriendo huir del sitio, soltando sutilmente mi mano.