UTOPIA; 2

CAPÍTULO 22

Título: "dusk till dwan" by Zayn (feat.Sia)

-"quiero ver el sol brillar sobre tus pecados"

p.o.v.ChaerYeong

Subimos al avión esa misma mañana, habíamos notado un poco de movimiento en los aeropuertos que nos ocultaban a todos los que no éramos del todo legales. Teníamos miedo de que pudiera ser SeongHwa moviendo hilos para llegar hasta donde ayer por la noche decidimos ponernos en marcha.

Al parecer había una gran cantidad de dinero que SuHo siempre mantenía en pleno movimiento, ya que no es que solo tuviera un maletín con grandes cheques de dinero, sino que también contenía documentos a nivel de estado y mundial que podían ser de gran importancia y que valían más que un salario de uno de los líderes de la mafia.

Así que partimos pronto. Miré a RyuJin subir en el avión y yo me quedé al lado de mi madre fumando un rato de un cigarro las dos. Mamá jamás había fumado, pero ahí estaba, compartiendo uno conmigo porque los nervios últimamente los tenía a flor de piel.

-¿Quedaste con aquel chico al final? – le pregunté dejando ir el humo del tabaco hacia arriba mientras se lo pasaba.

Sus ojeras seguían siendo pronunciadas, su voz muda y calla y las sonrisas cada vez las tenía más pequeñas, como si se tuviera que obligar a sonreír o si lo hacía era porque se había distraído y evadido tanto que ni se había dado cuenta de aquella pequeña curvatura en sus labios.

-No puedo hacerle eso a tu padre, ChaerYeong.

-Papá te iba a quitar todo lo que conoces porque quería el puto poder, mamá – le dije mirándola enfadada por sus palabras mientras ella clavaba la mirada en el avión con distracción - ¿Cómo que no puedes rehacer su vida?

-Yo no soy como él, ChaerYeong – me dijo negando con la cabeza – jamás lo he sido.

-Pues yo no lo pienso perdonar si despierta – dije mientras miraba como le daba una calada para después darme el cigarro – me niego a perdonarle lo que te hizo.

-No necesito que me defiendas, cariño – yo miré de reojo a mi madre – tu haz lo que quieras.

-Pues no lo voy a hacer, por lo que pensaba de mi – dije con firmeza tirando el cigarro y pisándolo después.

-Y estás en todo tu derecho – me dijo acariciándome con la mano la mejilla para después quitarme un par de mechones de pelo de mi cara y ponerlos detrás de mi oreja – tienes otro tipo de sonrisa desde que te van los tíos.

-La frustración por ser medio hetero, mamá – dije riendo y ella lo hizo también.

-¿Así que te gustó también SooBin? – preguntó sin dejar de acariciarme el pelo marrón largo.

-Puede, pero también lo hacía YeJi.

-Tal vez lo hacían los dos, pero te decidiste por uno – dijo encogiéndose de hombros y yo le di la razón. Puede que sí.

Subieron las dos al avión y andó hasta visualizar a RyuJin sentada al final del avión con un libro en sus manos y los auriculares puesto. Se puso delante suyo y RyuJin no alzó la mirada, solo se concentró en leer su libro de príncipes y brujos enamorados.

Suspiré y le cogí del brazo para que se levantara, ella lo hizo con el ceño fruncido. Yo sonreí como una niña pequeña y me senté en el asiento del avión. Después hice que cayera en medio de mis piernas abiertas mientras yo la abrazaba.

-En fin – dijo RyuJin echándose bien sobre mi cuerpo para ponerse cómoda entre mis piernas – de verdad que tienes un problema con eso de que te preste atención.