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./[ANTES DE EMPEZAR]\
La historia contada a continuación si bien es ficticia, contiene algo de realidad en ella. Cada personaje es un fragmento, que uniéndose conforman un ser humano. Fuera de eso, contendrá algo de +18 en ciertos capítulos, constará de dos temporadas, un capítulo exclusivo de Multimedia entre otros detalles.
Sin más vacilar, sean bienvenidos, soy Abigail y deseo de corazón que te diviertas con este pequeño cuento.
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•Un nuevo año comenzó, el pasado fue una poronga, como el anterior y el anterior... de echo como todos los años. En fin, a lo que vamos.
Me llamo Sofia Akemi Romero, soy una chica morocha de cabello largo color negro con puntas verdes y ojos de chocolate, empecé a cruzar cuarto año en una secundaria donde acostumbran rezar antes de ingresar a las aulas, me criaron con esa adoración. Vivo en casa de mis padres por el momento, me gusta dibujar, cantar y de más, pero claro esta, al ser todo tan perfecto, llega a ser demasiado aburrido.•Como siempre, el primero de enero se come el asado recalentado de año nuevo y el vitel toné que sobro, aunque todos saben que queda pura mayonesa, eso con un buen vaso de Manaos salimos adelante.
Este año me espera una tortura, ojala pase algo interesante como, no se.. que se incendie el instituto, que alguna profesora se acueste con un alumno, que alguien quede poseído en plena misa o yo que se. Y no, no es por ser forra, es que ya paso de todo en ese colegio, el año pasado reportaron que una alumna se estaba drogando con otros profesores en la sala de maestros, quien lo diría.
Después de almorzar me fui a mi cuarto, que digamos mis viejos no están muy deacuerdo con eso, siempre dicen que no hago un carajo en la casa y puede que tengan razón, pero es que me gana la paja y mi cama llora cuando paso mucho tiempo lejos de ella.. no puedo hacer nada para evitarlo, ¡no es mi culpa!. Después del sermón que me dieron por fin me acosté a mirar el cielo desde mi ventana... ¿Podría salir al patio? sip, pero bien dije que soy pajera, ¿no?
Pasado el mes por fin se juntaron las ganas de salir con unos amigos, una de ellas llamada Isabela que siempre venia a casa, es mi mejor amiga desde pequeñas, estoy por salir junto a ella y un grupo mas de chicos a la costanera, por fin me puedo alejar de esta casa, me agrada y aprecio las cosas que hacen por mi pero ya fue.
—Por fin llegas Isa, ¡vamos que nos están esperando!.
—¡¡Ya voy ya voy!!. —
Ya estando en la costa empezamos a caminar hablando tonterías, contando los futuros proyectos que tendría el colegio, de la novia de mi compañero que lo dejo hace unos días, bla bla bla. Paramos en una heladería, no falta el chrtito que pide solo uno de vainilla con salsa de caramelo o un "Banana split", mientras nosotros nos mandabamos bombas de chocolate y dulce de leche, nos gusta mucho a Isa y a mi mezclar sabores en vacitos para hacer sopa de helado, sin dudas es asombrosa, me banca en todas, daría la vida por ella.
Salimos comiendo los helados tranquilamente, de tanto hablar no nos dimos cuenta que cayo la noche.
Siempre que tenemos este tipo de salidas, esta el idiota que boludea con cosas paranormales o malditas, yo no le doy importancia a semejante boludez, después de todo se que solo son bromas y no es real lo que dice, nunca vi un fantasma o ente raro en toda mi vida, eso que fui con estos pajeros a supuestos lugares malditos y nada solo policías corriéndonos del lugar y uno que otro señor de la calle que usaba el lugar como hogar. Pero a Isabela le molestaba hablar de esos temas, ella perdió a varios familiares y afirma verlos en distintos lugares, al toque me di cuenta que se sentía incomoda, empezaba a soltar unas pequeñas lagrimas y muecas a medida que contaban las historias, aparte de que no comía su helado.
—¿Bueno podes cortala ya con los cuentitos? ¿no ves que le pones mal a Isa?
—Bue es un chiste nomas, no se bancan nada ustedes.— Dijo uno de ellos en tono de burla
No soy precisamente una chica paciente, si algo no me gusta voy al cuello, fácil, no me ando con vueltas. Lo empuje casi sin fuerza contra una de las barandas de la costa, el idiota me devolvió el empujón tirándome contra un árbol, en poco tiempo se armo un bardo tremendo entre el y yo, los demás lo sujetaron cuando se descuido, conociéndolo saben que pronto se armaría la podrida en plena costanera. No estaba cómoda después de ese momento, ya quería irme, me picho demasiado que se metiera donde no le corresponde aun sabiendo que a uno de nosotros le molesta aquel tema, agarre mis cosas me despedí a distancia con la mano y me fui a la primera parada de colectivos que encontré, ahí me quede, me puse los audífonos para que la espera no sea tan aburrida.
—Mas boludos no pueden ser.. con amigos así quien quiere enemigos. Pobre de Isa, me gustaría ayudar pero solo puedo defenderla, man que bajón.. ni hubiese venido, son re pesados cuando quieren.. —
Suelo hablar sola cuando algo malo ocurre, aunque prefiero llamarlo pensar en voz alta. Estaba caminando de lado a lado pensando en mil cosas que me gustarían que pasaran, todo es rutinario, la típica salida donde todo sale mal o termina demasiado bien, después llegas a casa, te duchas, comes, duermes.. si tienes colegio vas y al regresar es todo de nuevo.. que fastidio. Algo me toco el hombro, al darme vuelta vi que era Isa, estaba con los ojos llorosos, me saque los auris y le quede mirando, ¿me siguió o que?..
—Al fin me haces caso, ¡te estaba gritando!.— Estaba algo frustrada por lo que veo
—Uh perdón.. estaba en mi mundo disculpa.
—Ya, no importa.. vine porque no quiero que vuelvas sola a casa y no quería quedarme mas tiempo.—
Ella siempre se preocupo por mi desde que la conocí, se quedo sentada al lado mío, agarro uno de mis audífonos y se lo puso, pinto una sonrisa como si no hubiese estado aguantando esas lagrimas, esta mina me sorprende.
—Eu, pone una buena canción para escuchar juntas, tenés un buen gusto en eso como yo jaja.—
Debo admitir que me saco una sonrisa, puse una de Sub Urban, nos gustan músicas de ese estilo, ella movía las manos al ritmo y yo solo miraba a ver si el colectivo llegaba de una ves. tengo la leve sospecha de que al llegar me esperan mis padres pidiendo una explicación.. y mañana a la escuela. ¡Rutina de MIERDA!
Me pregunto si algún día todo esto puede llegar a cambiar..
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A Friendly Demon
RandomSofía Romero es una chica aburrida de su vida cotidiana, anhela que hayan cambios en esa rutina que debe cumplir, para su fortuna (o desgracia) su deseo se cumpliría de una manera un poco.. diferente, a lo que ella podría pensar. Historia de demonio...