Mira George - Serás imbécil Weasley

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El segundo día, Afrodita vio que tampoco hacía falta arreglarse mucho. Además, iba a meterse con Fred. Se puso unos leggins aferrados a su cuerpo, y una camiseta corta con un sujetador deportivo. Se puso las deportivas y una sudadera de cremallera y salió.

Fred, sin embargo, se arregló algo más que el día anterior. Se puso un polo, unos pantalones cortos, y unas zapatillas. Salió contento, iba a divertirse hoy.

Llegaron a la casa de los prometidos al mismo tiempo.

- No sabía que llevabas gafas Weasley - dijo Afrodita metiéndose con él.

Fred sonrió - ¿Te gusta Bell? Seguro que ahora que parezco nerd, te parezco más irresistible. No lo niegues, sé que te gusto.

- Vete a la mierda Weasley - dijo Afrodita con desprecio antes de llamar al timbre.

- ¿Sabes Bell? Te queda bien ese modelito - comentó Fred mientras esperaba a que abrieran la puerta - Esos leggins te hacen buen culo.

Afrodita se sonrojó violentamente, y evitó la mirada de Fred. Aunque le incomodaba que le viera el trasero. Así que ella también decidió jugar.

- ¿Celoso porque no vas a poder tenerlo en tu cama? - preguntó egocéntrica.

- ¿Celoso?¿Yo? Ya te gustaría a tí que te tuviera debajo de mí gritando mi nombre - se burló el pelirrojo.

Afrodita se dio la vuelta y encaró a Fred. Y al parecer, ninguno se dio cuenta de que George estaba en la puerta, recién acababa de abrir.

- Mira Weasley, seguro que tu sueño más erótico habré sido yo. Por eso te acuestas con cada cosa que se mueva y tenga dos patas. Y seguro que cuando lo haces, piensas en mí. Por eso, nunca repites. Porque tus víctimas oyen el nombre de otra persona, que resulta que es el mío.

- ¿Quieres que lo probemos a ver si es verdad Bell? - preguntó Fred burlón, con una sonrisa en la cara.

- Borra esa sonrisa de demonio que tienes pelirrojo, nunca me acostaré con tal mujeriego - gruño Afrodita a un respiro de la cara de Fred

- Claro. Por eso te enrollaste con Diggory en los vestuarios. - dijo Fred rodando los ojos

Ella se volvió a sonrojar avergonzada.

- Estaba borracha - se defendió ella - Además, ¿a tí que te importa? ¿Estás celoso? - puso cara de inocente a Fred, y luego sonrió victoriosa al ver que no respondía.

- No puedo estar celoso de tí brujita. Eres todo lo que menos querría tener - consiguió responder Fred.

- Al menos no soy tan tonta e imbécil como tú Weasley. Que vive sólo en una casa llena de fotos para no sentirse tan solo, y que busca estar en compañía después de trabajar para terminar acostándose con una cualquiera - y con eso, Afrodita se dio la vuelta y ambos encontraron a George cruzado de brazos y apoyado en la puerta, y Angelina al lado de su prometido enfadada

George levantó la ceja - ¿Algo más que decir?

- Llegamos tarde - respondió Afrodita

- Umbitch - susurró Fred.

- ¿Repite? - Afrodita se dio la vuelta otra vez enojada.

Fred sonrió - Ya me has oído.

- ¿Tan cobarde eres? Mira Weasley, déjame en paz. Haz como que no existo - bufó Afrodita enfadada, apretando los puños.

- Eso hago siempre - musitó Fred.

Afrodita suspiró y se intentó relajar. Fred era ahora quién sonreía victorioso. George se llevó una mano a la cara mientras Angelina negaba con la cabeza.

Enemies in law (Fred Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora