Capítulo 15

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Capítulo 15

El coche se detuvo frente a un gran edificio. "Centro de salud mental" decía el cartel en la entrada. Sonaba feo. Muy feo. Pero en realidad no era tan malo.

A Gi no le gustaba ese lugar, no le gustaba fuera, pero sí dentro: En su lugar seguro.

—Ve primero, Gi. Iré a aparcar te espero fuera ¿Sí? —Hablo Ahyoon—. Recuerda, tómate el tiempo que necesites con el doctor Kim, ¿entendido? No tengas prisa, me dijo que no tiene nada hoy.

Con un suave asentimiento se bajó del auto y caminó con la mirada gacha hasta el interior. Todo era blanco, demasiado blanco, así que corrió hasta la puerta en el segundo piso que marcaba en número 23. Su número favorito.

—Te estaba esperando —Un grave pero acogedora voz se escuchó en cuanto abrió la puerta y entró.

Cerró y se fue a sentar frente a la mesa de madera, bajo la atenta mirada de Taehyung. Ese era su lugar seguro. Donde, si entraba, todo se desvanecía y siempre encontraría la comprensión y las palabras correctas de su psicólogo. Al principio fue difícil, no había forma de entrar ahí sin temblar porque las palabras que su padre empleó para intentar convencerlo fueron "él sabrá lo que te sucede y te ayudará", y Yoongi no quería que nadie supiera.

Sin embargo, para su sorpresa, fue la empatía y la paciencia del chico lo que hizo que ese despacho de colores acogedores se volviera el lugar donde quería ir si todo salía mal. Si nadie estaba para sostenerlo, entonces sólo tendría que ir ahí.

—Ahyoon me contó lo que sucedió, ¿quieres hablar de ello?

Se removió un poco: —Lo siento.

—¿Por qué te disculpas? —Taehyung ladeó su cabeza—. Dijimos que no había razones para disculparse, no has hecho nada mal.

"Todo lo que hice está mal" Pensó.

—Pero lo arruiné —Murmuró.

—¿Por qué piensas que lo arruinaste?

—Y-yo... Todo el trabajo que hiciste para ayudarme... lo he arruinado —Tragó duro, temiendo una mirada de desaprobación por parte del adulto, pero sólo recibió una empática.

Taehyung jamás lo juzgaba, sólo preguntaba y conocía los hechos, le aconsejaba, pero no juzgaba. Aunque para todo existía una primera vez.

—Gi, tener una recaída no significa haber fracasado —Habló—, significa que diste lo mejor de ti, y que lo seguirás haciendo hasta que ya no lo necesites.

Pestañeó, confundido.

Taehyung suspiró, anotando en la libreta las palabras "trabajar en la culpabilidad" y subrayándolas para marcarlas más que el resto.

—¿Por qué te sientes culpable por lo sucedido? —Preguntó. Era una suposición, en parte, ya que podía sentirse simplemente decaído o avergonzado, pero conociendo al paciente que llevaba unos años tratando, sabía que era más que eso.

Min Yoongi llevaba en su interior sentimientos muy negativos, hacia él mismo, hacia el resto. Eran sentimientos autodestructivos que solían ser el desencadenante para sus ataques de pánico y se intensificaban después de ellos. Era un ciclo vicioso en el que aún estaban trabajando, poco a poco.

—Porque... Trabajas duro para que mejore... Y mis papás, y Jungkook, y Namjoon... Y mis maestros... Pero yo sólo lo arruino una y otra vez —Jugó con sus manos, moviendo sus brazos y conteniendo una mueca cuando la tela rozó las heridas que se hizo.

Gitty [myg + pjm]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora