Capítulo 11

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-No es verdad lo que dije, era solo una broma - dije dando una pequeña carcajada para romper la tensión. 

-No mienta, eso solo lo dice porque se siente mal por mi.- ya no supe que contestar no habia sido así pero creo que no me creería - yo solo queria estar con usted en un lugar hermoso a solas, donde nadie nos encontraría. - dijo volteando a verme con los ojos un poco rojos por las lagrimas guardadas en sus ellos.

Lo bese, no pude hacer mas para demostrarle que de verdad me gustaba el lugar que yo también queria estar con el, el mayor tiempo posible a solas. 

-Yo también queria estar contigo a solas desde que salimos de el palacio.

-Que bueno por que crei que no me hablaría en todo el camino a el pueblo. 

-Solo estaba esperando el momento de estar contigo

Al terminar la frase se abalanzo sobre mi dándome un beso apasionado y tierno a la vez tirándome en el pasto se posesiono sobre mi, no quería romper pero a falta de aire nos separamos, jadeamos un poco y seguimos con el beso igual de apasionado pero esta vez, el comenzó a desatando lentamente mi kimono y metiendo la mano hasta mis pezones y comenzaba a jugar con ellos, no podia evitar gemir. Pero no podíamos hacerlo ahora así que lo detuve y lo avente de lado y me miro completamente desconcertado.

-Que pasa? - dijo casi gritando 

-No podemos hacerlo aquí ni ahora 

-Por que? - hizo un puchero, como los niños pequeños, esto no le quedaba ya estaba demasiado mayor como para comportarse así, vivir mas de 100 años creo que debió de haber obtenido madurez en todo ese tiempo. 

-Ya nos deben de estar buscando - dije cambiando de tema, tomándolo del brazo - vamos regresemos 

-Solo si hacemos algo mas 

-Que cosa? - le dije irritado 

No contesto solo estiro su brazo hasta detrás de mi cintura y me acerco hasta el- esto aunque habíamos estado mas cerca me ponía nervioso- me sonroje, sentía que mis mejillas ardían al estar tan cerca de el.

-Solo quiero que me digas que me quieres - me dijo cerca del oído. 

-Te quiero - le dije en un tono seductor 

-Ya lo sabia - dijo riendo, no se por que pero ahi veces que se comporta muy lindo y vulnerable y otras en la que es engreído y completamente fuerte - Yo también lo quiero príncipe, mas que querer lo amo mas que a mi vida - me dijo cerca del oido haciendo que me sonrojara aún más por las cosas lindas que habia dicho. 

-Vamonos - dije separándome un poco de el tratando de calmar mi sonrojo. 

No espero a pedirme si podia cargarme cuando ya me tenia en sus brazos, yo al saber que ahora sentiria de nuevo esa intensidad al sentir el viento coloque mi cabeza contra su pecho cerrando lo ojos y agarrando mas fuerte su cuello, que la vez anterior. Ahora que sabia lo que se sentia no era tan lindo como pensé. 

Me descargo y sin decir palabra caminamos hacia donde estaba el resto de mis acompañantes. 

-Principe, donde a estado a pasado un largo tiempo desde que usted y el señor Minami se fueron. Realmente estaba preocupado. 

-No tienes por que preocuparte, fuimos a explorar un poco el lugar en partes cercanas. Verdad Kaiyu. 

-Si principe - dijo serio, pero sin evitar sonrojarse levemente, supongo que recordo lo que hicimos o más bien lo que no hicimos. 

*************

Al fin hemos llegado a el pueblo que me indico el rey, creo después de caminar todo el día hasta aqui lo merece, no veo que pase algo malo aquí. Cuando llegue todos saludaron felices y con entusiasmo. 

Ya llevo un dia en el pueblo y por el momento no hemos salido de la casa que nos indicaron, supongo que todos estaban cansados por haber caminado todo el día. 

Kaiyu tambien estaba dormido en una esquina alejado de los demas, desde que llegamos ayer, ya es medio dia y el aún no se levanta igual que uno de los generales a cargo, el otro esta cuidando afuera junto a otros soldados. 

-Kaiyu - le dije en voz baja cerca de su oído 

No contesto a mi llamado, solo hizo una cara de incomodidad así que decidi ya no molestarlo. 

-General. Podemos ir a dar un paseo por el pueblo 

-Claro, Príncipe como ordene. Prefiere que yo lo acompañe o alguno de los otros soldados 

-Con quien sea mejor 

-Entonces yo lo acompañare 

Empece a caminar y el general iba detrás de mi. Todos mientras yo pasaba me hacían reverencias y tambien murmuraban, las mujeres en especial decían "El principe es muy guapo". 

-Esto es muy lindo, cuanto cuesta - le pregunte a una señora que vendia artesanías, era un jarrón que tenia diferentes pinturas en el de flores.

-Para usted nada, Principe. Se lo regalo -dijo la señora con una gran sonrisa

-No puedo aceptarlo, gracias por darmelo pero debo darle algo a cambio- Termine de decirle eso a la señora y me dirigí al general - Traes monedas para la señora?

-Si - dijo al momento de sacar modedas de una bolsa. 

-Gracias, Principe 

Hizo una reverencia yo le sonreí y segui caminando por toda la calle viendo las cosas que habia. Me incómodo el jarrón y voltee para darselo al general. 

En ese instante paso una flecha muy cerca de mi quebrando el jarrón y el general poniendose atento de donde había venido ese flechazo. 

-Su alteza, esta bien 

-Si estoy bien- dije asustado 

-Bueno principe, creo que es mejor que regresemos a la casa donde nos alojamos 

Caminamos directo a el lugar donde nos alojábamos, y entre. El general despertó a todos los soldados que nos acompañaban dando gritos y golpeándolos para que despertaran lo más rápido posible. 

Cuando todos despertaron, se fueron dejándome a mi con Kaiyu y 3 soldados más para cuidarme. 

-Que es lo que ha pasado? - pregunto Kaiyu desorientado. 

-Paso una flecha cerca de mi quebrando un jarrón que tenia en las manos.

-Que? - me dijo gritando y acercandose mas a mi - no te paso nada verdad - me pregunto tomando mis brazos y moviendolos de un lado a otro. 

-No paso nada, solo el susto. Bueno no se por que paso eso, pero supongo que querían asesinarme o tal vez se equivocaron. 

-Como puede creer que se equivocaron - me dijo moviendo en negación 

-Principe, vamos a salir para ver como esta todo afuera, si nos lo permite 

-Si esta bien - al terminar mi frase, salieron no sin antes hacer una reverencia. 

Ya no quise hablar sobre el tema por lo que me quede callado. Solo viendo de un lado a otro como buscando algo con que entretenerme. Se empezaron a escuchar gritos fuera de la casa, de mujeres como de hombres. 

-Principe, necesita salir de aqui. Minami asegurese de mantener a salvo al principe - dijo el general principal 

-Si ahora mismo general -le contesto -Ven - me dijo Kaiyu, parándose y tomando mi mano, estirandola con fuerza. 

-¿A dónde vamos?, ¿Qué es lo que está pasando? - sabia muy bien que estaba ocurriendo ahi afuera, pero no se porque estaba en estado de shock. Ya habia estado en algo así, pero la diferencia es que ahora fue de imprevisto. 

-Príncipe rápido no tenemos tiempo de hablar sobre eso - dijo Kai desesperado 

-No, mi deber es quedarme a proteger al pueblo, no puedo irme - dije tratando de zafarme de su agarre.

-Principe, no tiene tiempo de hacerse el héroe, si usted muere todo se vendrá abajo. 

-No quiero, y ahora sueltame para que pueda tomar mi espada. 

Te volvi a encontrar (yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora