Malentendidos penosos

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- Yo me regreso, buenas noches supongo- Épsilo fue el primero en caminar hacia su cuarto.- Pero antes, ¿pueden apagar la música? Es imposible leer si esa cosa infernal está sonando.

- ¿Música? Yo no tengo bocinas puestas- negó Silvan.

- Nadie más que Deerick pone su mús- Ashton volteó hacia arriba- ¡EH! ¡DEERICK SIGUE ARRIBA!

- ¿No se había bajado ya? Oh es cierto, si se pone el visor no ve nada y tampoco escucha ruidos por su música.- mencionó Raymond.

- Iré a bajarlo- Gaia suspiró y salió despedida del suelo.

- Bueno, me voy.- Épsilo se dio la vuelta, con su cara de cansancio y hartazgo de siempre.

- ¡Eh, espérame!- Decidí seguirlo sólo por curiosidad de algo que me llevaba rondando la cabeza desde hace tiempo.

- Se te nota a leguas, ¿qué quieres preguntar?

- ¿De qué objeto hablaban tú y Aria?

Épsilo se sonrojó y con un ademán de la mano me sacó volando hacia el pasillo de los cuartos. Cuando parpadée, lo encontré a centímetros de mi cara.

- ¡NO LO PIENSES SIQUIERA! ¡NO ES DE TU INCUMBENCIA!

- Muy tarde, ya lo hice y me da curiosidad. Ahora dime de qué se trata.

- Para esto si pones atención, ¿no?- Épsilo comenzó a sudar y a ponerse nervioso de la nada. No lo había visto así en el poco tiempo que llevábamos de conocernos, aunque dudo que sea del tipo de personas así.

- E-es al-go m-muy vergon-zo-so.....

- Oye, lo entiendo, a veces uno necesita cariño y no tiene a las personas necesarias. No te juzgo por eso.

- ¿Eh? ¿De qué diablos hablas?

- El objeto, Épsilo. Creo sé de que se trata y no te juzgaré si lo usas. A fin de cuentas la vida privada de cada quien es eso, privada.

- ¿Hablas- Hablas en serio?

- Pues claro, no es como que quiera hurgar en las cosas sucias de cada quien.

- ¿Sucias? ¿Es-estás seguro de que es el mismo objeto? Claramente no es limpio pero...

- No lo sé, Aria habló de algo profundo y que ella también lo quería ocupar, ¿de qué me hablas tú?

- Será mejor si lo ves por tu cuenta.- Abrió la puerta de su cuarto y se metió.

- O-oye, vamos más despacio, apenas te conozco y honestamente no me gustan estas cosas, es algo muy extraño que aún no comprendo del todo y es, es, es, ¿eh?

Salió de su cuarto y en sus manos traía algo pequeño. Cuando extendió su palma había algo parecido a una pipa y un pequeño montón de plantas sobresalía del agujero.

"Esto no era... lo que yo esperaba. A menos que sea otra cosa..."

- Es algo vergonzoso porque sé que está mal hacerlo. Pero realmente me ayuda a concentrarme e incluso le pedí a Silvan que recolectara hierbas que no afectaran mi salud y eso. Sólo que ese detalle no se lo mencioné a Aria. Te juro por el universo que es lo único malo que he hecho en mi vida.- sonaba tan apenado que me sentí mal por pensar aquello.

- Ufffff, no sabes qué alivio me da saber qué era.

- ¿Qué?

- Eh, bueno, pensaba que era algo más... ¿sabes qué? Olvídalo.

- Me obligaste a decir mi secreto, ahora dime el tuyo.- Comenzó a hacer su mirada penetrante de nuevo- Si no me lo dices de igual forma lo voy a saber, tonto.

- E-eh, ¡si estás cerca no cuenta!- Creé una galaxia detrás de él y lo empujé a través de ella. Me concentré de modo que la otra parte estuviera en su cuarto.- ¡LO SIENTO! ¡ES POR TU BIEN!

- ¡ESTÁS MUERTO!

Sus gritos se fueron desvaneciendo conforme avanzaba por el pasillo, hasta que finalmente me metí a mi cuarto y me encerré. Me tomó un rato recuperarme, pero finalmente recobré el aliento. Una vez asegurado que no se había teletransportado a mi cuarto, me metí a la cama y traté de dormir.

Es mejor que no sepa lo que pensé que era el objeto. En mi defensa no soy muy analítico y me voy con lo primero que me viene a la mente. ¿O no? Seguramente pensaste lo mismo que yo. Y si no pues... no sé. Tal vez deba de darme una limpieza de cerebro o algo.

Aunque aparte del hecho de la confusión y de que fumara hierba había algo más interesante. Jamás había visto a Épsilo hablar así acerca de un error, o de algo malo que había hecho.

Realmente parecía avergonzado y culpable. ¿Por qué habría sido? También se puso demasiado nervioso cuando parecí atraparlo. Es algo que aún no descifro. Pero bueno, Épsilo es un misterio andante.

 Aunque realmente, creo que la mayoría aquí (y eso me incluye) lo son.

Los Renegados de Illumia: El nuevo elemental del espacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora