THE SEVENTH DAY SEER

Capitulo 22: The Snake Den

Encontraron las casas solariegas un poco más adelante en Campion Road, detrás del centro cívico y de un par de manzanas de casas de clase media. Al final de la calle de la mansión -la llamaban Verdant Way por su verde y ondulado césped- se extendía una mansión señorial sobre amplias colinas y lo que parecía un antiguo viñedo. Una hilera de cipreses bordeaba la parte trasera de la propiedad, pero por lo demás no había ni un solo árbol. Aparte de las flores y las vides rotas, el terreno estaba desnudo.

-Parece solitario, dijo Harry, abrazando su pecho contra el frío del aislamiento.

-Este sería un excelente refugio-, dijo Severus con un movimiento de cabeza.

Harry le dirigió una mirada irónica. -¿Lo sería? Aquí no hay nada-.

-Excepto ese viejo viñedo y mucho espacio abierto para un jardín de pociones a la luz del día. Como Malfoy es un excelente herbólogo y aprendiz de pociones y la familia de Zabini es viticultora, ambos podrían beneficiarse de trabajar la tierra aquí. Y si algo necesita Malfoy es aprender a ganar dinero sin la intervención de su padre. Puede hacerse un nuevo nombre, separado de la mancha de Lucius. Trabajar la tierra también podría sacar su ego de la estratosfera-.

Harry resopló. "Para eso necesitarás algo más que un jardín de pociones". Se acercó y volvió a escudriñar la casa y los terrenos. -Sigo pensando que parece aislada, pero quizá eso sea bueno para tus Slytherin's. ¿Miramos dentro, entonces?-.

-Sí. Ven, sígueme-.

El interior le pareció a Harry tan solitario como el exterior, pero era evidente que a Severus le habían gustado las grandes habitaciones y la decoración señorial.

-Este es un buen lugar, Harry. Hay por lo menos diez habitaciones aquí que podrían usarse como dormitorios o incluso cuarteles. Malfoy y Zabini estarían bien aquí, al igual que cualquier estudiante que necesite un lugar para esconderse-.

Harry se arrimó más a Severus, necesitando su calor. -Es que, se siente tan vacío-.

Severus resopló. -Amor, está vacío. Los muebles y la decoración cambiarán eso, al igual que la presencia de personas-.

Harry suspiró. -Me parece justo. Entonces esto servirá, supongo-.

Severus asintió y saludó a los elfos que les seguían de cerca. -Muy bien, elfos de Prince. La principal prioridad aquí es hacer que la casa vuelva a ser habitable. Por favor, limpien y preparen cinco habitaciones en el piso de arriba, preferiblemente en una zona común cerca de un retrete; es probable que tengamos que reformar los retretes y las zonas de cocina como hicimos con nuestra propia casa. Estas casas están lamentablemente anticuadas-.

Señaló los pisos inferiores. -Cuando eso esté terminado, por favor, vayan preparando lugares para comer, estudiar y relajarse. Equipad la biblioteca con libros de texto y de ficción por ahora; Harry y yo nos encargaremos de los libros más profundos según sea necesario. Incluyan textos sobre la elaboración de vinos, el trabajo en los viñedos, las pociones y la herbología. No incluyas nada de origen oscuro, es mejor no tentar a Malfoy-.

Frunció el ceño y se frotó el labio, tratando de pensar en lo que podría haber olvidado. -Creo que esas son las tareas más importantes. Además de eso, equipa las habitaciones como creas conveniente. Ah, pero deja el terreno como está. Puedes limpiar los escombros y abastecer el cobertizo con materiales de jardinería, pero no hagas más trabajos de jardinería. Malfoy y Zabini deben planear los terrenos primero. ¿Entendido?-.

Los elfos aceptaron a coro y se pusieron a trabajar. Severus y Harry ayudaron en lo que pudieron, deteniéndose a cenar a las seis. Harry acababa de coger una última galleta cuando un fuerte estallido le sobresaltó y le hizo derramar el té. Severus se levantó de un salto y sacó su varita, pero la bajó inmediatamente.