Narra Micaela.
Estaba cansada, apenas había dormido ni comido, no me encontraba nada bien pero tenía que ir a dar la cara al programa por mi equipo, soy la capitana y no puedo faltar por problemas personales. Aunque no me costó mucho fingir, no tenía que aparentar felicidad, ya que ninguno de ellos conocía realmente esa faceta de mi, no al 100% por lo menos, y como ninguno me conocía lo suficiente era mucho más fácil.
Dejarlo con mi novio, al que prefiero no nombrar, había sido una mala experiencia. Me forzó a elegir entre él y mi trabajo, señal número uno de que yo no le importaba tanto. Y además hace ya tiempo que la rutina nos estaba separando. Yo tenía mucha presión, entrenaba mucho, y lo sigo haciendo, y apenas estábamos juntos. Supongo que era lo mejor pero aún así estoy dolida.
Quería estar feliz, pero a la vez también quería llorar. Por una parte, me encontraba sola, ya no iba a tener la ''responsabilidad'' de vivir pendiente (en el buen sentido, no en el tóxico) de alguien, o que parte de su felicidad dependiera de mi. Pero por otro lado, me sentía mal. Ahora la casa se sentía muy vacía, ya nadie me esperaba al llegar del trabajo, o se alegraría tanto de mis logros como él lo hacía.
Estacioné el auto y abrí la puerta de mi casa. Entré y solté las llaves en la mesa de la cocina, mientras me sacaba las zapatillas con un enorme cansancio. Me quité la ropa y la tiré en el sofá, que ahora se encontraba solo. Me puse una remera ancha, me llegaba por las rodillas.
-Lo único que dejó.-Susurré mientras me agachaba para hacerle mimos a Aloha, mi perra. De repente mi celular comenzó a sonar.
Fruncí el ceño mientras lo desbloqueaba, bajé la barra de notificaciones para ver unos WhatsApp's, ¿Rama?
Narra Ramiro.
Nosé si debería escribirle...es mi capitana en el programa a secas. No somos amigos, pero tampoco nos llevamos mal. Trato de ser cercano con ella, pero cuando intento abrazarla o darle algún cariño como a cualquier amiga, ella no lo acepta. Supongo que será por que tiene novio...no, ella no se deja dominar. Seamos realistas. Es un poco, bastante fría, muy suya, y además no me considera su amigo, creo que en toda la historia de Combate, sus únicos amigos de verdad han sido Congo y su novia, el resto bueno...se llevaba mejor, peor...pero no eran tan amigos.
-¿Qué piensas tanto?.-Me sacó de mis pensamientos mi hermano.
-Nada...¿Crees que debería hablarle a Mica?.-Le pregunté sin anestesia.
Mi hermano no se llevaba bien con ella. Cabe decir que está última generación, mejor dicho, su recta final, los unió, pero sólo por la victoria. Nacho estaba...no enamorado pero si que le gustaba Mica bastante, trato de intentarlo con ella repetidas veces, pero no hubo caso. Mica es complicada, y aunque mi hermano es muy alegre y sociable, también es díficil. Todo quedó en nada, el ship ''Nachoela'' desapareció, y eso que hasta hubo un beso de por medio, bastante intenso, en un baile. Pero del amor al odio hay un paso, y en ese es donde se encuentran. Mica empezó su relación con su novio actual, y mi hermano no es muy buen perdedor. Empezó a molestarla, y ella no se quedó atrás. Hasta cuando dentro del programa tenían sus respectivas parejas, seguían odiándose, y nada ha cambiado hasta el día de hoy.
-Si quieres que te traten mal...que masoquista.-Rió.
Ignoré lo que dijo y suspiré resignado. Fui a mi habitación y me tiré en la cama con la guitarra. Trás un rato tocando melodías fallidas, decidí escribirle.
-Hola capiii:)
-¿Qué quieres Rama?
-¿Por que tan mala onda? sólo quería saber cómo estabas
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Silencio ; Ramaela
Fiksi PenggemarEso es lo único que quedaba entre nosotros, un silencio que era tan tenso que cortaba la respiración, ¿Qué se supone que pasa después? «No actúes como si me conocieras» «¿Es un aviso?» «Esto puede dejarte sin respiración o con una desagradable cicat...