Capítulo 28

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Bueno otro miércoles más aquí! Me he despertado a las 6 am sólo para dejarle la actualización y poder estudiar luego. Último miércoles previo a mis exámenes! Espero que para la próxima actualización venga con la noticia de haber aprobado uno de mis finales, enciendan velas por mí! 🕯️

Muchas gracias por todo su apoyo! Nos estaremos leyendo pronto. Les quiero💞

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Esconder las verdades es mentir, no decir las cosas es mentir y Phasma no podía soportar estar mintiendole a su mejor amigo en el mundo. Soportó varios días sin decir nada, trato de averiguar qué tal iban las cosas entre ellos dos pero sólo podía notar que había una extraña atmósfera alrededor de Rey. Phasma no era la única en ver aquello, Ben tenía eso muy presente y a demás percibió un brillo inusual en sus ojos que resaltaban su belleza. Pero ninguno de ellos sabía lo que estaba ocurría dentro de la doctora, a excepción de Rose, había notado todos esos cambios desde que su amiga expreso los primeros síntomas y dada su especialidad no sería de extrañar.

El domingo 7 de marzo la doctora Kenobi tomaría el turno de la noche con la excusa de llevar a Lucy a su control con el pediatra, cosa que haría luego de visitar a su posible testigo. Colocó la dirección en el GPS, Mónica Jonhson y Jyn Erso la esperarían en el Valley Medical Center a las fueras de Seattle, más precisamente en la ciudad de Renton. Hace 2 años que había estado allí, vagamente recordaba el camino aunque esa noche la interestatal 5 y la 405 eran más confusas de lo que recordaba. Las 16 millas de camino fueron pura tranquilidad, Lucy iba en su sillita ubicada en el asiento trasero balbuceando mientras jugaba con su jirafa de peluche.

Tarareo un par de canciones que iban pasando en la radio, buscó sitio para estacionar. Apagó la radio, quitó su cinturón de seguridad y descendió de su auto para sacar del baúl la carriola de Lucy, minutos después la tenía armada y se siguieron sacando a su hija del auto.

—Vamos a visitar a alguien, luego iremos con el pediatra y me ayudaras a preparar la sorpresa para papá-la sujeto a la carriola—Mañana le diremos de tú hermanito en camino y luego hablaré con él de otras cosas.

—Pa—Dijo.

—Si, papá ... ¿Quieres decirle papá? Puedes decirle papá si quieres, le encantará—puso la pequeña pañalera en el comportamiento debajo, cerró la puerta del auto para finalmente dejarle la alarma puesta. Se puso de cuclillas frente a ella para entregarle su jirafa.

—Bip bip—indicó el auto con su dedo.

—Auto, ese es un auto—le dijo—aquel también es un auto-señaló otro.

—Bip bip—señalo otro auto distinto.

—Muy bien, son lo mismo—le sonrió, dejo su peluche a su lado.

—Mamá!—Extendió los brazos hacia ella, Rey se inclinó hacia adelante para que su niña se abrazará un poco a su cuello, acarició su espalda en el tiempo que duró el abrazo.

—¿Ben?—Lo buscó al soltar a su madre.

—Papá no está aquí, luego lo veremos-se incorporó con cuidado. Colocó las manos en el manijar e inicio la caminata hacia la puerta príncipal, Mónica y Jyn ya deben estar esperandolas.

Arrugó la nariz, recuerdos buenos de ese sitio eran casi imposibles. Tal vez sólo uno, cuando vio por última vez a Silverman, anterior a la conferencia, y se enteró de que estaba embarazada de Lucy.
La abogada Mónica Jonhson, encargada de llevar adelante adelante todo su caso, y la asistente social Jyn Erso, que ayudaría en el proceso, se encontraban de pie conversando muy cerca de la entrada principal. Mónica, una mujer de cabello oscuro con tanta elegancia en su figura que ni algunos mechones blancos de la edad lograban aplacar, descartó su cigarro apenas ver a Rey con su hija yendo hacia ellas. Jyn, algo más baja que la primera, de mirada más fuerte al igual que su postura, suspiró aliviada de verla al fin.

Confía en mí [Au Reylo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora