Judas

Capitulo 25

~~Narra Weikath~~ 

Los días parecían pasar rápidamente, nada nuevo… Decidí no hablar ni acercarme a Kai y a Kiske, no les iba a perdonar lo que habían hecho, varias veces me habían avergonzado, inclusive me habían hecho bromas de muy mal gusto al punto en que un día casi me rompo el tobillo por una de sus tantas malas bromas, pero todo lo había dejado pasar y lo había perdonado, pero esta vez se habían excedido, no más, ellos tendrían que buscar a alguien más para sus estúpidas bromas sin sentido, un día que estábamos ensayando Maddie me pidió como siempre que les perdonara, pero de nuevo me negué, ella se molestó como siempre, todos los días era lo mismo pero nada ni nadie me haría cambiar de opinión, ni Ingo y Markus que de vez en cuando me pedían que les perdonara y lo dejara en el pasado.

Los ensayos fueron largos, ya no nos divertíamos como solíamos, a veces me gustaría dejar todo atrás pero algo en mí no lo permitía, por otra parte ahora tenía otro problema, aquella chica de nombre Rose…. ella era como una abeja, no dejaba de mirarme, seguirme e inclusive tratar de besarme, algunas veces pretendí distraerme para que ella me besara pero siempre pensaba en Maddie, no podía estar con Rose. Por fin llego el día de esa presentación escolar que tanto estaban planeando todos, llegue a primeras horas y me senté en la primera fila, no entendía que le veían todos a eso, prefería estar enseñando algún tema de mi materia que ver cada una de las presentaciones, lo único que me entusiasmaba y que me mantenía en el asiento era ver a Maddie, yo ansiaba verla, no me imaginaba verla con un tutu, seguramente se veía hermosa, cuando se me hacía eterno por fin anunciaron el tema de Maddie, ella apareció junto a las otras chicas de la clase, comenzaron a ejecutar el baile, al parecer Maddie era la bailarina principal, aunque Rose parecía también tener ese puesto pero pronto Maddie la opaco, ella representaba a ese cisne puro y hermoso, mi mirada se perdió en ella, toda su sutileza y delicadeza me hacía olvidar todos mis problemas, nada más importaba excepto ella… pronto el acto termino y todos aplaudieron y se levantaron al instante. Me apresure a ver a Maddie, fuí a los bastidores donde ella estaba, entre y me encontré con todas las chicas, estaban gritando y se veían alteradas, no tarde en felicitarlas y fue cuando Rose comenzó a atacar a Maddie diciendo que ella había arruinado el baile, trate de retar a Rose y que se diera cuenta de que estaba de lado de Maddie y nada cambiaria eso, ella guardo silencio, las felicite por segunda vez y me retire a terminar de ver todas esas presentaciones, fui al pasillo a fumar un cigarrillo, siempre que me estresaba tenía que fumar uno, y en este caso me estresaba estar en un lugar con mucha gente tanto tiempo, nadie estaba en los salones de clases así que me quede en el pasillo sin preocupaciones de ser pillado fumando, pronto escuche unos pasos, me apresure a guardar el cigarrillo, me di cuenta de que no se trataba de nadie más que Rose, se le veía molesta aun con su extravagante pero algo molesto a simple vista tutu, no tardo en detenerse donde yo estaba y mirarme.

-Rose… no puedes ir para haya no hay nadie 

–Dije mostrándole el camino de regreso 

- Oh… ¿Con que usted fuma no es así? –Dijo respirando rotundamente, preferí no decir nada y desviar la mirada de ella

- Yo sé que usted me desea… -Dijo acercándose a mí, pronto me tomo la manos y las coloco sobre sus pechos, estos eran suaves pero eran algo más pequeños que los de Maddie, de nuevo creí ver a ese diablo y a ese ángel tratando de convencerme 

-Weiki… Probar cosas nuevas no es tan malo como tú lo crees –Decía ese pequeño Kiske a mi derecha

- Weikath… no lo hagas, ella no vale la pena –Decía Ingo a mi izquierda 

-Weiki eres un idiota, nunca te das un poco de diversión, pronto te harás viejo y amargado –Decía Kiske

- ¡Kiske! ¡Cállate, joder! –Grite mientras que esas figuras de Kiske e Ingo desaparecían, Rose se alejó al instante y fue cuando me di cuenta de que no lo había dicho en mi mente.

-¿Disculpe? ¿Se siente bien? –Dijo Rose confundida 

-Rose lo mejor será que regreses con tus amigas, ahora regresa de donde viniste –Dije cansado y algo harto

- ¿Por qué no me quiere? Yo sé que algún día me querrá y ese día no está muy lejos –Dijo Rose con la mirada fruncida, pronto desapareció del corredor, regrese a lo de las presentaciones, estaba harto, el haber visto a Rose y el recordar a Kiske me había dado jaqueca sin olvidar el mencionar que vi obras tan malas que Kai tratando de verse inteligente y serio sería mejor actor, me importo una mierda si yo debía estar ahí por ser profesor, me largue de ese lugar lo más rápido posible, fui a mi casa, me serví algo de comida que había en el refrigerador y prendí el televisor, comí y me quede en el sofá viendo la televisión, pronto me quede dormido.

¡Carajo! Desperté por un perro que ladraba en la calle, la televisión estaba en un programa religioso, ahora entendía por qué me había quedado dormido, me apresure a cambiarme, tome mi guitarra y me apresure a lo de los chicos, iría a ensayar por unas dos horas y luego iría por Maddie, seguro y ella seguía en el instituto, durante todo el camino sentí que alguien me seguía e inclusive me observaba pero preferí ignorarlo, pronto llegue a la casa de los chicos, esta vez Kiske me abrió la puerta, yo solo le ignore y entre como siempre, él lucía con la mirada baja y algo desanimado, no me importo y fui donde Markus e Ingo, comenzamos a ensayar hasta que alguien toco a la puerta, todos estábamos en la sala pues nos habíamos tomado un descanso, Markus se dirigió a la puerta y la abrió.

-Hola, ¿Necesitas algo? –Dijo Markus a quien estaba en la puerta

-¿Esta Michael? –Se escuchó la voz de una chica, esa voz me resultaba familiar 

-Sí, espera un segundo ¡Mike! Aquí te buscan –Grito Markus a Kiske que se encontraba en otra habitación, el apareció al instante y se dirigió a la puerta 

-Bueno… Aquí está el, los dejo –Dijo Markus dirigiéndose al sofá donde estábamos

-¿No hay nadie más con nombre Michael? Vi que entro por esta puerta hace un rato –Dijo ella

-Si… esta Weikath… Michael Weikath ¿Lo buscas a él? –Dijo Kiske, a lo que la chica confirmo, pronto Kiske me llamo, yo no entendía quien me podía estar buscando, me apresure a la puerta y ahí estaba ella…Rose… No me dejo ni siquiera preguntar cómo era que me había encontrado, entro mientras que se balanceaba hacia mí, pronto nuestros labios estaban juntos, ella me besaba frente a los chicos, pude notar sus miradas sorprendidas mientras que estaban boquiabiertos, trataba de zafarme de ella pero era imposible, pronto alguien entro por la puerta, no lo podía creer, cuando creí que mi día no podía empeorar más me di cuenta de que me había equivocado.