~~Narra Weikath~~
Corrí detrás de ella pero era imposible, me sentía muy mal, y siempre tantos embrollos nunca podían faltar, me di por vencido y me senté en una acera, baje la mirada mientras me recargue sobre mis brazos, ese vacío comenzó a aturdirme, esperaba que Maddie no estuviese eufórica aunque eso sin duda era así, ella ya me había perdonado 1... 2… veces pero por alguna razón siempre pasaba algo que nos trajera más problemas de los que ya teníamos, eso me recordó a aquel incidente con Rose y ahora se repetía con Bella, la misma situación, el mismo problema.
Decidí ir a explicarle todo a Maddie, ella a pesar de que estuviese molesta siempre estaba dispuesta a escucharme, me di cuenta de que Bella parecía merodear por el lugar sin tomarme atención alguna, era extraño que ella hubiera cambiado su actitud tan radicalmente, tramaba algo y lo iba a averiguar, antes de que pudiera acercarme, ella se me adelanto.
-¿Qué esperas? Debes llevarme -Dijo ella con la mirada perdida y sin decir una sola palabra más, no lo entendía, su actitud había sido muy cambiante.
No dije nada más y la lleve a la casa de Maddie, Bella no se acercó a abrazarme a insinuarse cariñosa o amorosa durante todo el recorrido, si quiera me toco por error, era algo muy confuso.
Entramos a la casa de Maddie, todos nos miraron sorprendidos y esperanzados al vernos entrar, la madre de Maddie corrió a abrazar a Bella tal y como si fuera una niña pequeña, el ambiente de preocupación que había desapareció, antes de que todos me agradecieran pregunte por Maddie, ya que era raro no verla conviviendo con su familia, su madre me explico que ella se encontraba en su habitación, no tarde en dirigirme a esta, toque su puerta sin recibir respuesta, gire la perilla y entre cautelosamente, Maddie se encontraba reposando sobre su cama, su almohada cubría su rostro, me acerque a ella, pronto trate de explicarle lo que en realidad había sucedido, pero ella era necia y me evito completamente, además de que evito contestarme y mirarme, esa no era esa Maddie alegre y tolerante que solía ser en Hamburgo había cambiado, la esperanza comenzaba a desaparecer de sus brillantes y avellanas ojos, esa no era la Maddie de la que había caído flechado.
Me mataba verla en esa posición, era frustrante para mí, solo quería verla feliz...
Salí de su habitación algo inquieto, baje las escaleras y me despedí de sus padres, Susan y Bella parecían conversar de algo... De algo que las estaba haciendo reír demasiado, solo me miraron de reojo, parecían burlarse de mí, las ignore mientras abrí la puerta para irme, no sabía a donde iría pero no quería estar cerca de Bella y ese ambiente tan familiar, me hacia sentir incomodidad y algo de tristeza, supongo que era porque nunca había convivido con mi familia de esa manera, era algo ajeno para mí.
Fui a caminar por el prado nuevamente, con las manos escondidas en los bolsillos, caminaba cabizbajo, fui a recostarme debajo del árbol de manzano, ya comenzaba a anochecer, cientos de pensamientos me golpeaban tan fuerte internamente.
No quería perder a Maddie, ella era lo único que tenía, solo ella tenía la llave para abrir mi corazón empolvado y seco, ella había traído el color a mi vida, la felicidad y la esperanza, mi vida no tenía tanto sentido antes de que la conociera, lo único que tenía era a Helloween, pero no era lo mismo siendo el guitarrista solitario y malhumorado que solía ser, no quería caer en lo mismo otra vez, debía pensar en una muestra... Una muestra de amor... De todo el aprecio que siento hacia ella, ¿Pero qué? ¿Que podría ser?
Me rompí la cabeza pensando tal vez por unas dos horas hasta que por fin algo paso por mi cabeza, aquel helado viento y la luna resplandeciendo me hizo pensar en algo...
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Judas
RomanceJudas - Sinopsis: Locura, atracción, pasión, pero ¿Amor?Michael Weikath, guitarrista de Helloween, serio e interesado en su banda pero además en sus estudios, al terminar unos cursos en los que estuvo asistiendo hace ya dos años, por fin podrá tener...