El hijo de Jungkook y Bomi en la foto multimedia y Lyon en video.
Lyon: diecisiete años.
Junsean: veintiocho años —recuerden que los Dioses vampíricos crecen dieciocho años en el primer año de vida para que no se asusten—
—¡No jueguen tan brusco!
Nos detenemos los tres, solo para evitarle dolores de cabeza a Bomi que sigue creyendo que nos vamos a terminar matando únicamente por jugar a darnos puños.
Lo que si puede suceder, pero despertamos a la media hora. Lyon regresa a su forma humana porque sabe que a Bomi no me gusta que deje sus pelos de león por toda la casa e intenta mejorarle el humor.
—No pasa nada, Bomi bonita— usa el apodo que más le gusta a ella, inteligente— ya sabes que nada malo sucede.
—Ya, sentados todos a comer que tú— lo señala— tienes que estudiar y tú— Junsean se rasca el mentón— se supone que tienes que trabajar.
—Si, señora.— ríe— No te enojes, mamá.
Anda muy sensible últimamente porque Namjoon ya nos dió la noticia de que Lyon se irá a liderar la raza nueva que nació, es una raza de Dioses naturales, es decir, engloba toda la naturaleza en si y estará bajo cargo de Lyon una vez cumpla los veintiuno, así que no lo veremos tan seguido aquí en casa, pero seguirá viviendo con nosotros porque así tiene que ser y seguirá siendo.
—Junsean, lleva a tú hermano.
—Ya voy, andando, Lyon.
Con mucho esfuerzo, Junsean aprendió a ser un poquito más demostrativo con sus emociones pues le da vergüenza sacarlas, ahora ya no le molesta besar la mejilla de su madre antes de irse y ser afectuoso conmigo.
Lyon si es un caso muy contrario.
—Adiós, Bomi bonita— y me obliga a levantarme de la mesa para despedirse, me abraza y apretuja tanto como puede— adiós para ti también.
—Si, si, vete a estudiar y cortate el cabello, por favor.
A mí me encanta tenerlos en casa, disfruto mucho estar con ellos, pero cuando se van y yo cierro la puerta, respiro la paz.
Y me voy a acaparar la atención de Bomi, corro hacia ella, la levanto escuchando sus gritos y me la llevo a la cama. Ríe escandalosamente.
—Odio arruinarte la emoción, pero se supone que tengo que terminar la habitación de los chicos.
—Una hora que me dediques a mi no les va a molestar en absoluto. Estaba pensando en que te amo muchísimo.
—Ajá...
—Y en que quiero que hagamos lo que más te gusta.
Le brillan los ojos y abre la boca, contenta.
—¿Tendremos una cita?— asiento— ¿A dónde me llevarás? ¿Puedo elegir yo?
—Claro que puedes, te ayudaré a terminar las habitaciones después, lo prometo, por ahora quiero que salgamos un poco de esta casa.
Me siento extremadamente bien, como nunca me sentí, con Bomi puedo hablar más, me expreso más, sonrío más. Ella me hace querer hablar día y noche sobre lo que sea, puedo leerle un libro completo y me escuchará atenta hasta que lo termine.
Me ayuda a avanzar, a sanar y superar.
Ahora soy un Dios mejorado, uno completo y feliz. Todos nosotros tenemos una manera distinta de amar, pero lo que si es igual, es la belleza en nuestro amor hacia nuestros destinos, yo amo a Bomi exageradamente porque ella lo vale, merece mi atención, lo merece todo.
—Voy a llevarte a escalar.
—Tú y tu necesidad por mantenerme activa, no puedo procrastinar contigo cerca, dame un respiro.
—Nada de eso, mueve el cuerpo, eso mejora tu salud.
—¡Estoy perfecta!
—No lo niego, pero te verás más perfecta en leggins y zapatillas deportivas, andando.
—No, mejor quedémonos aquí.
Los papeles cambian y sé que perdí cuando se dispone a besarme y yo me dejo manipular por ese beso.
En este aspecto no soy fuerte, en absoluto, ella es más fuerte que yo.
En realidad siempre ha sido mucho más fuerte que yo, muchísimo. La amo por eso y me parece que será de esa manera indefinidamente.
FIN
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Háganle porras a nuestro Jungkook mejorado con dos hijos y una Bomi Bonita.
