—Hey, novato— tuve que ignorar, la humanidad es simplemente insoportable y agotadora— iremos a beber después de esto, únete.
Tal vez piensen que soy grosero, descortés y que mi respeto por mis mayores o superiores está en el subsuelo, no puedo hacer nada al respecto porque tienen razón.
No me gusta hacer amistades, no me interesa llevarme bien con mis compañeros de trabajo y tampoco me importa la imagen que eso pueda darme, si pudiesen tener asco, yo encantado, de esa manera no tendré que preocuparme por su invasión al denominado espacio personal.
Lastimosamente eso no es posible teniendo en cuenta que soy una divinidad, todos, sean hombres o mujeres, quién sea, se sentirán curiosos u atraídos a mi, y es el mismo caso con todos los Dioses vampíricos dado que somos la única especie de Dioses que actúa en tierra y luce como sus habitantes.
—Chico, estoy hablándote.
Tomo asiento, seco mi sudor con la toalla que traigo a la mano y me veo en la obligación de rechazar la oferta.
—No consumo licor, así que no me apetece unirme.
—¡Jungkook!
Todos giramos la cabeza para ver a la dueña de la voz, no entiendo porqué Katrina entró ¿vino hasta aquí para llevarme a la casa? extraño, normalmente envían a Yoongi.
Aunque no me sorprende, está aprendiendo a manejar a raíz de que Taehyung le compró un auto sin importarle cuántas veces esta se negó porque le asusta.
—Está buena— musita uno de ellos y cierro los ojos, es demasiado desagradable, entiendo porqué Taehyung vive preocupado.
Ella llega hasta mi lugar y me extiende una botella de agua, la acepto, no somos precisamente cercanos, pero he visto como ha intentado llevarse mejor conmigo y no me molesta porque Katrina es amable, no es intensa o molesta, ella sabe cuando y como agradar a los demás.
—Hola, Katrina.
—Vine para llevarte a casa, no te preocupes, Yeonjun está conmigo.
—Claro, vamos.
—¿No vas a presentar?
Chasqueo la lengua.
—¿Me esperan en el auto?— asiente— Debo ir por mis cosas antes.
—Muy bien.
A ella se le ha pedido que ignore todos esos comentarios y lo ha hecho, la cosa está en que nosotros no podemos ignorar eso, he ahí el problema con las Diosas recién convertidas, son un blanco constante para los humanos, las ven y es como si de un segundo al otro, se obsesionaran.
De por sí, se nos considera un tipo de afrodisíaco, para ella es peor solo por ser esposa y madre de Dioses vampíricos sexuales, como es el caso con Taehyung y Yeonjun.
Cuando ya la pierdo de vista, escucho las quejas de ellos por haberla dejado irse.
—¿Qué ocurre contigo?— me pregunta uno— Está bonita la niña.
—Es la esposa de mi hermano— se queda mudo— así que agradecería que te guardes tus comentarios asquerosos, no está bien visto sexualizar a las personas de esa manera y menos si sale de la boca de un hombre mayor.
Se molesta y su intención está en golpearme, yo no soy alguien que abuse de su fuerza física y menos siendo el Dios que es dueño de esta, pero, puedo defenderme un poco.
Le doy una simple cachetada que le voltea el rostro y casi gira, mientras la impresión es enorme y sus amigos se acercan para verificar que esté bien, yo me largo.
Aprieto los puños antes de beberme todo el contenido de la botella, como me desesperan los humanos.
Irónico es que las humanas no me desagraden tanto.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
