We Are One - Kurapika

XIII.

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Nunca estarás solo, siempre estaré a tú lado.
Estaremos bien
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GOOD DAY

Los protagonistas fueron llevados al hogar de los mayordomos dónde fuero recibidos cordialmente.

—Oigan chicos -hablo Mei- ¿Porqué estan dando una reverencia esas personas? ¿No somos nosotros quiénes deberíamos de hacerlo?

—No Mei, los mayordomos deben mostrar respeto por sus amos y sus invitados.

—Pero yo no quiero que me traten como a una, si no quieren inclinarse ¿para qué hacerlo?

—Señorita es nuestro deber como sirvientes de la casa Zoldyck hacer estos gestos hacía los invitados.

Mei aún sin comprender el porqué simplemente asintió, ella era obligada a tratar así a sus amos pero no veía rastros de golpes en sus rostros o cuerpos ni una cadena que sostuviera sus cuellos, aún le faltaba mucho por aprender del mundo, no todos eran esclavos en esta sociendad.

—Killua-sama se esta dirigiendo hacía acá.

—¿En serio? -dijo el eufórico Gon.

—Así es, esperen un poco más por favor.

Las inseguridades de Mei la abordaron nuevamene ¿Y si Killua realmente no pensaba en ella como su amiga? Ella estaría realmente triste si ese fuera el caso.
Sintió un leve apretón en su mano izquierda percatándose que Kurapika la tomó con fuerza tratando de despejar su mente.

—¿Qué tal si matamos el tiempo con un juego?

—¿Un juego?

Con agilidad el mayordomo escondió una moneda entre sus manos.

—¿En que mano esta la moneda?

—En la izquierda -dijeron todos.

—Excelente respuesta, entonces ahora será más rápido.

El juego apenas comenzaba para los chicos y Mei estaba bastante entusiasmada por ello, jamás había "jugado" algo como eso, hace años que no jugaba nada.

—¿En que mano esta?

—La izquierda.

Con unas palabras el mayordomo principal amenazó a los protagonistas después de tomar por el cuello con un cuchillo a la pelinegra.

—Escuchen una sola vez, si fallan una sola vez ella quedara fuera, si antes de que llegué Killua-sama los tres terminan fuera... le informaré que se marcharon hacía un lugar dónde nunca lo volverán a ver.

—¿Usted es malo?

—Para usted señorita puede ser así.

—Pero Killua... tengo que hablar con él.

—Entonces pase la prueba.

Con determinación en sus ojos esta lo observó, los movimientos de sus manos se volvieron cada vez mas rápidos pero Mei aún los seguía, fortaleció su iris con el poder de su clan y observo los movimientos de sus manos.

—¡La izquierda!

Gon hizo un corte en su parpado derecho provocando que su ojo reaccione de manera inmediata y pudiera continuar el juego junto a Mei.

—Muy bien ¿quién la tiene?

—El tipo de acá atrás ¿cierto?

—El de atrás.