Dark Stony omegaverse.
Au.
Cuando Howard Stark tuvo su oportunidad de poder entrar a la hydra lo hizo sin pensar mucho en las consecuencias, sabía que caerle bien a el líder y alfa de esa gran organización, así que cuando Joseph Rogers lo invito a el y a su familia a un viaje de caza en una de sus tantas propiedades acepto más que gustoso.
María siempre le huía a la caza diciéndo que era un acto atroz aún así desde edad muy temprana había comenzado a ir con sus cachorros para cazar diversos animales. Tenía dos hijos Arno su primogénito de quince años su orgullo un alfa como el y Anthony de trece un omega que catalogaba como extraño aún así era parte de su manada.
Arno siempre tomaba su forma de licántropo asustando a los jabalíes que salían corriendo en dirección a donde estaba el y Tony esperándolos con un rifle, al ser descendientes de sangre pura todos en la familia podían volverse lobos si así lo deseaban y aún que trato de poner a Anthony junto a Arno este siempre le huía a tener que estar en contacto con su naturaleza más ruda, dejando que estuviera con el para apretar el gatillo.
Eran una familia de cazadores como se jactaba orgulloso aún si tuvo que forzar a su pequeño a matar a un ser vivo siempre le recordaba que solo los más fuertes sobrevivían y aún con toda esa experiencia no pudo evitar dar un paso atrás cuando tuvo su reunión de caza con la hydra.
Aparte de ellos iban dos familias más que también eran parte de la hydra, los Romanoff ambos alfas con una adolecente que seguramente era su hija y los Carter que traían a sus dos hijas con ellos Sharon y Peggy, su anfitrión los Rogers salieron dándoles la bienvenida invitándolos a pasar, Sarah la esposa y Omega de Joseph se acercó rápidamente a Anthony.
- hola cariño ¿Le sostienes el rifle a tu padre? - pregunto de forma cariñosa para tomar el gorrito de Tony y acariciar sus cabellos expuestos.
- para nada - contesto interrumpiendo a su hijo. - es su arma fue un regalo de cumpleaños para el ¿Verdad Anthony?
El castaño menor lo vio con enojo para asentir y irse con su madre fue casi como si le fuera despertado un mal recuerdo cosa que Howard ignoro aún sabiendo que el día del cumpleaños número doce de Tony el había estado bebiendo y no recordaba como se lo había dado.
- siento que es un niño encantador estoy segura que si Steven no fuera tan cerrado le caería muy bien. - dijo rápidamente Sarah para irse con los demás pues ya era hora de irse a cazar.
Todos se montaron en los autos para aún más adentro de las montañas haciendo se que notará más la temperatura y ambiente helado acompañado de la vista blanca de la zona, al bajar Joseph tenía consigo dos pastores alemanes y Sarah un rifle al que le metía balas, por su parte su hijo Steven Rogers hablaba amenamente con Sharon y Peggy Carter.
Unas cajas de metal con puertas aparecieron traídas por hombre de la hydra que golpearon un par de veces el metal, estaba acostumbrado a cazar animales propios del bosque pero esto estaría bien pensó Howard hasta que se escuchó un grito humano.
- bueno compañeros carguen armas que llegó la hora de la caza especial. - dijo Joseph con una sonrisa al rostro.
Sharon que era la más curiosa se hacerlo a una de las jaulas y grito cuando una mano la tomo desde adentro, dejando en claro que está vez no iban a cazar animales.
La rubia corrió llorando a donde sus padres ambos se arrodillaron tomándola y dando pasos atrás ante la atenta mirada de todos menos la de María y Arno quienes aún tenían un shock existente corriendo por su sistema.
- ¿Que pasa aquí? - dijo tomando la valentía el alfa de la familia a lo que el rubio se rió en su cara.
- ¿Que no es obvio? Hoy iremos por algunos de los soplones de nuestra organización.
Las niñas Carter comenzaron a llorar negando no querían estar ahí, una mirada de desagrado de Joseph acompañada de una de decepción de Sarah miro a toda la familia.
- muy bien los que no quieran ir que se queden en la cabaña acompañados por mis hombres los demás bienvenidos oficialmente como mando altos de la hydra.
Las niñas corrieron a la cabaña y los padres las siguieron cuando Howard volteo a ver a su familia María tenía en una abrazo protector a sus dos hijos, Arno seguía con la mirada perdida en las cajas de metal mientras Tony sonreía acariciando los cabellos de su madre y dándole palabras de consuelo.
- María dame a los niños nos vamos de caza. - anuncio con un nudo en la garganta sabía que si no muy probablemente saldrían muertos en las noticias. Aún así la rubia negó mirándole con temor.
- dame ya a los niños María. - soltó con su voz de alfa haciendo que María los soltará con el dolor de su alma teniendo el terror de no saber si los volvería a ver.
- esperanos para cenar con los Carter.
Una vez dada la orden tomo a Arno de la chaqueta casi arrastrándolo pues no quería ir y a Tony de su manita para ir con los demás, los Romanoff iban a ocupar calibre pesado mientras que los Rogers cargaban armas algo similares con la diferencia que también en sus pantalones tenían espacios para cuchillos.
- me alegra aún tenerte aquí Howard, a Sarah le callo muy bien tu pequeño. Ahora es momento de decir algunas. regalas
¿Hago un fanfic?
