ᴠᴇɴᴛɪꜱᴇɪ

671 104 1
                                    

Muy lentamente la joven volteó a verle, su mente no formulaba nada y su voz parecía que hubiera desaparecido de la escena.

Wooyoung estaba cruzado de brazos mirando al peliazul que no tenía ni idea de que decir o hacer, estaba totalmente convencido de que con aquello dicho lograría alejar a Eunji de Yeonjun.

Era una victoria asegurada, según él.

― ¿E-eso es ver-verdad? ―se alejaba de Wooyoung para acercarse a Yeonjun quien no dirigía ni la palabra ni la mirada―, ¡RESPONDE YEONJUN, ¿ES VERDAD?!

El repentino alzamiento de voz por parte de la castaña le sobre salto, los menores de la familia estaban en shock sin poder creer lo que habían escuchado.

Las lágrimas no se hicieron esperar en la escena que parecía irradiar un dolor que quemaba en lo más profundo de las entrañas. Era una escena que destrozaba el alma con tan solo estar presente, el ambiente se había tornado tenso y sin movimiento alguno, no al menos por parte de los dos chicos.

―Yo... ―no la miraba y para Eunji eso era signo de que si era verdad lo que Wooyoung había dicho.

―Mi padre fue inculpado injustamente por tu familia ya que estaba en el momento equivocado en el lugar equivocado, ―comenzó a hablar Wooyoung―, había dado un paseo por el bosque para des estresarse y miro como Yeonjun se iba encima de Minho cuando este trataba de defenderse, ―los labios de la joven comenzaron a temblar al igual que todo su cuerpo, el frio traspasaba sus huesos en esos momentos―, mi papá supo que era Yeonjun cuando lo vio cambiar su forma de animal a humana. Al irse este se acercó para ver si Minho seguía con vida, pero desgraciadamente no, Yeonjun le había matado y huido como vil cobarde.

¿Qué tu hiciste qué? ―la voz de Soobin detrás de Yeonjun hizo que este se volteara para encontrarse con el segundo mayor―, mi hermana ha estado conviviendo con el asesino de nuestro padre durante todos estos meses, ¿para qué? ¿también querías matarla?

Ella fue dejada atrás, Wooyoung se puso frente a ella mientras Soobin confrontaba a Yeonjun quien seguía sin decir nada y mucho menos moverse.

Aquella cabellera azul iba perdiendo su color conforme la noche así que a él lo único que le quedo fue huir para adentrarse al bosque y alejarse para no hacer más daño. Sin mirar atrás, sin mirarla a ella, solo se dedicó a correr y correr hasta que se deslizo entre los arbustos para andar ahora en cuatro patas.

Su forma lobo había salido y necesitaba sangre.

Por otro lado, Eunji seguía en shock después de lo que escucho, no sabía si correr detrás de Yeonjun para que le diera explicaciones o simplemente dejarlo ir.

No, optaría por la segunda, ella no quería verle en esos momentos, la noticia había sido impactante, tenía el triple de impacto que la otra noticia sobre Wooyoung y la boda. Por el momento, a ninguno de los dos quería ver, mucho menos a Yeonjun.

Corrió a su habitación y cerró la puerta con llave, se deslizo por la madera y se dejó caer al piso frio, abrazo sus piernas y comenzó a llorar como si no hubiera mañana. Solo eran ella y sus lágrimas en esos momentos nada más. Lloraba por los muertos y su corazón iba incluido en ellos.

Por primera vez se había enamorado y esa primera vez había resultado un total fiasco.

Lo creía perdido.

Camino hasta su cama muy a duras penas para tumbarse en ésta, no bajo para nada, ni siquiera para cenar, el apetito se había esfumado, lo único que quería era dormir en esos momentos sin que nadie le molestara. Quería olvidarse de todo y tal vez creer que todo eso había sido un sueño.

Durante el transcurso de la noche una peculiar visita se presentó con ella, una visita que logro alterar todo su sistema nervioso.

― Mi querida niña.

Miro hacia donde la voz le dirigía y camino hasta que pudo observar mejor aquella figura femenina.

¡Mamá!

Sin dudarlo dos veces corrió hasta los brazos de su madre y la atrajo para consigo. La había necesitado tanto, extrañaba sus consejos y su cálido amor. La necesitaba con ella en esos momentos.

― Tu corazón está roto a causa de un amor inesperado. ―le miro notando esos ojos rojos con los que había ido a dormir.

― No es momento de hablar de ello mamá.

― Solo quiero que recuerdes que el rencor y odio a veces puede cegar a las personas, solo te voy a pedir que escuches a tu corazón y que tus acciones sean sin arrepentimientos.

― Todo está decidido ahora mamá, pronto tu niña será feliz. ―sonrío muy a fuerzas porque esa mentira ni ella misma la creía.

Con alguien que no ama. ―recordó su madre.

― Puedo amarle en un futuro. ―aseguró.

Escúchame bien Eunji, te puedes engañar a ti misma, pero al corazón no, los sentimientos negativos provocan en nosotros a llevar a cabo acciones que no queremos. Debes darte tiempo para escuchar y después analizar, pero escucha primero Eunji es lo único que te voy a pedir.

«¿Escuchar? ¿de qué me sirve escuchar si ya se toda la verdad?»

ʀᴜɴ ᴀᴡᴀʏ | ᴄ. ʏᴇᴏɴᴊᴜɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora