Isak.
—He pensado mucho las cosas y me voy a independizar de una vez por todas. —Asentí en dirección al hombre esperando una respuesta por mi parte desde el sofá de mi departamento.
Llevaba hablando un buen tiempo y yo apenas si le estaba prestando un poco de atención, mientras pasaba mis ojos, distraído, por la pantalla de mi celular a la espera de alguna razón para salir de casa luego de la semana de mierda que había tenido.
En la barra superior, brillaba la notificación de llamada perdida del número recientemente bloqueado. No me importaba que dijeran sobre los que bloqueaban a las personas, anteponer mi estabilidad emocional siempre había sido vital para mí sin importar que me tacharan de infantil. No estaba para andar llorando por un idiota que no sabía que demonios era lo qué quería.
Ni siquiera había venido, ni una vez. Dos semanas en donde guardé la esperanza se fueron al caño cuando lo vi sonriendo en algunas revistas mientras caminaba por la calle. Él estaba bien, solo llamaba, quizás para conseguir algo de mi parte, pero no se lo iba a dar.
¿Para qué? ¿Para que mañana me volviese a decir que no era lo suficientemente bueno para salir del maldito closet?
No.
No iba a ser su sucio secreto escondido en el armario solo porque lo quería.
—Digo, tal vez pueda comprar una casa cerca del trabajo. El dinero no es problema, estoy ganando bien a pesar de que apenas comienzo, pero no sé, ¿qué me dices tú?
Hice una mueca, ignorando la mayoría de las palabras que dijo. Las escuchaba, pero no las procesaba y en este punto no tenía cabeza para mucho. Ni siquiera el trabajo me mantenía del todo ocupado, se lo daba al hecho de que trabajaba en el mismo lugar que el hombre que no me podía sacar de la cabeza. No me ayudaba mucho que Sam comenzara a tener calambres y ahora no pudiese caminar muy bien en la oficina.
Era una mujer sensacional la mayor parte del tiempo, pero estricta. Era la jefa desde que Garret nos dejó, y era la mejor, pero una maldita perra gruñona si no comía su dona antes de las ocho...lo cual era la mayoría de los días porque Kyle olvidaba comprarla o se la comía antes de dársela.
Había comenzado a tomar sus tareas para ayudarla antes de que le gritara a alguno de los novatos y ellos se hicieran ideas erróneas sobre ella que al final solo la pondrían a llorar sobre mí hombro. Pero aún así, con todo el trabajo, siempre encontraba un espacio para volver a los acontecimientos más frustrantes de mi vida.
Pensé en salir hoy. No me esperaba que el idiota a mi lado se presentara en la puerta de mi casa, recordándome que habíamos quedado hace un par de semanas para vernos luego de que no pudiese volver desde Chicago por mi cumpleaños.
—Digo, tal vez al final me vuelva stripper porque mi a mi hermano parece no importarle ni mierda mi trabajo y lo que pasa en mi vida.
—Te apoyo —dije, apenas prestándole atención.
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OVERTIME (Kings Of The Game #7) SIN EDITAR
Romance[T-E-R-M-I-N-A-D-A] Llegar a la zona de anotación cada vez es más dificil, din importar que tantos deseos tengas de ganar...porque incluso el mejor jugador se cansa en algún punto del juego. 1. Antología de la serie KOTG 2. Kings Of The Game #7. ...