26. Compañeros

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- Dectetive Mateo - escucha y Abraham alza su mirada ver a un hombre obeso quien lo mira con mala cara - Responda la pregunta - le pide.

- ¿Puede repetirla? - le pregunta Abraham y el hombre suspira impaciente.

- Ya está es la tercera vez señor Mateo - le reprocha el hombre.

- Objeción su señoría ¿no se dá cuenta que el abogado Miller quiere perjudicar el caso con esa pregunta? - le pregunta el abogado de fiscalía, el juez mira a Abraham.

- Denegado, dejare que el testigo responda, señor Mateo. Conteste la pregunta si no lo hace lo acusaré por desacato - le dice el juez seriamente.

- Está bien. Pero la pregunta es... - dice Abraham y el abogado Miller lo mira con superioridad.

- ¿Qué relación tienen usted y la señorita Montenegro? Su compañera - resalta y Abraham suspira.

- Somos compañeros de trabajo - dice Abraham.

- ¿Cuanto llevan juntos? - le pregunta.

- Señoría... -

- Siéntese señor Mateo - le dice la juez al abogado de la fiscalía, Antonio Mateo.

- Doce años - responde Abraham.

- ¿Y en esos años ustedes no entablaron... una vida personal? - le pregunta Miller.

- Objeción - dice Antonio.

- Lo retiro - dice Miller rápidamente y mira a Abraham - ¿Qué tan cercanos son ustedes? - le pregunta.

- No se a donde quiere llegar con esto - dice Abraham pareciendo confundido.

- Solo responda lo que se le pregunta dectetive - le dice y Abraham suspira acomodándose en su silla.

- Somos cercanos laboralmente, una vez mi ex esposa tenía que ir a un ecograma y la dectetive Montenegro le hizo el favor de llevarla por mi - le habla Abraham.

- Así que si son cercanos - dice Miller - ¿Y qué más? ¿beben una cerveza después del turno? - le pregunta.

- Objeción, especulación - dice Antonio rápido.

- A lugar, señor Miller valla al punto - dice el juez.

- A eso iba, su señoría - dice Miller y carraspea - Ya que la señorita Montenegro, que por desgracia no está aquí por una herida de bala - Abraham tensa su mandíbula - Y su relación con usted era muy cercana, tal vez. Decidieron especular un plan para sabotear a mi cliente - dice Miller y Abraham alzó una ceja.

- Objeción... -

- Lo retiro - dice Miller y toma una carpeta de su escritorio, mira impresionado la hoja que leía - Tiene un buen registro señor Mateo - admite - En cambio su compañera - cierra la carpeta - Está limpia - le dice mirándolo.

- Su señoría - dice Antonio y el juez asiente.

- Señor Miller, le recuerdo que no queda mucho tiempo y usted está montando un circo - le dice el juez.

- Señor Mateo - dice Miller y Abraham lo mira - ¿Es posible que su compañera halla provocado a la señorita Paul y recibir el disparo? - le pregunta.

- Objeción... -

- Denegado, quiero escuchar como responde el testigo - dice el juez.

- La señorita Paul entró al departamento de inteligencia de Madrid con un arma escindida. Esta hay para dispararle a la dectetive Montenegro - le dice Abraham.

- Conteste si o no - le dice Miller.

- No - dice Abraham mirándolo a los ojos.

- Entonces - toma una carpeta - ¿Cómo en un testimonio de uno de los oficiales que estaba en la escena dijo textualmente...? - abre la carpeta - la señorita Paul entró con un arma escondida en su bolso, le apunto y le habló a la dectetive Montenegro "tú sedujiste a mi novio, él te quiere a tí perra ladrona. Me lo quitaste todo" - lee y cierra la carpeta - ¿puede explicar eso? - le pregunta.

Abraham Mateo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora