Capítulo 30

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POV.CHRISTIAN

Termino mi reunión con la Fundación Sin Fronteras. Los cambios realizados a las instalaciones se han generado sin complicación alguna. Al salir de la fundación me reúno con el señor Roosevelt, y me platica que dentro de un mes habrán las graduaciones me pide que sea yo quien entregue los títulos. También me comento que está muy agradecido con el proyecto de agronomía todos los trabajos avanzan muy bien.

Una hora después me despido del señor Roosevelt y comienzo a bajar las escaleras, me acuerdo de que apague el celular y lo prendo observo que tengo algunas llamadas perdidas, mientras continúo bajando mi celular vibra. Me siento contento porque es mi nena quien me llama.

—Nena como estas. —pregunto. Feliz

—No sabía que Christian Grey se cogía a su personal —esa voz yo la conozco pero que mierda está sucediendo.

—Hyde que mierdas haces con ese celular— gruño muy enojado. Porqué tiene el celular de Anastasia

—Da la casualidad de que me tope con esta hermosa empleada—lo escucho decir y mi cuerpo se tensa por completo. No me perdonaría si algo le llega a suceder a Anastasia.

—Ya suélteme por favor —esa voz es de Anastasia. Que mierda le está haciendo el hijo de puta de Hyde.

—Ana....

—Mas te vale venir o ella morirá —dice Hyde maldición porque tuvo que suceder esto justo ahora que estoy lejos de Seattle.

—Juro que si la lastimas te matare con mis propias manos— grito muy enojado. Esto no se quedará así. Taylor viene corriendo a mi

—Señor ha surgido una emergencia. —dice agitado.

—Lo sé el hijo de puta de Hyde me acabo de llamar— bramo. Rápidamente salimos de la universidad y me dirijo con toda prisa a abordar a Charli Tango.

Una hora después llego a la empresa rápidamente subo por el ascensor al abrirse las puertas veo a Evans. Él se acerca a mí.

—Anastasia está en tu oficina se negó en ir a casa— dice me sorprende que la tutee. Pero ahora lo que me importa es verla a ella.

—De acuerdo— me dirijo rápidamente a la puerta, la abro y veo a Anastasia de pie, ella me mira y me acerco rápidamente la abrazo como si mi vida dependiera de ella.

—Nena perdóname —le digo porque es mi culpa que le haya sucedido todo esto.

—Porque me pides disculpas—dice mientras su cara está en mi pecho. Su respiración es calmada.

—Porque no te protegí —digo. Ana niega moviendo su cabeza hasta que veo que se seca las lágrimas. —No llores nena en verdad lo lamento. La acurrucó más a mi.

—Tu no sabías que esto sucedería y por favor deja de pedirme disculpas—Ana levanta su cara. Y el coraje se apodera de mi cuerpo cuando veo los golpes en su rostro. La mire a los ojos. Me sentía muy mal. Soy un desastre de persona.

—Deberías haberte ido a casa y no estar aquí—le digo en tono amenazador separándome de ella. Vamos Grey tranquilízate  no seas frío con Ana dice mi subconsciente.
Suspiro sabiendo que mi subconsciente tiene toda la razón.
Fijo mi vista en Ana.

—Para que para ponerme a llorar por que un loco intento matarme para eso— dice enojada. Tonto Grey se dio cuenta de tu frialdad. Suspire e intente mejorar mi humor. Anastasia me miro y negó. La vi cuando caminaba dirigiéndose a la puerta.

Camine y la alcance tomándola del brazo.

—No quise decir eso, lo siento— la envolví en mis brazos y le di un beso en la frente. —vamos a casa si— pedí mientras la seguía abrazando, ella solo movió la cabeza afirmando. La lleve por el ascensor privado este iba  directo al subterráneo ya que así nadie nos vería.

Princesa ValienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora