• ¿Te sientes de esta forma? •
La mayoría de capitales se encontraban llegando. A Viena, Moscú y CDMX les faltaban minutos para que sus vuelos llegaran. Viena y CDMX iban dormidas, luego de un largo interrogatorio de por parte de ambas, decidieron descansar. Moscú estaba más cerca de tirarse del avión que antes. El niño no deja de querer tomar las cosas de Moscú y él ya se encontraba cansado.
A Arkansas solamente le faltaban Sofía y Moscú. A Arizona solo Lima.
Lima iba con los nervios de punta por volver a ver a Arizona, estaba esperando su maleta para ir a buscar al grupo con el cual él iría al hotel, cuando lo vió, tal cual la primera vez que se vieron.
(...)
1824
Lima entró a la habitación donde se encontraba Arizona a buscar unos papeles que su tío México lo había mandado a buscar. La puerta se encontraba abierta así que sólo entró y vió un lindo castaño, en pijama, concentrado en terminar de escribir sobre unos papeles. Lima sintió mucha vergüenza y no sabía la razón, se sentía nervioso y estaba sonrojado, quería salir de ahí pero su cuerpo y cerebro no reaccionaban, cuando al fin reaccionaron era muy tarde, Arizona había alzado la mirada. Lo miró curioso por estar tan sonrojado y nervioso. Lima quería desaparecer.
- Hola - Dijo Arizona de manera seria.
- Hola, ¿Cuál es tu nombre? Me gustaría saber sobre ti - "Dijo" Lima, aunque en realidad se detuvo en el Hola. Lima bajó la mirada pero se retó a si mismo a alzarla y sonreírle a Arizona. Cuando sonrió, Arizona le devolvió la sonrisa, una sonrisa tan linda, fue lo que pensó Lima.
Ambos sentían una mezcla extraña de sentimientos, un torbellino de emociones.
Pasaron por días y Perú tuvo que quedarse con México por un tiempo, así que Lima y Arizona se encontraban en la misma casa. Increíblemente no se conocían, pues sus padres jamás los presentaron. El tiempo en el cual Perú se quedó con México ellos dos siguieron hablando, conociéndose.
Con cada conversación se enamoraban más del otro.
Llegó el día en el cual Perú se tenía que ir, por consiguiente, Lima. Se despidieron pero quedaron en una cita en una calle cercana.
Para Lima, Arizona era muy inteligente, lindo, ingenioso y todas las características buenas del mundo. Para Arizona, Lima era tan encantador, le parecía increíble que esa capital causara tantas cosas en él, lo hizo reír, lo hizo sonrojarse, nadie era competencia para ese peruano.
Para ambos parecía demasiado bueno para ser verdad, pero lo era. Les encantaba estar juntos.
Un día quedaron de encontrarse en la casa de Lima.
- Hola - Dijo Arizona con una sonrisa.
- Hola, ¿Qué tal tu día? - Preguntó Lima con una gran sonrisa.
- Mejor ahora que te veo - Contestó tomando la mano de Lima con un sonrojo y ambos comenzaron una conversación.
Pasaron los días, seguían viéndose pero ninguno se atrevía a expresar sus sentimientos, tenían miedo de la sociedad. Un día Lima se armó de valor.
- Hola - Dijo Arizona con una sonrisa.
- Hola, discúlpame pero necesito preguntar... - Tenia miedo, sus manos temblaban, Arizona al notar esto las tomó entre las suyas, Lima tomó todo su valor, respiró hondo y preguntó - ¿Te sientes de esta forma, como yo? - Arizona se sorprendió por la pregunta, no esperaba que Lima le dijera eso. El más bajito bajó la mirada. Arizona lo tomó delicadamente del mentón, alzó su mirada.
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Attack on 51
Fantasy"Los territorios son solo tierra, no poseen cuerpo, su representación se hace por medio de los presidentes" ∙ Una pandemia mundial, amenazas de una tercera guerra mundial, secretos de estado revelados, la caída de la realeza en Reino Unido, millone...