Never say never [L.S]

Just do it

—Guarda silencio ¿quieres?— susurraba Louis a su hermana fuera de la bocina de su celular intentando que Harry no lograra escucharlo del otro lado de la línea, fué en vano.

—¿Lou?, ¿con quién estás?— preguntó curioso Harry removiendose en el sofá de su casa.

—Con nadie amor, ¿qué decías?—

—Claro que estás con alguien, escuché que pediste que guardaran silencio, ¿es tu mamá?—

—No Hazz, no es mamá, sigue diciendo lo que hablabas antes— volcó los ojos.

—¡Ven a darme un beso, Lou!— chilló la pequeña al lado de el con el único objetivo de provocar un caos, ella lo sabía, sabía que Harry tenía una mecha muy corta y cualquier cosa podía hacerlo enfadar, más aún tratándose de Louis.

—¿Qué demonios?— gritó Harry al otro lado del teléfono.

—¡Cierra la boca de una vez!— está vez Louis sonaba molesto y no se tomó el tiempo de tapar la bocina de su celular.

—¿Quieres que cierre la boca?—

—Tú no, Hazz—

—¿Entonces si estás con alguien?—

—¡Si!, si Harry, estoy con Fizzy, la mocosa está molestando hace un buen rato y quiere que te molestes conmigo por qué le hace gracia vernos enojados— contestó con desespero en su voz.

La pequeña ojiazul solo miraba los gestos de su hermano con una sonrisa en su rostro como si acabara de ganar un trofeo.

Harry soltó una ruidosa carcajada haciendo que Louis mostrara una cara de confusión aún mezclada con su reciente enfado.

—¿Qué?—

El rizado tardó segundos en regular su respiración después de su estruendosa ruida y respondió con una inhalación.

—Es que esa niña es una pequeña bomba de problemas, Lou—

—Lo es, es muy problemática, perdón por no haber dicho en un principio que era ella—

—No te preocupes bebé. Te decía que quiero que vayamos a un lugar mañana—

—Claro cariño, ¿a dónde?—

—Es una sorpresa. Espero que no te moleste que nuestras familias vayan también— el ojiverde estaba cruzando los dedos para obtener una respuesta positiva por parte del otro, pero como era costumbre, Louis era una persona demasiado comprensiva.

—Me parece una idea genial, no hemos tenido tiempo de convivir entre todos, aún que Anne y mi mamá se conocieron el otro día—

Louis soltó una carcajada mientras que Harry sólo pudo soltar un bufido al recordar aquella embarazosa situación.

—Ni me lo recuerdes, amor—

*flashback*

Harry y Louis estaban en el estacionamiento del centro comercial, recargados en un auto ajeno a ellos. El castaño comenzó a besar al otro como si estuviera muy desesperado, pero el rizado se controló por qué como ya sabemos, estaban en un lugar bastante público.
El más alto se separó del beso para hablar.

—Espera Louis, ¿todo bien?—

—Todo más que bien, bebé— volvió a unir sus labios en un beso un tanto húmedo ya que sus lenguas se encontraban en una danza, compartían saliva como si no hubiera un mañana.

El más bajo sintió un tirón en su parte baja, justo por debajo de su pantalón. Por la poca distancia que compartía su cuerpo al de Harry, el rizado pudo sentir aquello, y claro esto no hizo más que calentarlo más de lo que ya estaba.