Sólo dos cosas

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Cuando ya se estaba haciendo demasiado tarde, Harry decidió dejar a Louis en su casa, este tendría problemas ya que no había avisado a su madre que no llegaría temprano y no respondió ninguna de sus llamadas.

Ambos chicos caminaban por las calles de Londres, sólo con la luz de la Luna y el alumbrado público que en esas calles no era muy bueno. Por la mañana había llovido un poco, así que ahora se encontraban pequeños charcos en el suelo creados por el agua de la lluvia.

El más bajo caminaba con una sonrisa boba en su rostro, le dolía la cara de tanto sonreír, y todo esto a causa de la gran tarde que había pasado al lado de Harry, ese chico lo hacía tan feliz. Pero el rizado tampoco se quedaba atrás, sus ojos brillaban con demasiada intensidad, y los hoyuelos no habían dejado de perforar sus mejillas en ningún momento, se sentía completamente feliz con ese pequeño al lado de el.

Louis por fin decidió romper el silencio cuando estaban a solo 3 calles de llegar a su casa.

-Hazz- el rizado volteó su vista hasta el haciendole saber que lo estaba escuchando -Tengo miedo- dejó la frase al aire y Harry frunció el entrecejo sin saber a qué se refería el ojiazul, esto hizó que Louis continuara hablando -Miedo a que te canses de mi, a qué vuelvas a tomar la mano de ella en lugar de la mía. En serio me aterra pensar que todo esto solo está pasando en mi mente Hazz- el corazón del ojiverde se oprimía cada vez más con cada una de las palabras que salían de la boca de su chico.

-No, no, no- negó con la cabeza varias veces -no pienses en nada de eso Lou, yo solamente tengo ojos para ti, ya te lo expliqué- el rizado posó sus manos en las mejillas del más bajo- Yo sé que no va a ser nada fácil para ti volver a confiar en mí, pero te juro que estoy siendo del todo sincero; eres la única persona que tiene todo mi corazón, estoy completamente enamorado de ti- finalizando esto Harry dejó un casto beso en los labios del otro, era uno tierno, suave y lento, lleno de amor. Por medio de este le estaba transmitiendo todos sus sentimientos, y si, Louis lo sentía.

El castaño estaba hecho un tomate, sus mejillas ardían en un color rojo y todo esto debido a las palabras de Harry, era tan tierno como después de tanto tiempo se seguía sonrojando cada que el otro le decía algo lindo.

-Para ya, eres muy cursi, Harry- bromeó rodando los ojos.

-No tienes que llamarme Harry. Se supone que eso lo haces cuando estás enojado, espera, ¿estas enojado?-

Louis soltó una risita por lo bajo, al más alto le encantaba escuchar a su bebé reír, su risa le causaba tanta paz, podría escuchar este sonido por horas sin que le cansara.

Estaban parados frente a la casa de Louis, ninguno hablaba, solo se estaban viendo a los ojos, esa mirada que tanto poder tenía, era realmente increíble como se decían tantas cosas sólo con una mirada. Para muchas personas esto podía ser tonto, pero para ellos que habían tenido que esconderse, una mirada significaba tanto, y decía más que todas las palabras en el mundo.

Louis se paró sobre los zapatos de Harry para alcanzar sus labios y unirlos en un beso, el rizado pronto lo siguió. Delineó el labio inferior del ojiazul son su lengua, causándole a este cosquillas y que sonriera en medio del beso. Fue ahí mismo, fuera de la casa del menor, a altas horas de la noche y sólo con la poca luz de la Luna, que Harry se dió cuenta de todo lo enamorado que estaba de ese chico, de ese chico que tantos dolores de cabeza le había causado; el mismo que podía causar tantas emociones revueltas en el, podía hacer y deshacer al rizado con solo una sonrisa o un abrazo, no necesitaba nada más para estar seguro que estaba perdidamente enamorado, amaba a Louis Tomlinson.

El castaño mordió el labio de Harry haciendo que este entreabierta los labios dándole paso al otro de introducir su lengua en su boca, y Louis no dejó pasar la oportunidad. No supieron cuánto tiempo llevaban así, compartiendo besos largos mientras el ojiazul acariciaba el cabello del otro, y este dibujaba círculos imaginarios en la cintura de él por debajo de la camisa. Tal vez habían pasado segundos, minutos, horas, no querían saberlo, lo único de lo que me estaban conscientes era de que amaban lo que sea que tenían.

En medio del beso, pronto vinieron dos cosas a la cabeza de Louis, la primera era que Harry no había terminado aún con Camille, y la segunda era que nunca le había pedido que fueran novios, así que por más que se amaran, esto estaba mal en ciertos puntos.

Se separó de los labios del más alto, haciendo que este soltará un gruñido de disgusto, dió un paso atrás y volvió a mirar a Harry a los ojos, no pudó evitar sonreír al ver a el chico con sus labios rojos e hinchados debido a todos los besos que habían estado compartiendo.

-¿Qué pasa, Boo?- preguntó confundido.

-Son dos cosas, Hazz- Harry soltó un "mhm" dándole a entender que siguiera hablando -No haz terminado con Camille, eso me incómoda, y la segunda, no te la diré por qué no quiero apresurar nada, ni quiero que lo hagas por obligación o por presión, averígualo- dejó un beso en la mejilla del ojiverde y entró a su casa.

Su madre se encontraba sentada en el sofá de la sala, no tenía una cara muy amigable, pero no se notaba enojada, más bien estaba preocupada.

-Mamá...- habló con la mirada baja.

-Santo Dios Louis, ¿dónde estabas?, estaba pensando lo peor, ¿sabes lo preocupada que me tenías?- reclamó la mujer.

-Lo siento mamá, se que debo avisar o contestar tus llamadas, pero no me arrepiento de nada, este día sin duda es uno de los mejores que he tenido, ¡en años!- dijó dando pequeños saltitos como un niño pequeño con algún juguete nuevo.

-Shhh- Jay pusó su dedo sobre los labios de Louis indicándole que hiciera silencio -estas no son horas para gritar, Lottie está dormida y mañana debe levantarse temprano, cómo todos- remarcó estas últimas palabras -no se si estes enterado pero mañana tienes escuela-

-Oh mamá, olvídate de eso, ven que tengo mil cosas por contarte- habló el ojiazul saltando hasta el sillón, y dando palmadas en el lugar a un lado de el, indicándole a su madre que se sentará ahí -es sobre Hazz, mami-

-Todo siempre es sobre Harry, cariño- Johanna soltó una pequeña risa burlona, Louis todo el tiempo hablaba de ese chico desde que lo conoció, nunca había otro tema de conversación en la casa de los Tomlinson.

-Basta. Pues tú sabes, hace un mes que el había estado con esa chica, y yo estaba mal- su madre asintió, al tanto de todo esto -nada era verdad mamá- chilló emocionado -todo fué culpa de su padre, el lo amenazó, yo sabía que Harry nunca me haría daño- mencionó recostando su cabeza en el regazo de la mujer.

-Me alegra cariño, yo siempre supé que ese muchacho era bueno para ti- comenzó a acariciar el cabello de su hijo, haciendo que este caiga en un profundo sueño. La verdad estaba muy cansado por haber caminado hoy, el no estaba acostumbrado a salir como ya lo había mencionado antes.

Harry estaba confundido, no sabía que era esa otra cosa que inquietaba a Louis, aún que lo sospechaba no estaba del todo seguro, aún así haría lo primero, terminar toda relación que existiera entre el y la rubia chica que tantos problemas había traído a su vida.

Hola loveeeees, disculpen que no les había actualizado, estaba ocupada jiji, espero que les guste este capítulo, calculo que faltan unos 5 para el final, y tal vez haga algunos capítulos extras.
Cuidense mucho y voten por los caps jj, all the love M<3

Never say never [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora