Never say never [L.S]

¿No es ilegal?

Niall estaba llegando al centro comercial donde vio a un Louis totalmente distraído en una tienda de ropa, era de esperarse ¿a qué más iría el ojiazul al centro comercial?.

Caminó despacio hasta el castaño hasta llegar a el —¿Así harás caer a Harry?— preguntó el rubio señalando una prenda de ropa que Louis estaba observando con adoración.

—No seas tonto, esto solo es para verme un poco mejor— respondió Louis muy seguro de si mismo.

Caminó hacia el mostrador pagando la prenda que tanto le había gustado y coqueteando un poco con el cajero en el proceso, era un chico bastante guapo, estira alta, cabello castaño con un tinte rojo que ya estaba por desaparecer, y una piel muy blanca, realmente a Louis le parecía atractivo, solo atractivo.

—Aqui está tu cambio lindo, que tengas un buen día— se dirigió el chico a Louis guiñándole un ojo y poniendo para nada discreto un papel en la bolsa, el cual contenía su número telefónico seguramente, pensó Louis.

—Hasta luego, guapo— fué lo que Louis respondió, dejando completamente a un lado su timidez.

Estando fuera de la tienda Niall no dejaba de observar con orgullo a su mejor amigo.

—¿Qué-rayos-fué-eso-Tomlinson?, nunca habías coqueteado tan bien— chilló el chico rubio con emoción.

—Sólo estoy practicando para el verdadero coqueteo que muy pronto vas a ver Niall, tranquilo— respondió muy seguro Louis.

Caminaron un buen rato por todo el centro comercial, hasta que llegó el momento de despedirse, Louis tomó un taxi a su casa al igual que Niall.
Estando ya en ella, el ojiazul no dejaba de pensar en la manera tan grosera que Harry le había hablado esa mañana y eso solamente le provocaba más coraje e impaciencia para poner en marcha su plan. Pero, ¿Cuál era su plan?.

°°°

Eran ya las 7 de la mañana y Harry apenas estaba caminando aún adormilado hacia la cocina donde se encontraba su familia desayunando.

—Hasta que te dignas a aparecer Harry, esto no es un hotel donde puedes levantarte a desayunar a la hora que gustes ¿me escuchaste?— Soltó Des en un tono para nada amigable.

_No me jodas padre son las 7 de la mañana y lo último que quiero es escuchar lo que tienes para decirme— y es que Harry detestaba con todas sus fuerzas a su padre.

—Cuida lo que dices mocoso, estás hablándole a tu padre—

—Des, deja en paz a Harry, desayunemos tranquilos por una vez ¿quieres?— dijó Anne con su característica sonrisa en su rostro.

—¿A esto le llamas desayunar tranquilo madre?, me voy a el colegio, te veo después, nos vemos Gemms— fué todo lo que dijó Harry antes de levantarse de la mesa y tomar su mochila mientras caminaba a la puerta pero siendo interrumpido por su padre antes de salir.

—No quiero volver a escuchar que estuviste cerca de ese chico maricón si no quieres conocerme de verdad Harry— sentenció Des antes de escuchar a Harry salir con un portazo.

El rizado al entrar al colegio no pudo evitar ver como todos murmuraban cosas entre sí, y mentiría si dijera que no tenía curiosidad de saber que era lo que tanto causaba revuelo hoy, pero la sorpresa que se llevó al descubrir la razón por la que medio colegio estaba secreteandose fue realmente alucinante.

Caminó por los pasillos hasta su casillero y fue detenido por un Louis totalmente diferente, su cabello estaba acomodado hacía un lado pero con un ligero bucle que lo enredaba al final, tenía unos pantalones rojos malditamente ajustados que resaltaban más sus curvas y una camisa con rayas azules, se veía como un jodido modelo, ¿cómo es que no era ilegal andar por ahí vestido tan condenadamente bien como lo estaba Louis el día de hoy?.

—¿Se te perdió algo Styles? ¿O quieres una foto de este "maricón"?— dijó Louis con una sonrisa cínica y haciendo énfasis en la palabra maricón, para después guiñarle un ojo y seguir caminando moviendo de más sus caderas en el proceso, y es que Harry no sabía el maldito infierno que le esperaba por haber hecho sentir mal a Louis el día anterior.