NO ES MI SUGAR DADDY ||Ziam||

Capítulo 2

—Zee, amor —susurró el castaño dejando besos por todo el rostro de su novio quién se removió levemente mientras abría los ojos.

—Que buena forma de despertar —dijo Zayn, sonriendo, mientras atraía a Liam hacia su cuerpo poniendo sus manos en la espalda de éste— ¿Cómo dormiste? —le preguntó dándole un tierno beso en la punta de la nariz.

—Mal. Por tu culpa casi no pude dormir —se quejó Liam con un puchero.

—Lo siento cariño —se disculpó besándole en el cuello.

—Como si una disculpa arreglara todo —manifestó el castaño con un bufido.

—Bueno, pero también es culpa tuya.

—¿Mía? ¿Por qué?

—Porque eres tan jodidamente hermoso que me resulta difícil resistirme —le dijo en el oído para después sonreír mordiéndose el labio inferior— ¿Y si nos quedamos aquí todo el día?

—No creo que sea posible —dijo Liam alejándose—. Yo tengo que ir a mí universidad y tú a la tuya —añadió poniéndose de pie para después levantar sus boxers del piso y poniendoselos miró a Zayn quien había vuelto a cerrar los ojos— Zayn ¿Me estás escuchando? —preguntó elevando una ceja mientras se cruzaba de brazos.

—Perdon. Uh... —sentadose con rapidez al borde de la cama— ¿Por qué no te vas a duchar mientras yo preparo el desayuno?

—Me parece una buena idea —sonrió Liam acercándose a Zayn y agachándose para darle un casto beso.

(...)

—¿De verdad no quieres que te lleve? —preguntó Zayn subiéndose a su coche y bajando la ventanilla para mirar a Liam— No quiero que vayas en el transporte público.

—Iré caminando —respondió el castaño— De todas formas tú tienes que ir a tu casa.

—Bien, pero iré a recogerte y eso no está a discusión.

—De acuerdo —aceptó rodando los ojos con una sonrisa— Pero ahora vete.

—Me gusta cuando te pones mandón —dijo el azabache— Ven aquí y dame mí beso de despedida.

—¿Quién es el mandón ahora? —repuso acercando su rostro, quedando a centímetros de los de su novio para unir sus labios— Te amo.

—Te amo mucho más.

(...)

—Por fin llegas ¿Donde estabas? ¿Donde pasaste la noche?

—No me molestes Jaiden —dijo Zayn pasando por un lado de su hermano.

—Soy tu hermano mayor, Zayn, ten más respeto —manifestó el azabache mayor con una expresión seria— Nuestro padre estaba preocupado.

—Iré a mí habitación. Se me hace tarde para ir a mí universidad.

—¿No piensas responder las preguntas que te hizo tu hermano, Zayn? —habló un hombre bajando por las gradas.

—Padre —dijo Zayn viendo hacia el hombre— Y-yo dormí en mi departamento.

—¿Tu departamento? Dirás el departamento que yo compré con mí dinero —manifestó parándose al frente de su hijo menor.

—Padre, yo te dije que iba a pagarte cuando tuviera trabajo —repuso el azabache desviando la mirada.

Ni siquiera quería mirar a su papá porque cuando estaba enojado era mejor evitar el contacto visual y mantenerse lo más callado posible.

—¿Y cuando será eso? ¿Dentro de cinco años? ¿Tal vez diez?