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Venir al aeropuerto era horrible, más cuando esta por anochecer, pero valía la pena pues mi mejor amigo estaba por bajarse del avión junto a su hermana pequeña y los había extrañado demasiado.

Slade estaba a mi lado sonriente, hacía dos años que no veía a Tob y según él lo extrañaba.

Extrañaba sus charlas de basquetbol

—¡Den!— gritó una voz chillona, wow hace mucho que no la escuchaba tan cerca.

¡Em!

—¡Malfoy!

—¡Te matare Tobías!— grite en respuesta a su saludo, haciendo que todos lo que estaban cerca mío giraran su rostro hacia nosotros.

Él sonrió orgulloso y me abrazo, era un idiota pero lo había extrañado demasiado.

Había extrañado sus abrazos, su sonrisa orgullosa, el brillo de sus ojos marrones cuando hablaba de algo que le importara o simplemente que se paseara en una toalla por el departamento, su departamento, en Brasil.

—Gran manera de recibir a tu alma gemela — exclamó mientras se ponía una mano en el corazón haciéndose el ofendido.

—Ya quisieras tener el alma tan genial como yo...

—Cállate Tob ¿no ves que acá vamos de llegar y ya la estás molestando?— exclamó Emily acomodando su apego cabello negro, le sonreí, esa chica era como mi hija.

¿Enserio Denis pensando en hijos a esta edad?

Chicos ya conocen a Slade — indique a mi primo quien tenía una sonrisa — ella es Cristina, su novia — Cris sonrió tímidamente mientras saludaba a mis mejores amigos — y él es Ethan.

El último sonrió sinceramente, algo que me parecía sorprendente, Ethan no era de sonreírle mucho a las personas, en verdad prefería mantenerse alejado y frío, claro todo eso menos conmigo.

—¿Nos podemos marchar ya de acá?— pregunte esquivando a una señora que parecía venir para pisotearme toda la cara.

—Hasta que alguien lo dijo— exclamó Em y con una gran sonrisa, por su comentario, me dirigí a la salida.

Odiaba viajar en Taxi

Eso era lo único que tenía para opinar sobre la vuelta a casa, al llegar bajamos las cosas de los chicos y la subimos al departamento, en silencio.

Si se pregunta cómo nos acomodamos para dormir en el apartamento la respuesta fue fácil, Em y Tob dormirían en mi habitación y pues yo con Ethan.

Aunque debía aceptar que Ethan había estado muy atareado las últimas semanas como para poder volver a tocarnos.

—¡Den!

—¿Qué Em?

—¡Quiero saber el chisme completo!— exclamó sentándose en mi cama, estábamos ordenando sus cosas en mi habitación.

Claramente sabía de qué hablaba, Ethan Pons, le empuje el rostro para que se tirara en la cama.

—Estás muy chica para esas cosas— acusé

—¡Den!

—No

—Ufff

—Pero — siempre había un pero ¿verdad? — ¿Qué hay de ti?¿algún chisme?

Los ojos de Emily parecieron iluminarse y de repente apagarse, algo andaba mal, en verdad algo andaba terrible.

—¿Me vas a decir qué pasa?

Mi vida a través de tus ojos  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora