Llegamos tarde (Madelaine y tu)

⛅Capitulo-17⛅

Narra Mads.

Arreglaba mis cosas ya que el día de mañana me iba a ir con mis padres para poder pasar mi cumpleaños con ellos, en lo que terminé de arreglar lo que iba a necesitar salí de mi habitación ya que quería estar un rato afuera antes de irme, aunque sé que volveré.

Sali de mi habitación para comenzar a caminar por aquellos pasillos, pensé en una persona con la cual estoy segura que ha de querer pasar el rato conmigo, asi que sin más y dirigí a su habitación donde al tocar la puerta fue ella quien la abrió para verme con una sonrisa.

-Mads: Hola – le sonreí.

-Xx: ¿quién es? -- una persona se asomó por detrás de ____.

-Mads: hola Carolina – ella sonrió.

-Caro: Hola Madeliane, a que se debe tu visita al cuarto de mi amiga – camino para ponerse en frente de ella.

-Mads: solo vine a ver como estaba.

-Caro: pues estamos bien.

-Mads: que bueno – asentí.

-Caro: sabes justo me acorde que Jaime me quería ver, asi que yo ya me voy – dijo para asi mismo salir de la habitación dejándonos a ____ y a mi solas.

-___: es gracioso – sonrió.

-Mads: ¿por qué?

-___: porque Jaime esta para el otro lado y ella se fue para ese -- señalo.

-Mads: creo que luego se dará cuenta – ella soltó una leve risa para asi hacerse a un lado.

-___: adelante, pasa – pase por su lado para asi entrar.

Al entrar su camilla estaba algo desordenada lo que me hacía saber que recién se levantó, me senté en esta para asi verla entrar al baño con algo de ropa en su mano.

Pasaron los minutos para asi verla salir ya cambiada, camino para quedar en frente mío.

-___: y bien señorita Petsch que vamos hacer el día de hoy – me sonrió.

-Mads: no lo sé, tienes algún lugar que enseñar -- su rostro cambio a uno pensativo.

-___: en realidad si, tengo uno que te puede gustar.

-Mads: ¿y por qué no me llevas?

-___: pues ahora te llevare – extendió su mano para asi tomarla.

Al salir de su habitación ambas caminamos por los pasillos, pero sin tomarnos de la mano que la mayoría de veces, la seguí por aquellos pasillos hasta que entramos al ascensor para ella marcar un piso.

-___: antes les tenía miedo a los ascensores – hablo de la nada.

-Mads: ¿por qué?

-___: pues explica cómo pueden subir, creía que era por arte de magia o porque algún ser sobrenatural los subia y bajaba – reí por la imaginación que tiene.

-Mads: ¿hasta qué edad les tuviste miedo?

-___: hasta los 11, después fue gracias a las películas que supe cómo eran.

-Mads: ¿y cuando te subías a uno que hacías? – en ese momento las puertas se abrieron para asi salir ambas.

-___: tomaba la mano de mi madre o padre para cerrar los ojos y que no me diera miedo.

A mi mente llego una imagen de una pequeña ____ tomando la mano de su madre y cerrando sus ojitos para no ver como el ascensor subia o bajaba y con su carita de miedo haciendo que de ternura y provocando una sonrisa en mí.

Seguimos caminando hasta que ____ se detuvo para asi abrir una puerta y encontrar una habitación vacía y con unas colchonetas para hacer ejercicio en el suelo.

-___: aquí algunos doctores o enfermeros vienen para hacer yoga o solo estar tranquilos.

-Mads: ¿es solo para enfermeros y doctores?

-___: no, también pueden venir los pacientes, pero nosotros casi no lo ocupamos – camino para asi quedar parada en el medio de la habitación.

-___: por eso pensé en ti, es tranquilo, sin ningún tipo de ruido, el lugar ideal para estar en paz.

-Mads: gracias – ella sonrió.

-___: ahora ya tienes tu lugar de paz, ya no necesitas subir hasta la azotea para tenerla.

-Mads: pero subiría la azotea para estar contigo.

-___: eso es lindo.

Pensé que me iba a decir algo más, pero al parecerme equivoqué esta vez.

-Mads: ¿y tu vienes aquí seguido?

-___: no, realmente no me gusta este lugar, prefiero el ruido de la ciudad en la azotea que este.

Nos quedamos en silencio mirándonos, en ese momento paso por mi mente lo sucedido en la azotea aquella noche, momento que claramente aun no olvido.

-___: te quiero Madelaine – hablo.

Aquellas palabras hicieron que sintiera una gran felicidad en mí, por lo que sonreí.

-Mads: también te quiero – ella sonrió.

-___: dejemos lo cursi para después y duérmanos en este lugar – hablo de una manera divertida para asi acostarse en una de las colchonetas.

-Mads: ¿te gusta mucho dormí?

-___: me encanta – reí.

Caminé para asi acostarme a su lado y mirarla asi como ella a mí, ambas sonreímos, cerré mis ojos para asi ir consiguiendo el sueño, cuando ya estaba por quedar dormida sentí un toque en mi mejilla para asi quedar dormida.

••Continuará••