«𝐒𝐈𝐋𝐄𝐍𝐓 𝐕𝐎𝐈𝐂𝐄» ••𝐓𝐚𝐞𝐠𝐢•• 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞 ✿•

Episodio 13: sentimientos encontrados

En tu inconsiencia sentimientos fortuitos se hacen presentes.

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El interior de la casa se hallaba tranquilo, con el aire cálido respirándose con beatitud como resultado del silencio satisfactorio e incluso sosegador que  le embargaba por completo. Cosa que para la ingenuidad de algunos no hacía más que llenarle de tranquilidad mientras a otros la intriga de saber el resultado de tanta calma en dicho ambiente les carcomía en curiosidad, sin embargo, aquello duró poco para cuando el sonido del timbre ser oprimido se escuchó por los alrededores de la casa al igual que los pequeños pasos llenos de ansiedad nacientes de uno de los pasillos. La pequeña Eunha corría totalmente ansiosa hasta posicionarse frente a la puerta donde colocándose de puntitas no dudó un segundo si quiera en abrirla, sus fanales habiéndo destellado entonces mientras de sus pequeños labios una sonrisa amplia llena de sincera felicidad se hacía presente cuando logró percibir a la persona frente así quien de igual manera le sonrió.

La ingenuidad abarcándole por completo.

—¡Hana, noona!—saludó ella con total emosión abriendo sus pequeños brazos para que la omega contraria pudiese cargarla para seguidamente depositar en uno de sus pomposos mofletes un beso casto, lleno de aquel gratificante cariño que era más que recíproco—¿donde habías estado durante todo este tiempo? hace días que Eunha llegó a casa pero si quiera me llamaste para saludarme. Incluso le pregunté a papá por tí pero solo me dijo que estabas bien—sus manitos dignandose ha acariciar de manera meliflua los cabellos rubios de la omega sintiéndo como ésta depositaba en su frente un besito quédito, mientras se adentraba a la casa consigo en brazos.

—También me alegra mirarte mucho Eunha-ah, realmente lamento no haber podido saludarte antes pero me hallaba demasiada ocupada, además de que tu padre tiene total razón, me he hallado bien últimamente pero ahora me encuentro mucho más feliz por poder saludarte, cariño—sus belfos estirándose en una amplia sonrisa mientras colocaba a la cachorra de pies sobre la superficie del duro suelo, no tardando en acuclillarse frente a sí para acariciarle con mancedumbre los rubios cabellos—de hecho, te he traído un obsequio para compensarte por no haber venido antes—entonces despojándose de su bolso de mano se encargó de sacar de éste un pequeño oso de color rosa pastel con una especie de corazón en su barriga. Sensillamente la Omega no comprendía con exactitud el porqué el gusto tan excesivo de la pequeña cachorra por aquellos ositos sin embargo, la felicidad que la chiquilla irradiaba de sus orbes marrones era tanta que aquello era más que solo basto para que aquel sentimiento lleno satisfacción se instaurase en su pecho.

—¡Es sincerosita! ¡oh dios me gusta mucho, realmente te lo agradezco tía Hana!.

Habiendo la cachorra otorgado un ligero saltito lleno de emosión mientras entre sus manos tomaba el pequeño osito de peluche apretándolo entre sus delgados bracitos, siendo aquello el resultado de que una melodiosa risa se escapase de los labios de la bonita fémina.

—Es de mi total agrado que te halla gustado, bebé, ahora podrás tener uno más de los care bear's que tanto te gustan, ¿acaso has de tener a gruñoncito contigo?—incorporándose de su puesto la omega colocó un mechón de su rubio cabello tras su oreja mirando a la cachorra asentir totalmente efusiva, preguntándole segundos después aquella duda—¿donde esta tu padre, nena? ¿podrías decirmelo por favor?—recibiendo como respuesta un pronunciado puchero de los labios rosáceos de la chiquilla junto a un asentimiento de cabeza quédito.

—Papá se encuentra en el despacho con el abuelo Ji Chul en estos momentos, me había dicho que no podía ir ahí porque se encuentran realmente ocupados, así que tendrías que esperar un poquito, tía Hana, pero si quieres puedes estar conmigo en la cocina, ¡oh! podría presentarte al príncipe si así lo quieres.