Mi única razón para vivir {R. #1}✔

Capítulo 32.

B A S H.

8 de septiembre del 2021

Esa noche llegamos al hospital a la 01:15am y tras seis horas de trabajo de parto de donde mi mano salió casi fracturada, exactamente a las 07:45am nació el segundo amor de mi vida midiendo 48,3cm y pesando 3,402kg, haciendo saber con su potente llanto que había llegado a este mundo con unos fuertes pulmones.

Lo que sentí al cargarla era inefable, verla tan pequeña lloriqueando y frágil entre mis brazos, me hizo darme cuenta de que uno sí podía enamorarse más de una vez en su vida, que uno podía amar a más de una mujer, a mí me había pasado nada más verla, sobre su cabecita reposaban unos pocos mechones castaños que contrastaban con su piel pálida, la sorpresa nos la llevamos cuando abrió sus hermosos ojos dejándonos ver su heterocromía, cosa que el doctor dijo era bastante poco común, su ojito derecho era verde y el izquierdo azul profundo, herencia de su mamá, sus labios eran gruesos y rosados, y sus mejillas regordetas aumentaban de tamaño al hacer pucheros, era la cosa más hermosa que había visto en toda mi vida y saber que era mía me provocó querer correr con mi torbellino y mi huracán hacia una cúpula donde nadie pudiera tocarles ni siquiera un pelo, ahora tenía dos chicas que proteger de todo y contra todos.

Hope no dejaba de comparar cada uno de sus rasgos con nosotros, estaba tan enamorada como yo de nuestra bebé, la imagen de ambas calentó mi pecho y aceleró mi corazón, creo que por primera vez en toda mi vida sentí eso que llamaban kairosclerosis, el justo momento donde uno se daba cuenta de que era feliz. No tenía nada más que pedirle a la vida, yo ya lo tenía todo y estaba más que conforme, después de haberme quitado tanto me había recompensado con las preciosuras que veía desde el sofá de la habitación de hospital, Hope sostenía a Kaunis entre sus brazos, la pequeña castaña usaba un body con pequeños osos panda en la tela además de contar con una manta celeste que la envolvía, mientras su madre acariciaba su rostro fascinada.

La puerta se abrió despacio dejándome ver a Fabiana, Kim, Ron y Wad, sabía que Flash esperaría a que el revuelo pasara para hacer acto de aparición.

―Hola, familia ―susurró Hope con una sonrisa y voz de bebé, sabíamos que por la primera semana era mejor que solo nosotros dos cargáramos a la princesa, según el doctor eran los días más vulnerables para los recién nacidos

―Mi nieta es hermosísima ―la miró con adoración colocándose junto a Hope y besando su cabello

―Felicidades, hermano, tienes a una verdadera belleza por aquí ―dijo Wad palmeando mi hombro tras verla, sonreí mirando a mi hija

―Oh Dios, es taaan tierna ―susurró Kim haciendo un puchero

―Tendrán que espantar a muchos ligues de su alrededor, queridos padres ―habló Ron riendo y contagiando a Hope con su alegría

―Se parece muchísimo a ustedes ―añadió Fabiana

―Sus ojitos tienen heterocromía como los míos, pero tiene la naricita, el cabello y los labios de Bash ―explicó Hope ―Es tan hermosa ―reiteró buscando mi mirada

―Lo es ―dije yo acercándome para tomarla en brazos, quería sentir la calidez de su pequeño cuerpo contra mi pecho

―Debo tomar fotografías de este momento ―dijo Wad

―¡Sin flash! ―advirtió Hope exaltada haciendo que cierta señorita comenzara a abrir sus ojos y a lloriquear por la interrupción de su sueño, sonreí al verla haciéndome pucheros en un claro signo de protesta

―Mamá te ha despertado, ¿eh?

―Lo siento, cariño ―se disculpó la aludida estirándose un poco para alcanzar a verla