un mismo camino (Antoine Griezmann) 2°PARTE

cap 91

Veo a las niñas bailar junto a Antoine frente al televisor, en esta casa cuando las niñas pedían bailar cantajuegos o pica pica eso era lo que se hacía.

Mi celular comienza a sonar y lo tomo para salir al patio y contestar la videollamada de Bea.

- hola guapísima! - sonrio apenas le veo en la pantalla tan sonriente como siempre.

- como estas? Os extrañamos montones! - hago un puchero.

- estamos bien, ustedes como están...yo también los hecho mucho de menos - sonrio.

- estamos bien, dime cómo vas con esa barriga, muéstrale ya! Que hace bastante que no te veo y videollamada no tenemos hace un mes..

Levanto mi celular y enfoco mi vientre y la expresión de Bea cambia a una de asombro.

- estoy flipando mujer! Dios estas que explotas

- gracias he - río y ella hace igual.

- en buena forma mi lauri, estábamos pensando en ir a veros, pero pues koke comienza con los entrenos esta semana y no quiere que me lleve a Leo.

- muéstrame a ese precioso - Bea mueve un poco la cámara y a lo lejos se le ve a Koke y Leo jugar animadamente. - por dios que gran que esta ya quiero verlo.

- si, os queremos ver....

- pues yo debo ir a Madrid, hay cosas que quedaron en casa, cosas que guardamos para el bebé y me han llamado que han llegado unos paquetes de regalos que han enviado, no todos saben nuestra dirección nueva.

- vais a venir - asiento. - ¿cuándo?

— pues espero que esta semana o la otra, debo convencer a Antoine no quiere que me mueva de casa por nada del mundo.

– pues mírate mujer, que con esa barriga no puedes hacer mucho.

- la verdad no - Río.

Hablar con Bea era costumbre desde que nos habíamos mudado, la verdad es que la extrañaba montones. Pasaba de poder estar toda una tarde con ella a solo tener un par de minutos de llamada o videollamada con ella y aveces con koke.

Le cuelgo la llamada después de unos casi quince minutos hablando y poniéndonos al tanto de todo para volver a entrar a la casa.

— quería hacer pasta para cenar – me tiro al sofá junto a Antoine.

– no prefieres que pidamos algo - deja el juego de la play en pausa y me mira para acariciar mi mejilla y dejar un suave beso en mis labios.

Sonrio ante ese acto y digo:

— prefiero cocinar algo, y la pasta es más fácil – río. El asiente y se levanta. – adonde vas?

— a cocinar pasta – arqueo una ceja y río. – me quieres ayudar.

Niego.

- te dejaré a ti esta vez, espero que te quede buena... bañar a las niñas mientras tanto.

Me voy hasta la sala de juegos y después de un rato convenciendo a Julieta lo logro y vamos hasta el baño de la segunda planta.

Ellas se quitan la ropa como pueden mientras dejo la tina llenarse y poner jabón para que se haga espuma.