un mismo camino (Antoine Griezmann) 2°PARTE

cap 97

Narra Laura.

Abro los ojos cuando siento que tocan la puerta y cuando Antoine pide que pasen entra la enfermera con comida y detrás mi ginecóloga.

– hola, hola - saluda animada, me acomodó despacio en la camilla y ella revisa unos papeles que colgaban de la camilla. – todo ha salido perfecto a pesar de todo.

— porque se adelantó? Eso no es nada malo verdad ? - pregunto de inmediato y ella niega.

— cuando anteriormente se han sufrido pérdidas en gestación es normal que un próximo embarazo se adelante unas semanas...además el sangrado nos alertó de que existía placenta previa, tuvimos que ingresarte de urgencia ya que eso podía haber causado hemorragia mayor y quitarle el oxígeno al bebé, pero todo está bien.....ahora debes descansar y disfrutar de tu bebé. – sonríe.

— cuantos días debe estar más o menos ....– antoine me da una mirada y luego mira a Luisa.

– la cesárea contiene muchos más cuidados, son aproximadamente unas 6 semanas que tu cuerpo tarda en recuperarse, no puedes hacer fuerza, movimientos brusco....debes tener cuidado con la herida y puede que sientas dolores parecidos a los cólicos. Es tu primera cesárea – asiento – te daré una dieta por un tiempo y debes seguirla.

— perfecto, eso estaría bien.

– y pasarás esta noche y otra aquí para estar seguros de darte el alta, se te hará curación de la herida y todo – dice mientras anota en una hoja.

Luisa nos da un par de indicaciones más y sale de la habitación. Me levanto un poco y estoy por comer cuando mi pequeño comienza a quejarse desde la cunita.

— y comenzamos – dice antoine entre risas y se acerca para tomarlo. – creo que se hizo ‐ ríe.

Levanto mis brazos y me lo entrega, lo pongo sobre la cama donde me encuentro y le quitó despacio y con cuidado la ropa.

— acercame las cosas – río cuando me queda mirando.

Hace lo que le pido y acaricia la mejilla de Amaro cuando comienza a llorar.

- que extraño es esto, solo he cambiado el pañal de niñas – río y comienzo a limpiar.

— acostúmbrate porque sabes que me da miedo cuando están muy chicos. – ruedo los ojos y niego.

– vas a tener que hacerlo igual.

Aprovecho y le cambió la ropa por un conjunto de color azul marino que Theo y Marie habían regalado antes de venirnos a España otra vez.

El celular de Antoine suena y contesta rápido.

— Theo, me dice que llegaron....van a casa y luego vienen.

Narra Antoine.

Salgo del hospital y comienzo a mirar por el estacionamiento hasta que veo a Mía y apenas me visualiza corre hacia mi seguida de Julieta.

— papi – gritan ambas y me abrazan.

– hola mis princesas — las tomo a ambas entre mis brazos y me levanto para besar su mejilla.

– ¿mamá? – dice julieta mirando a los lados buscándola.

— esta adentro, quieren ver a su hermanito – julieta niega y Mía asiente sorprendida.

Río ante la reacción de Julieta y las bajo para saludar a mi familia.

Theo, mi madre, mi suegra y mi padre.

— a salido todo bien verdad? – pregunta Amalia.

— si, todo a salido bien fue parto de emergencia pero esta todo bien – digo cuando entramos al elevador y este comienza a subir.

Llevaba a ambas niñas de la mano y una estaba más contenta que la otra, ya sabíamos con quien íbamos a tener que estar pendientes. A Julieta parecía no agradarle la llegada de su hermanito por ahora.

Narra Laura.

La puerta se abre y mis niñas corren hacia mi.

— cuidado! – antoine llega y toma rápido a Julieta cuando está por saltar sobre mi para abrazarme.

— hola mis hermosas – beso a Julieta y luego a Mía. – se han portado bien?

Ambas asienten.

– julieta a llorado y después se ha dormido – río acaricio la mejilla de ambas para luego saludar a los demás que en realidad ellos se acercan a saludarme a mi y a ver al pequeño que dormía nuevamente en su cuna.

— es el bebé? – pregunta Mía y todo rien.

Asiento y lo tomo con cuidado entre mis brazos para acercarlo a ambas.

— es su hermanito, se llama Amaro – dice Antoine y se acerca hacia nosotras.

Ambas niñas miran curiosas al bebé y Mía es la primera en darle un beso que enternece a todos y Julieta lo mira sin reaccionar. Para ella era la primera vez viendo a un bebé tan pequeño caso que para Mía era muy diferente ya que había visto a Julieta de recién nacida y también al bebé que Erika había tenido.

— es un bello nombre, quien lo escogió? – dice mi madre sonriente.

– Antoine, le he dado el poder de elegir el nombre – río – lo ha hecho bien. - Lo miro y sonríe.

Estaba muy feliz de que estuvieran todos aquí conmigo y apenas hubo tiempo le llamamos a Bea, Martín, Maud y Godin para que conocieran al nuevo integrante de la familia.

— en mi habitación en el primer cajón del mueble que está al lado de la puerta están las llaves de las habitaciones, las teníamos cerradas porque las niñas juegan a las escondidas – dice Antoine.

— deben hacerle caso a las abuelas, entendido? – Mía asiente y Julieta se mira las manos – Juli, entendido? – ella asiente. — yo aún no volveré a casa y si quieren que vuelva deben portarse muy bien, le soy un beso a cada una en la frente. Os amo muchísimo.

— mucho – dice Mía y se acerca para abrazarme.

Le doy un beso a ambas y luego me despido de los demás.

El horario de visitas había acabado y me daba pena ver a mis niñas irse, no solía pasar mucho lejos de ellas y ahora serían dos noches en las que yo, no sería las que le diera el beso de buenas noches.

– se siente raro estar sin las niñas — Río y pongo un poco de la cena en mi boca.

— solo espero que se estén portando bien.

– eso espero - lo miro y se pasea por la habitación con el pequeño recién nacido entre sus brazos.

— sabes que puedes ir a casa, no quiero que duermas en el sofá - señaló el sofá cama de la habitación.

Antoine ríe y luego niega.

— me voy a quedar, quiero ayudarte si es que lo necesitas, además estas operada... No tuviste un parto como antes — hago una mueca y asiento.

No dejo de mirarle y parece tan feliz con el bebé entre sus brazos que hasta se le forma una sutil sonrisa, nuestro pequeño había llegado y eso nos ponía muy feliz.