❝La ironía del dolor es que quieres que te consuele quien te lastimo❞
Autor desconocido
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Trato de adaptarme al lugar en donde estoy.
Un hospital...
Me levanto en un rápido movimiento y el dolor a mi costado, junto al dolor en mi cabeza me hace gritar.
Una enfermera llega poco después y me ayuda a incorporarme. También me explica que tengo una costilla rota y una conmoción cerebral. Eso explica el dolor.
Los recuerdos me golpean en una rafaga, como si de una película se tratara.
Ahora lo entiendo, un hospital. No puedo estar aquí.
Mi madre no vendrá y si servicios sociales...
Trato de levantarme pero el dolor y la aguja en mi mano me lo impide.
Theo entra en ese momento y las ganas de llorar se hacen presentes.
—¿Cómo te sientes?— pregunta tratando de acercarse.
Levanto mi mano para que se detenga y omito su pregunta.
¿Cómo te sientes?
Por favor, un carro me atropelló.
¿Qué quiere que le responda? Estoy mejor que nunca, en serio que estupidez.
—Theo, necesito que me saques de este lugar— es lo único que digo.
—Ashley, escúchame— se acerca a mí. Quisiera alejarme pero a penas puedo mantenerme sentada.
—No ahora, solo por favor. Tú sabes lo que significa que mi madre no vaya a aparecer— vuelvo a hablar para que se calle. No ahora, no estoy preparada para la verdad.
—No puedo hacer eso, necesitas a la persona que está a tu cargo para salir de aquí, solo he conseguido verte. Ya van dos días y pronto llamarán a servicios.
No, no pueden hacer esto. Por su culpa no puedo pasar por esto
—Llama a mi madre, tal vez conteste— no, no lo hará y si lo hace. Simplemente se alegrara de verme aquí.
—Ashley…
—¡No! Tu sabes lo que eso significa para mi. Me llevaran con ellos, no lo hagas. Solo dame un telefono lo intentare.
Mis manos tiemblan marco al que según yo es su número.
No contesta.
—Por favor— suplico— ¡Contesta!— grito al borde del colapso.
—Calmate lo arreglare— se inclina para darme un abrazo e inmediatamente me alejo.
