Hermanos De La Mafia

Oficial

Una canción comienza a sonar y de fondo en la canción se va reproduciendo la voz del cantante. Luka toma un micrófono que había en una mesa alado del DJ. Se pone en medio de todos los que están presentes y todos hacen una ronda para observarlo a él. Las luces blancas lo están apuntando directamente. Él me mira con nerviosismo y luego mira a mis padres que están detrás mío. Yo los miro y me alejo al costado. Él suspira mientras la canción sigue reproduciéndose. Puedo notar que sus pupilas están completamente dilatadas, como si hubiera preparado esto por meses.

La voz del cantante se corta de repente pero aún la música seguía sonando y él prende el micrófono mientras observa a mis padres sin perderlos de vista. Ellos también lo están mirando de frente.

Él se arrodilla mientras la luces lo seguían apuntando, levanta la cabeza y empieza a cantar. — Can I have your daughter for the rest of my life?. (Puedo tener a su hija por el resto de mi vida?).

Sonríe. — Say yes, Say yes, 'cause I need to know. (Di que sí, di que sí, porque necesito saberlo).

Mis padres me miran con una sonrisa y yo a ellos. Sinceramente no podía explicar cómo me sentía.

Era un sentimiento tan inexplicable, como cada parte de mi cuerpo sentía hormigueos que me hacían poner la piel de gallina y mis ojos estaban lagrimosos.

Es como si Luka fuera todo lo que necesito. Porque lo es.

La música se había apagado lentamente y él quedó mirándolos esperando una respuesta con el corazón en la boca.

Mi padre y mi madre se acercan a él levantandolo del suelo. Ambos se miran entre si y por último lo miran a Luka. — Sí Luka, completamente aceptado de tenerte como yerno. — Mi padre le comparte una sonrisa.

Mi madre lo abraza. — Sos parte de la familia.

Yo me tapo la boca por los pequeños sollozos que salían de mí, todos los días me enamoró aún más de Luka y es algo que solo él podría lograr.

Luego de los abrazos que tuvo con mis padres me miró y yo sonreí. Mira al DJ avisándole de poner algún tema lento para que bailen las demás personas. Escucho como empieza a sonar una linda canción que reconozco con solo el inicio.

Say You Won't Let Go

Me mordí el labio por la cantidad de emoción que sentía y que no podía expresar por la cantidad de personas observandonos.

Él me vuelve a mirar y se acerca lentamente a mí. Estamos a unos centímetros de lejos y él extiende su mano hacía mí. Yo me río y tomo su mano.

Él delicadamente me toma para acercarnos cuerpo a cuerpo, con su otra mano en mi cintura. Los dos nos miramos y el mundo desapareció.

Las luces ya no nos apuntaban, las personas comenzaron a bailar con otras personas, mi padre bailaba con mi madre. Y yo... yo bailaba con mi ángel.

Pongo mis dos manos alrededor de su cuello mientras la música de fondo inundaba mis oídos dejándolos descansando en un paraíso de aguas cálidas.

Nos movemos de un lado a otro con pasos lentos, concentrándonos en el contacto de el otro. Puedo sentir su aroma invadir mis fosas nasales, olía tan malditamente bien.

La delicadeza con la que me sostenía parecía ser que estuviera tocando la flor más frágil y delicada que pudiera existir. Sabiendo que con cualquier movimiento podría romperla. Y él hace lo imposible para no lastimar ningún pétalo.

— ¿Estrellita?. — Me susurra al oído luego de unos minutos balanceandonos de un lado a otro. Yo estoy con los ojos cerrados disfrutando el momento, pero aún así le respondo.