Final

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Jennie y yo estábamos saliendo de la ciudad, nos acabamos de casar y nadie lo sabía, era viernes por la tarde y habíamos dejado a Jisoo en casa de mi hermana por todo el fin de semana mientras que a Lisa y Rosé les di las llaves de la casa para que duerman ahí y cuiden a Arceus.

Llevaría a Jennie a una de las casas que estaban apartadas de todo. Es una casa muy linda y un poco grande, hay un lago ahí mismo y todo está lleno de árboles y plantas, hay bastantes guardias que cuidan el lugar por lo cual es muy seguro.

Ya habíamos comprado cosas para comer y beber mientras estuviéramos ahí. Ella estaba muy feliz, lo podía notar en su sonrisa que no desaparecía aun si le dieras la peor noticia del mundo.

Ella comenzó a contarme lo que pasó hace dos días cuando fue al centro comercial con sus amigas.

– Estábamos en una tienda de ropa y ahí estaban mi mamá y mi hermana... fingí no haberlas visto y por un momento me separé de mis amigas porque estaba viendo un vestido – Sonrió.– Mi hermana se acercó a mi y comenzó a reír de la nada y me dijo "¿Ya te vas a casar?", yo la ignoré hasta que mi madre se acercó y me miró, ella dijo "Apenas y tienes 18... debes de dejar de gastar el dinero de tu padre en cosas tan caras como ese anillo" – Tomó mi mano.– Yo las miré a las dos, enserio me sentía molesta y solo me iba a alejar de ahí hasta que miré que mi padre también estaba ahí y se acercó a ellas... en realidad quería hacerlos enojar y lo único que les dije fue "Si me voy a casar, y con una chica"... mi padre se molestó bastante y me alejé de ellos...

– Debes de dejar de meterte en problemas – Reí.– Probablemente hagan un alboroto cuando sepan que te casaste conmigo.

– No importa... no pueden hacer nada – Me miró.

– Bueno... olvida eso – Dejé un beso en su mano.– Quiero que disfrutes este fin de semana.

– Te ayudaría a manejar... pero no conozco por aquí... – Comenzó a mirar el lugar.

– No te preocupes – Sonreí.– De hecho ya entramos al pueblo pero nosotras estaremos aún más alejadas de todos.

Después de treinta minutos, llegamos a esa casa, Jennie estaba muy emocionada al verla, además que en el lago pudimos ver a muchos patos nadar en el.

Nos bajamos del carro y entramos a la casa en donde Jennie me abrazó de inmediato.

– Te amo – Me sonrió.– Cargame...

Cargué a Jennie y ella comenzó a dejar besos en mi rostro mientras sonreía.

– Limpiaron la casa antes de venir aquí... todo está limpio – Sonreí.

– ¡Te amo! – Gritó feliz mientras me abrazaba y sonreía.

Me acerqué a la sala y me recosté encima de ella en un sofá.

– No sabes lo feliz que me haces cada día... lo siento si algunas veces puedo ser un poco molesta o si me enojó por muchas cosas... pero aún estando enojada no quiero que te vayas de mi lado, eso no me pasa ni por la mente, eres la personas más importante en mi vida y quiero que lo sigas siendo – Tomó mis mejillas.– No sé como más expresarlo...

¿Expresarlo?, me gustaría expresar lo que yo siento por ti.

Ese frío día... mi única intención era ayudar a mi mejor amigo... a mi hermano... y sin querer... te vi crecer a mi lado, tu mano comenzaba a volverse más grande cada vez, tu cuerpo cambió... incluso tu voz un poco...

El inicio de esa historia siempre la tengo presente en mi memoria.

Fue un poco extraño, una chica menor de edad estaba enamorada de mi y sabía que eso estaba mal... sabía que estaba mal amarte, pero podía esperarte toda mi vida. Cuando aclaré mis sentimientos por ti, estaba decidida, no te podía dejar ir... y por eso te pido perdón, por tocar tu cuerpo cuando no debía, por besarte cuando era un delito y por ser un poco egoísta y solo quererte a mi lado, pero tú... lo hacías imposible, así que fue nuestro gran secreto al cual me lancé sin protección porque sabía que yo te amaba.

Es tan difícil de explicar... solo podrían entenderlo si fueran yo...

El tiempo ha pasado y seguimos juntas. Eres como un Ángel para mí, que me abraza con sus alas tan cálidas como la primavera y tan suaves como una pluma. Cuando me besas, siento que el universo me está besando... recorro galaxias infinitas en tus labios y me pierdo en tus ojos donde tu corazón es mi guía hacia la luz que me ilumina cada día... esa luz eres tú.

Mi corazón con el tuyo se ha quedado por decisión propia y será feliz por el resto de la eternidad mientras tú sigas aquí.

El tan solo pensar que podrías irte... me destroza el alma... ¿Y si ese sueño hubiera sido real? Yo sin ti mientras solo me encerraba en nuestros recuerdos que nunca volvería a vivir... pero no fue así... siempre estuviste a mi lado aunque te quería alejar de mi...

Quiero que sonrías por siempre... quiero ser yo la persona que cause esa sonrisa en tu rostro... ser la persona que te inspire en ser tú misma cada día, quiero cuidarte y protegerte de todo el mal de este mundo... no mereces todo lo que haz vivido... algunas personas te odian sin razón, menosprecian tu trabajo y hasta critican tu cuerpo... pero para mi, tú eres la mujer perfecta...

Jennie, tú y yo... eso es lo único que quiero... ser tú y yo.

– Por eso... te amo... 

Te amo, Kim Jennie, eres la persona más hermosa que conozco, tus hermosos ojos que me gustaría retratar en un lienzo y tu cabello que suelo secar en las noches cuando quedar dormida... son solo dos simples ejemplos de todo lo que amo de ti...

Te amo de pies a cabeza sin excepciones, eres demasiado para cualquiera otra persona que no sea yo, se todo de ti y sabes todo de mi, no hay secretos entre las dos, no hay nada que nos incomode o algo que nos desagrade de la otra...

Si todo esto es así... es porque fuiste hecha para mi.

¡Solo Son Siete Años!  - Imagina con JennieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora