Capítulo 7

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–Naru, no quiero lastimarte porque eres lo más preciado para mi, deseo que seas feliz cada momento de tu vida– Itachi hablaba con su omega antes de poder tomarlo, estaba en su momento más romántico para ambos y no querían que esa atmósfera se rompiera.

–Mientras yo esté seguro de que no me lastimaras, tu también debes pensar lo mismo, por favor– sin el beso los labios de su alfa que con tanto deseo guardaba por su omega, las cosas que pasaran después no les importo, Itachi estaba seguro que seria un alfa digno de Naruto.

El momento se volvió más apasionado, los besos del alfa viajaron al cuello del omega donde se encontraba el punto más sensible dejando sonrojado al menor, su cuerpo por alguna razón pedía que esto no se detuviera jamás porque amaba sentir las manos de su esposo en su cuerpo. Cada toque tan delicado se expandia por todo su ser que pedía a gritos ser tomado ya pero aun no era tiempo, pues el alfa se encargaria de que el omega disfrutara la noche de bodas y las noches que faltan.

–Ita.... por favor ahh... ahí no... ahg– en algún momento de la situación tomo sus pezones rosados fueron prisioneros uno en su boca y otro en su mano derecha, ambos estaban bajo el control el alfa que trataba de dale una mejor experiencia a su amado omega.

–No me pude contener, lo siento– Itachi lo miraba con amor, sus ojos desbordan un amor que nadie pude explicar con palabras, este alfa era uno especialmente hecho para el omega y el omega nació para ser la persona con la que compartiría su vida ahora.

–Me tomo por sorpresa, pero... me gusta que lo hagas, mientras seas tú quiero que me tomes cuantas veces desees porque me entregare por amor– esas palabras bastaron para poner rojo al omega, Itachi con todo el amor del mundo lo miro y siguió con lo cometido.

La toalla del alfa desapareció y la ropa sexy que usaba el omega de igual manera desapareció, todo esto fue obra de la pasión qué sentían ambos al quererse entregar el uno con el otro, sin saber el porqué desearon que esta noche durara para siempre.  Itachi miraba con pasión el cuerpo de su esposo que estaba con una mano sobre su boca tratando de no gemir fuerte, mientras que la otra mano de su amado estaba en la nuca que lo jalo para darle un beso tierno y seguro con lo suyo.

Tocar cada parte de la anatomía del contrario era como estar en el cielo, el alfa demostraba todo el amor en cada beso que repartía por el torso del pequeño que estaba dando sutiles gemidos de placer, esa voz tan angelical le daban más maneras de vivir, con esos hermosos ojos llenos de lujuria y que cada movimiento del mayor le daba placer al menor, pero este no se quería quedar atrás así que tomo al alfa y con un giro inesperado quedo encima así para poder besarlo al antojó que traía, ya no le daba pena por enseñar esa hermosa marca en su abdomen pues su esposo se volvia loco de verla ahí impregnada.

En un descuidado momento Naruto termino boca abajo, este era la pasión más caliente que Itachi vio en su vida a sus 20 años, ¿cómo un omega de 14 años podía poner así un alfa de su edad? Simplemente porque es perfecto. Comenzó a tocar el redondo y hermoso trasero, a su ves también estimulaba la entrada al paraíso... esto era mejor que recordar su pasado, Naruro olvido que alguna vez se metió con un tonto como Sasuke para darle paso a su hermano que lo enamoro en solo un años, por algo se entregaria al hombre que ama.

–Mmm ya estas listo, empezaremos a entrar poco a poco– Itachi con su voz ya muy seductora tomo el gran tabu de su omega que gimio al sentir una invasión en su interior, algunas lagrimas salian porque fuera como fuera la situación es su segunda vez y la anatomía de su esposo no era para nada normal, esa cosa estaba entrando dentro y solo podía sacar lagrimas de dolor y placer combinados, los que hacían una perfecta extinción dejando el momento más hermoso, el alfa al terminar de entrar con mucho cuidado empezó a mover sus caderas dando pequeñas estocadas, sacando gemidos de ambos chicos que por más que fueran al saber ya del placer que sentía al tocar sus cuerpos, sentirse completos, entregarse un al otro y por fin tal vez dar a un heredero a la familia Uchiha, no estaba mal ese pensamiento del rubio que disfrutaba todo lo que sentía al poder ser tocado de esta manera tan diferente y pecadora que según estaría prohibido en algunos lugares según las leyes.

Aquí solo importaba que ellos se amaban, sentían el amor que daban atraves de cada movimiento, cariño, beso, toque, estocada por parte del alfa y esto jamas lo querían sentir con nadie más... es hacer el amor con la persona que más amas, todo esto estaba mejor y se esforzarian para dar lo mejor de ambos y ser la pareja perfecta.

–Ita... Me voy ahg... voy a terminar.... por favor dame un hijo– una frace que nunca se espero el alfa y que con ella terminaron su encuentro al mismo tiempo, también no se podía abusar de un pequeño cuerpo ahora, tal vez unas tres veces por semana si.

–Mi amado omega, quiero ser tuyo siempre– la respiración del mayor estaba acelerada todavía pero se va calmando poco a poco.

–Yo mientras siga siendo Naruto Uchiha sere el mejor omega para su esposo– esto lo dijo feliz el omega para luego caer totalmente dormido en el pecho de su esposo que le dio un beso en la frente y sin más ambos callaron en los brazos de nuestro amado dios Itachi, tomando una posición muy hermosa, era su primera noche como esposos y fue la mejor que tuvieron ahora que ya son uno mismo en todos los sentidos.







~•Editado•~


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 El Destino Me Dio Dos Alfas (Itanaru Y Sasunaru)  *EDITANDO* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora