𝗭𝗮𝗻𝗻𝘆𝗮 [+21]

Capítulo. 7

Annya.

Me giré hacia Noah, uniendo nuestros labios en un beso, que poco después él siguió, no sentía nada solo incómodidad.

¿Por qué lo estaba haciendo?, No lo sé, solo sabía que Zeus miraba desde su lugar sin inmutarse, él me ponía muy nerviosa y no sabía por qué.

Ni me di cuenta en que momento me aleje de Noah, él parecía confundido aún, pero no hizo más preguntas, solo me sonrió ladino y se marchó con prisa del lugar, ¿Lo volvería a ver?, no creó y agradecía mucho eso.

— ¿Terminaste de armar tu teatro Founier? — la voz de Carlo, salió amenazante causándome escalofrío.

En que momento había llegado, ¿Cuánto tiempo lleva aquí?, ¿Vio todo?, gire mi cuerpo en dirección a él.

— Lo sient… — Zeus me interrumpió.

— No señor déjela, no estaba haciendo nada, el chico estaba tomado y la quería besar, pero le advertí que era mejor que se fuera.

Caminó en mi dirección, pidiendo permiso para subir la cremallera de mi escote, al cual solo asentí confundida.

— ¿Eso es verdad Annya? — pregunto Carlo, masajeando su barbilla.

Zeus me regaló una sonrisa y en ese momento sentí una sensación extraña, algo difícil de explicar, pero algo que jamás había sentido.

— S… Si, si fue eso, el chico me tomo por sorpresa, y Zeus, bueno el señor intervino, emm… ahora voy al camerino, lo siento — tartamudee, espero no haya notado la gran mentira que dije.

Me alejé del lugar dejándolos solos, cuando entre al camerino por fin pude soltar todo el aire que estaba reteniendo desde hace unos minutos.

¿Qué mierda acababa de pasar?, mierda de verdad deseaba que Carlo no haya pillado mi mentira, sino que es capaz de correrme, y estaba muy desconcertada por la actitud del rubio, él era tan aggg, pero me hacía sentir tan rara. Deslicé el traje de enfermera por mi cuerpo, quedando en ropa interior, me senté frente al tocador cepillando mi cabello, tenía hambre, no había desayunado bien ni comido, mi estómago ya hacía ruidos extraños, quite el maquillaje rápidamente de mi cara y me coloque mi ropa, tome mis cosas para salir del lugar.

— ¿Tan rápido te vas Founier?.

Ay no, era el de nuevo, no tiene algo más importante que hacer, molestar a otras personas, contar numeritos, no lo sé cualquier cosa.

— No puedes estar aquí, sal ahora mismo — dije con un poco de molestia.

— Yo puedo estar donde yo quiera preciosa — sentí su mirada tras de mí, pero le ignore, camine hacia la puerta, para salir del camerino y poder ir a comer y descansar, pero su cuerpo se interpuso en mi camino.

— Zeus, podrías quitarte, quiero irme de aquí — lo esquivé de mi camino, logrando llegar a la puerta y abrirla.

— ¿Para qué vayas con tu noviecito?— cerró la puerta de golpe con una mano, acorralándome en ella, trague en seco y voltee hacia él, se acercó tanto que quede inmóvil y a pocos centímetros de su cuerpo.

Me intimidaba y él lo sabía, le divertía tenerme así.

— Estoy cansada, quiero ir a casa — un borborigmo se hizo presente y sabía que moría de vergüenza, porque mi cara ya ardía.

— ¿Vamos a cenar preciosa? — me sujetó de la mano, llevándome por todo el lugar hasta salir del club, no tuve tiempo de decir una palabra, solo dejé que me guiara.

Básicamente me arrastraba, porque hasta olvide como caminar, su mano era tan grande y suave, su aroma tan masculino me tenía por las nubes, aún no podía analizar lo que pasaba, porque hace un rato estábamos peleando y ahora me invitaba a cenar, ¿Era lo correcto?, no, no lo era, debía parar esto ya.