Capítulo 61

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Crear una mentira podía hacerte ganar mucha popularidad, escalar desde lo más bajo hasta llegar a la cima. Sin embargo, cuando todo llega a su punto máximo suele salirse de control y los problemas aparecen, y de estar en la cima, caes hasta donde estabas en el principio o peor.

Y eso es lo que Luis estaba a punto de experimentar....

Días después de que Luis intentará impresionar a la niña que le gustaba diciendo que Bren era novio de Vic, la mentira se esparció por todo el salón y como era de esperarse le fueron agregando más y más cosas haciendo la bola de mentiras aún más grande que hasta la maestra se enteró porque los niños dejaban de prestar atención a clase por hablar de "Luis el millonario" "La niñera de Luis y su novio millonario", al principio lo tomó como algo inocente, hasta que las madres de los niños comenzaron a opinar respecto a la situación, volviendo los chismes y rumores aún peores.

Durante casi una semana Luis estuvo rogando para que Brendan lo llevara a la escuela, el lado bueno es que gracias a la insistencia de Luis, Bren obtuvo un poco más de paciencia y tolerancia con los niños..... O al menos solo con Luis y Sophia.

Lunes, martes y miércoles, Bren llevó a Luis a la escuela, ganándose la atención de las mamás que murmuraban entre sí después de escuchar todos los rumores que inventaron los niños. A Brendan le daba igual lo que decían, la gran bomba explotó cuando los días siguientes; jueves y viernes, Aidan se ofreció a llevar a Luis en lugar de Bren.

—¿Puedes peinarme? —le dijo Luis a Aidan acostumbrado a que Bren le pasara una mano por el cabello despeinandolo pero se quedó en la espera y Aidan no lo hizo, en su lugar le pasó un cepillo aplastandole más el cabello.

—Más peinado no puedes estar. —dijo Aidan riendo. Luis forzó una sonrisa y pasó su mano por el cabello.

—G... Gracias. —dijo Luis. —el Ángel lo hacía mejor. —dijo riendo. —nos vemos! —se despidió.

—¿Qué Ángel? —preguntó Aidan, pero Luis ya se había ido, después de hacer memoria recordó las varias veces que Luis llamó así a Bren y no pudo evitar sentir celos. Enojado volvió a su auto y se fue.

Mientras Luis entraba a clases llamando la atención de todos sus compañeros. Todo transcurrió normal, hasta la hora del recreo. Luis estaba tomando un jugo mientras conversaba con varios de sus compañeros, la mayoría niñas, que estaban todos a su alrededor.

—¿Porque le prestan tanta atención?—dijo un niño acercándose seguido de otros dos. —el mundo no gira alrededor de Luis. —rodó los ojos.

—Tampoco alrededor tuyo. —dijo Luis sin prestarle mucha atención. El niño se quedó callado buscando otra forma con la cual molestar.

—¿Cómo saben que todo lo que dice es verdad? —dijo el niño cruzandose de brazos. —solo es el hijo de un simple entrenador, con un simple niñera. —Luis fruncio el ceño levantándose. Mentalmente intentaba repetir todo lo que Bren le había dicho en el parque. —es un mentiroso.

"Nunca debes cortar el contacto visual, si dejas de verlo pensara que estas asustado"

—Solo estas celoso de que Luis conozca a alguien millonario. —dijo la amiga Luis.

—Ay porfavor. Mi abuela es millonaria. —se defendio el niño.

—¿No que tú abuela era piloto de avión la otra vez? —dijo Luis ocultando una sonrisa. —Uh también habías dicho que manejaba motocicletas. —se burló.

—Y que había sido astronauta. —dijo uno de los cómplices del niño apoyando a Luis llevándose una mirada amenazante de parte de su amigo.

—Parece que el mentiroso es otro. —dijo Luis terminando su jugo, lo tiro en la basura e intentó irse, pero el niño bravucón no se rendía.

Two different worlds (español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora