Two different worlds (español)

Capítulo 71: T2

Un mes después...

—No es una pregunta Nena, te estoy avisando, irás conmigo. —dijo Bren estacionando. La estaba convenciendo de ir a un baile que su familia había organizado.

—No quiero ir... Sabes que no me siento cómoda estando con... Pues... Ellos... —dijo Vic jugando nerviosamente con su cabello. Bren resoplo.

—¿Y crees que yo si? —Vic frunció los labios mientras bajaban del auto y caminaban hacia la casa. —solo voy porque es parte de mi trabajo.

—Pero tú los conoces... A mi me van a juzgar apenas me vean...

—La opinión de ellos no vale. —dijo Bren tocando su sien. —Solo la tuya, recuerdalo.

—No quiero ir. —hizo un puchero.

—Es solo un baile. —dijo Bren. —pero  bueno... si no quieres no vayas... Allá tendré que buscar a alguna chica que lleven mis primos para que me haga compañía. —Vic lo vio entrecerrando los ojos sintiendo una punzada de celos.

—Eso es chantaje. —dijo cruzandose de brazos.

—Es psicología inversa. —dijo Bren sonriendo de lado. —¿Quién dijo que no se aprende nada al salir con una psicóloga? —rió. Vic levantó una ceja.

—Bien, iré. —dijo Vic. —¿Cuando es?

—En un par de horas. —dijo Bren viendo su reloj. Vic lo vio incrédula.

—¿Cómo qué en un par de horas? ¿¡Es hoy!?

—Eeeh, sí. —dijo Bren sonriendo inocente.

—Pero, pero, pero...

—Adentro te están esperando. —dijo Bren viendo su teléfono. —Está todo lo que necesitas.

—¿Todo? —preguntó Vic.

—Todo. —dijo Bren abriendo la puerta.

—Señorita Vic, sigame por aquí. —dijo una doncella cuando entraron.

—Te veo en tres horas. —dijo Bren guiñandole un ojo a Vic cuando la doncella se la llevaba escaleras arriba.

—¡Papá! —saludó Sophia viniendo de la cocina. La sonrisa de Bren se amplio y corrió hacia ella para levantarla como si pudiera volar haciéndola reír.

—¿Terminaste todo? —preguntó Bren mientras caminaban hacia el jardín. Sophia empezó a contarle con emoción todo lo que había hecho en el día, Bren vio su reloj, aún era muy pronto para empezar a arreglarse, así que se dispuso a darle todo ese tiempo   a su hija para conversar y jugar con ella. ¿Quién lo diría? Brendan Cooper jugando a defender a la princesa de un dragón.

Después de jugar un buen rato Bren subió a su habitación para darse un baño y cambiarse a un fino y elegante traje negro que se acoplaba a su figura resaltando los músculos de sus brazos, junto con un abrigo largo del mismo color, en su muñeca descansaba un reloj Rolex último modelo, y no olvidemos el detalle del perfume, ese olor sin igual de perfume de hombre cara que puede hacer a cualquier caer rendida a sus pies.

Una vez estuvo listo bajo a la sala a esperar a Vic usando su teléfono. Unos minutos después se escucho a Vic decir desde la segunda planta:

—Ya estoy lista. —Bren guardo su teléfono y se acercó a las escaleras.

—Por fin. —dijo divertido. Pero su expresión cambió cuando la vio. —Ya no tengo tantas ganas de ir a ese baile. —dijo viendo a Vic de arriba abajo, bajando las escaleras con un hermoso vestido rojo que se amoldaba perfectamente a su figura, el cuello en forma de "V" resaltaba su escote de manera elegante, tenía la espalda abierta, la falda caía al final en forma de sirena marcando más las curvas de Vic haciéndola ver aún más hermosa y deseable.