Cronicas de La Academia. Libro 1. Descubrimiento.

Capitulo 21. Parte 1

Me había levantado de un humor de lo más extraño, pues me había descolocado la actitud de Blake la noche pasada, sumándole mi inquietud por la misión, no había podido dormir muy bien, lo peor del caso es que, ese día teníamos una reunión con uno de nuestros superiores.

Nathaniel Smith, alto, moreno, ojos chocolate, cabello azabache, que pocas veces se le notaba pues siempre lo llevaba muy corto, casi al rape y con una actitud de mierda.

Sabía que no nos íbamos a llevar bien desde el día que nos conocimos, quitándole el hecho de que él y Andrew tenían una rivalidad desde sus días de estudiantes y que el había llevado esa rivalidad con su unigénita hija, me había hecho la vida imposible en La Academia desde el primer día, había sido nuestro profesor de "lucha y combate" lo que para nosotros significaba, todo el entrenamiento físico, desde equilibrio, gimnasia, agilidad hasta el uso de armas en movimiento, resistencia física, lucha cuerpo a cuerpo, diferentes artes marciales mixtas, etcétera.

Aparte de profesor de La Academia, era uno de los supervisores de Las Misiones de grado medio, como en la cual nosotros estábamos, según esto, pues a mi parecer esto era grado alto, pero claro, no podía dar mi opinión, solo seguir instrucciones.

Después de tomar mis cereales con Jenny apresurándome pues quería empezar a trabajar en mi cabello, haciéndole los retoques entre otras cosas.

-Enserio Jennifer, si un día te cansas de jugar a los espías - bromee con ella - podrías poner tu propio salón de belleza.

-Esto es como un hobbie para mi Val -me contesto Jenny con una sonrisa en su cara - digamos que me relaja y me ayuda a sacar el estrés.

-Pues a este paso, terminare siendo tu muñeca de juegos - bromee con ella, pues Jenny amaba la moda y el maquillaje, nos solía usar a Helena y a mí como sus modelos, desde que nos conocíamos así había sido.

-Listo - dijo después de unos momentos que me parecieron horas - ahora necesito que te enjuagues el exceso de tinte y después comenzare con el maquillaje - dijo con una sonrisa encantadora al ver mi cara de horror.

-Jennifer que solo vamos a una reunión con Nathaniel - bufé, me gustaba maquillarme y arreglarme como a cualquier chica, pero días como aquel, no tenía ánimos de eso, solo quería esconderme debajo de mis cobijas y morir lentamente.

-Reunión formal señorita - me regaño Jenny medio en broma - anda, vamos que no tenemos todo el día.

-No sé cómo la soportas - le dije bromeando a Helena que iba terminando de desayunar y le daba un ligero golpe a Jenny en el hombro.

-Así como te soporto a ti - dijo riendo y negando con la cabeza, de nosotras tres, Helena era la más madura, seria tal vez por su personalidad, tranquila y realista, que nos hacía poner los pies en la tierra.

-No sé qué sería de mi sin ustedes locas - les sonreí a ambas, eran mis mejores amigas, desde el día uno que habíamos entrado a La Academia, nos habíamos conocido y hecho un clic impresionante, con Jennifer cuando me acompaño a la enfermería a causa de nuestra primera clase de gimnasia, su aura tan tranquila y paciente me había hecho confiar en ella al instante.

Después nos habíamos topado con Helena, era una chica muy reservada y silenciosa, pero algo en nosotras la hizo abrirse con nosotras y desde ese día habíamos sido inseparables, claro que éramos algo peligrosas juntas, miles de travesuras y aventuras habíamos realizado en La Academia, a veces nos llevábamos a Blake entre las patas.

-¿Bonito estas bien? - La voz de Jenny me saco de mis pensamientos regresándome al presente - tienes una finta terrible.

Voltee a ver a mi mejor amigo, que iba entrando a la sala de estar, con su cabello rubio todo revuelto, sus rizos por todos lados, se miraba algo gracioso, tenía los ojos rojos como si no hubiera podido pegar ojo y tenía una finta de enfermo.